8: El gruñón oscuro

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Pensaré nombres de caps más creativos en cuanto termine la historia... ah pos volví... si quieren leer la nota de pd que dejaré al final del cap... pos yo encantada.
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Cruzaron en silencio el campus  hasta llegar a una zona alejada de las demás cabañas, en frente suyo se alzaba  intimidante la edificación... no es que él temiera a Hades pero su cabaña era... escalofriante; llena de pinturas de esqueletos y diamantes en bruto, además de la madera oscura del porche.
No se quejaba, su aspecto por dentro era un poco más acojedor; varias literas con un pasillo amplio y escritorios en las esquinas de color marrón, mullidas camas con colchas de colores oscuros, un baño propio muy aseado, dos escritorios, y armarios en buen estado. Podría estar muy cómodo allí.

Además, ¡Tendría un hermano! o casi... pero lo importante era que no iba a estar solo.

—¡Luka! Sal, te quiero presentar a alguien—gritó Lee golpeando la puerta del baño.

—Si es una estupidez te echo de la cabaña—se oyó su voz amenazante, al lado del niño, Lee sólo sonrió.

—Si, ajá... vamos, apresurate.

Él chico salió con la molestia pintada en sus facciones, su cabello estaba mojado por lo que debió haberse estado bañando.
Tenía el cabello negro lacio medio largo, ojos oscuros con una mirada asesina, piel pálida y pequeñas pecas alrededor de sus mejillas, era lindo pero con esa expresión daba miedo.

Percy se acercó animado hacia el joven y le pasó una mano, que fue rechazada, tomó un poco de distancia pero no bajó su sonrisa.

—Hola, me llamo Percy, y somos...

—Detente... ¿así que mi padre de nuevo abrió los pantalones?—dijo sarcástico.

El hijo de Apolo miró mal a Luka y le dio unas palmaditas a un Percy confundido.

—No le digas esas cosas... ¿Acaso no notas que es un pequeño?

—Si, lo que digas. Sólo reponde—respondió irónico.

—Es una bendición de Hades y a partir de ahora estás a cargo de entrenar sus poderes... y de cuidarlo.

—¿No es mi hermano?  pues ahí hay una litera, puedes acomodarte solo.— Se acercó al hijo de Apolo y le hizo una seña desdeñosa para que salga de su cabaña.

Lee dejó las pertenencias del pequeño cerca de una litera y salió después de mandarle una advertencia con la mirada a Luka.

—¿Cuántos años tienes, niño?

—Eh... 9 y tú? —respondió acercandose despacio al joven.

—Las preguntas las hago yo mocoso—un escalofrio recorrió la espina dorsal de Percy—Una bendición ¿eh? dejame comprobarlo.

Sujetó un hombro del pequeño y del suelo emergieron esqueletos pero antes de tocar al niño se apartaron y desaparecieron en polvo.

—Es cierto... bueno, a ese paso no necesitarás mi ayuda para entrenar durante mucho tiempo... para estar relacionado con mi padre tienes lindos ojos— se acercó a su rostro y analizó sus pupilas, el niño estaba demasiado sorprendido por su cambio de actitud...seguía sonando tosco y desdeñoso pero menos...cruel.

—Eh... yo... —se apartó un poco del joven, este lo miró con sus profundos ojos oscuros.

—¿Me tienes miedo? Te tendrás que acostumbrar, soy el único que no te teme en el campamento—le dijo frío.

Percy se recuperó del asombro y saltó a la espalda del joven cuando este se disponía a dejarlo solo—¡No te vayas! llevo una semana y nadie me explica qué pasa, solo me enseñan cosas nuevas que están en griego... ayúdame... explicame algo... por favor —rogó el niño sin apartarse del mayor.

Al hijo de Hades se le estremeció el corazón, el no era malo, pero no quería saber nada del campamento... solo deseaba ver de nuevo a su familia—Okay... pero bájate de mi espalda—Percy soltó una risita y se acomodó en su cama y le hizo espacio a Luka—Este es el único lugar en dónde estamos seguros... ¿qué parte no es clara? —preguntó.

—¿Porqué? —Luka lo miró confundido —¿Porqué tenemos que estar escondidos? ¿Porqué no podemos tener una vida normal? ¿Porqué los dioses no reclaman a sus hijos... acaso no los quieren? ¿Porqué hay muchos chicos que detestan a Hades y nos miran mal? ¿Porqué deberiamos adorar a los dioses? ¿De qué sirve el entrenamiento si al final moriremos? ¿Porqué... —el azabache hablaba tan rápido que casi no respiraba.

—Cállate—lo interrumpió Luka —Esas son preguntas que entenderás cuando seas grande, no tienes que pensar en eso aún, no sabes lo que te espera—susurró al último.

—Pero...

—Basta, Percy. ¿Quieres respuestas? te las daré pero no te gustarán —miró fijamente al niño con ojos frios—Estamos escondidos porque no queremos ser bocadillos de los monstruos que nos persiguen por culpa de nuestros padres, por eso no podemos ser normales, y no... a los dioses no les importan sus hijos... estamos aquí encerrados sólo para su diversión, quieren ver cómo morimos de a poco mientras ellos disfrutan de su inmortalidad, nadie del campamento nos quiere porque estamos emparentados con el dios más temido del olimpo... el más malo... pero en realidad él no es ni la midad de malo que él consejo entero sí es... él si es... olvídalo, ¡Ni siquiera podemos vivir en paz, si no los adoramos ellos nos pulverizan... MUERTE AÚN MÁS RÁPIDA! —tomó respiraciones para calmarse porque estaba asustando al niño, que lo miraba con sus grandes y hermosos ojos empañados—déjalo ¿si? hablaremos de eso cuando seas grande, ahora duerme un rato, seguro estás cansado—le dijo en tono afable y lo arropó con una cobija.

Salió de la cabaña y caminó un rato entre las sombras.

No sabía porque lo estaba aceptando en su vida, pero ese niño... le recordaba a él y no entendía sus propios pensamientos, no lo quería dejar solo en ese mundo donde los hijos (y personas emparentadas a Hades) sólo recibían cuchilladas, tenía un extraño deseo de enmendar sus errores.

Entonces lo aceptó, él lo cuidaría y nadie le quitara su alegria... podría incluso recordar lo que era vivir con este pequeño, su padre le dio otra oportunidad y el no fallaría de nuevo.

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Por fin, terminé el capítulo. Y... diganme que les pareció el giro que dio esto.
Mis disculpas pero estaba de aquí para allá... ya entré al colegio.
Quiero agradecer de todo corazón  a nuevamerodeadora porque sus comentarios, a pesar de que amé el de todas, me llegó y me inspiró a continuar... y veremos como sigue la historia... no soy una buena escritora, ni se escribir pero haré el intento, porque soy divergente y nadie me puede controlar.

Anahi fuera. 😘

El hijo de HestiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora