XII.

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—Ustedes serán las nuevas chicas del comité.

—¿Por qué nosotras? —preguntó Mayuris.

—Fueron elegidas por sus calificaciones. Son excelentes —Les entregó un papel—. Estas son sus obligaciones.

—¿Todo esto? Sin duda será una distracción —Alma no quería perder sus notas.

—Son inteligentes sabrán sobrellevarlo.

—Y...¿Si no queremos estar?

—Vayanse pero pierden todos los privilegios. Como ser tomadas en cuenta de primero para cualquier cosa en esta universidad. Además, ¿No saben cuantas chicas desean ser parte de este comité? Ustedes... Son las líderes despues de nosotros los profesores.

No contestaron. Grave error.

Esas mismas chicas, antes ingenuas ahora más despiertas, estaban reunidas. Alma y Mayuris estaban listas para dar a conocer las intenciones de Vera a las demás. Luego de esa reunión se verían todas, para seguir aparentando que eran un grupo unido, en algún momento el show debía terminar. Bryan formaba parte del grupo de los antiguos miembros del comité. Él no era un miembro oficial, la confianza de las chicas hacia él lo mantenían ahí y conocía muy bien los movimientos del grupo.

—Les tenemos noticias —Comenzó Mayuris.

—¿Las demás?

—No vendrán porque ese tema nos concierne a nosotros. No a ellas.

—¿Por qué? —inquirió Yadira.

—Es sobre el pasado. La profesora Vera quiere que investiguemos a Joseph King, puede estar haciendo cosas que van en contra de la universidad.

—¡No, no, no, no! —Diana se levantó—. No repetiré la misma historia.

—Todas lo saben Mayuris.

—Aceptaron. ¿Verdad? —dijo Mabel.

—Sí lo hicieron...¡Sin consultar! —Yadi pasó de la tranquilidad a la explosión en segundos.

—Es nuestra responsabilidad —dijo Alma.

—Alma creí que era inteligente. ¿Recuerdas la ultima vez?

—Lo mismo dije pero...

—¡Dile a Vera que se pudra! —gritó Diana.

—Lo siento pero no jugaré de nuevo —Yadi se negaba.

—Somos dos —Mabel la apoyó.

—No sean estupidas —dijo Mayuris tranquila pero parecía a punto de explotar.

—La única estupida aqui son uste...—Diana no quería participar.

—¡¿Quieren ir a la cárcel?! ¡Si no lo hacemos Vera se irá a la mierda y nos llevará con ella! — Explotó.

—¿Qué? —Diana se asustó.

—Chicas tranquilas —Bryan vio la batalla que iba a empezar.

—No tenemos opción —dijo Alma.

—Es solo investigarlo ¿no? —Preguntó Bryan—. Es facil ¿Qué debemos buscar?

—Chicas por favor. No pasará lo mismo —Alma ignoró a Bryan, era más importante conseguir el apoyo de las otras.

—Iré... Pero si veo que la cosa se ve fea me largo —Respondió Diana.

—¿Yadira? ¿Mabel?

No estaban muy convencidas pero aceptaron. El expediente de Joseph King estaba a punto de ser abierto.

(***)

La casa de Mariana hablaba por ella en cuanto a su riqueza. Sus padres eran adinerados y gastaban su dinero en una joven malcriada que lo único que le interesaba era ser la chica más linda y popular de toda la universidad. Ese dinero requería ser gastado en algo más productivo. Al parecer a los padres le interesaba más sus trabajos. De tal palo tal astilla.

Sofía,Annel y Agus no pudieron asistir porque tenían una sesión de estudio con Joseph King. Llevaban meses estudiando con él. Reforzando lo que necesitaban, daba buenos resultados. El profesor King era paciente no como otros.

Al llegar, su mano derecha debía ser parte de esa reunión las demás secuaces no eran solicitadas. El plan fue creado por ellas dos. Mucha gente involucrada ahogaría las esperanzas en el mar del chisme. Se les ofreció fresco, cosa que no aceptaron por miedo. Ya sentadas Mariana no pretendía perder más tiempo.

—Gracias por venir. Debo contarles algo primero para que sepan porque sospecho de sus amigas —aclaró su garganta—. El día que a Carla le ocurrió eso fue invitada a una fiesta, tomó demasiado. El día siguiente sus amigas hablaban de una fiesta a la que habían ido.
—Y según tú es la misma. ¿No? —Cris aún no creía que estaba ahí.

—Exacto.

—¿Cuál es tu teoría Mariana? —Ari quería que fuera al grano.

—Sus amigas la emborracharon para matarla... No lo lograron.

—¡Qué estupidez! —dijo Iris, golpeando sus piernas y levantándose—. ¿Cuál fue el motivo? A ver responde...

—La profesora Carla tenía problemas con el comité y quería eliminarlo — Génesis aclaró.

Se quedaron calladas. Ángel solo miraba, analizando la situación.

—¿Ven? No estoy loca. Y si quieren afirmarlo. Aquí tengo la dirección de la profesora Carla podemos ir en este momento.

Otro silencio.

—La profesora Carla no puede hablar —dijo Abby.

—Pero puede parpadear.

Fueron al lugar, un poco lejos. Optaron por el bus al ser muchas. El camino fue un largo silencio. Un largo silencio lleno de palabras mentales y pensamientos, irían sin saber si lograrían algo o volverían sin nada. Esperaban que esto se aclarara de una vez.

Una vez en la casa tocaron el timbre. Una señora de mediana edad abrió.

—¿Sí?

—Buscamos a la profesora Carla Méndez. —Mariana habló.

—No quiere visitas.

—Dile que somos de la Universidad donde trabajó.

—¿Del comité?

—No —Mentir parecía lo mejor.

—Denme un momento.

En seguida las hizo pasar. La profesora permanecía en una silla de ruedas. Era incómodo ver como una persona llena de energía terminara de esa manera."Yo hablaré" dijo Mariana. Saludaron.

—Por alguna razón me hizo saber que no debía ser parte de esta conversación. Me voy —Dijo la señora.

—Pero ¿Cómo se comunica? —preguntó Mariana.

—¡Oh sí! Un parpadeo es "sí" dos parpadeos es "no" —Tan cliché.

—Ok —Se giró a la profesora—. No se como empezar.

—Diciendo la verdad —sugirió Ari—Somos parte del comité. Las más nuevas para ser exacta.

—Sí, disculpanos... Queremos saber más sobre que te pasó. ¿Nos dejarías?

Un parpadeo.



Universidad de asesinosWhere stories live. Discover now