3O Días 0TP [HinaMiki]

1º- "Tomarse de las manos"

Los dos chicos estaban en frente de la puerta metálica. Ninguno de los dos se atrevía hacerlo, su miedo hacía que se quedarán paralizados sin poder mover ni un músculo.

—Y-Yo... ¡Lo siento! —en los ojos de la chica comenzaban a brotar pequeñas lágrimas mientras poco a poco caían de su bonito rostro.—

El chico se puso en tensión de repente. Al ver a la joven de cabellos morados llorar desconsoladamente no sabía como responder.

—N-No te preocupes... ¡No ha sido tu culpa! No hace falta que te disculpes... —dijo con una risa un poco nerviosa.—

La chica le miró con una pequeña sonrisa en su rostro, pero con los ojos un poco lagrimosos aún.

—¿S-Seguro? —le preguntó un poco confusa esperando su respuesta.—

—Claro. No hace falta que te culpes, que tengamos miedo no significa que hayas hecho algo malo. Además, yo creo que tu aportas mucha ayuda, Tsumiki-san. —le habló con bastante sinceridad en sus palabras, con lo que la chica de sorprendió por todas las "cosas bonitas" que le dijo.—

Iba a abrir la boca para agradecerle al chico lo que le dijo, pero volvía a recordar que la puerta estaba delante de ellos. Tenía tanto miedo que incluso no pensaba las cosas con claridad. Y eso le hizo decir cosas que ahora mismo sentía.

Se sentía bien con él a su lado.

—H-Hinata-kun... T-Tengo miedo a entrar. —tartamudeaba sin poder quitarse la tensión dentro de su cuerpo.— ¿P-Podrías... D-Darme la mano?

El castaño se sorprendió por esa pregunta tan de repente. Pero al ver tan infantil, pero dulce petición, algo dentro de él no le pudo decir que no a la joven. Así que sólo le sonrió tiernamente y asintió.

—¡M-Muchas gracias H-Hinata-kun! —la pelimorada lo dijo tan emocionada, que sus lágrimas empezaban a brotar de nuevo, y más seguidamente.—

Pero esta vez eran de pura alegría.

—De nada Tsumiki-san. Además, si vamos así juntos... Tendremos menos miedo, ¿no? —le preguntó con una tierna sonrisa y ofreciéndole su mano a la enfermera.—

—¡S-Sí! —la aceptó sonriente mientras notaba como sus miedos empezaban a desaparecer, y tenía la extraña sensación de no parar de sonreír.—

Al entrelazar sus manos, un notorio calor empezó a surgir entre los dos. Y un leve sonrojo pasó entre sus empolvadas mejillas.

—¿Ahora te sientes mejor? —le preguntó el castaño mirando como la chica poco a poco dejaba de llorar.—

—M-Mucho mejor... ¡Gracias de n-nuevo Hinata-kun! —le volvió a agradecer con una sonrisa más amplia en su rostro.—

Ya podían cruzar la puerta que tanto miedo les daba. Daba igual que se hubieran llevado unos minutos para entrar, ya estaban seguros y no les importaba lo que se encontrarían detrás de la puerta.

Se sentían valientes los dos unidos.

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Ay, ya acabé.

Sé que no pueda ser el mejor one-shot, pero por lo menos ahí esta.

Y para mi quedó lindo, no sé vosotros. Por lo menos espero que os haya agradado aunque no lo shippeen (?)