Capítulo 02.

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— Entonces te gustan los Rolling Stones — Edward lleva otro trozo de pizza a su boca y Louis asiente tomando de su limonada.

— Encuentro muy atractivo a Mick Jagger — confiesa y el otro comienza a toser.

— ¿Crees que si me dejo crecer el cabello luzca como él? — sonríe y se pasa la lengua por el piercing.

— Si te dejas el cabello vas a lucir exactamente igual a Harry — dice. — Pero, así estás excelente.

— ¿Excelente? — pregunta alzando las cejas.

— Quiero decir, guapo.

— ¿Guapo?

Louis pone los ojos en blanco y Edward se ríe, como siempre vuelve a su semblante serio.

— Oh vamos, me has entendido.

— Pues gracias Louis — toma de su coca cola y muerde la pajilla mientras lo mira. — Nunca nadie me había llamado guapo, a la maldita gente me le paro en frente y corre.

— Como si fueses un vendedor de droga o un asesino — menciona el de ojos azules.

— Exactamente.

— Yo también pensé que lo eras.

— Oh, jódete.

Edward le lanza un trozo del pan de la pizza y luego escucha a Louis reírse.
Ambos toman de sus bebidas, y el más bajo ve que su acompañante se ha manchado el mentón con su propio lápiz labial oscuro.

Sin pensarlo, le pasa el pulgar por la zona manchada; debajo del piercing. Edward mira los labios del otro con atención y Louis le regala una tímida sonrisa.

— Y yo que pensé que solo eras un niño rico demasiado presumido.

Ahora es el turno de Louis de elevar las cejas y darle una mala cara.

— ¿De verdad pensaste eso de mí?

— Por supuesto que no — vuelve a meterse la pajilla en los labios. — Estaba bromeando.

Louis le golpea el hombro y Edward baja la mirada para ocultar su sonrisa.

— ¿Qué pensaste entonces? — investiga.

Suspira y Louis lo ve morderse los labios.
Cuando la campanilla de la entrada suena, ambos voltean hacia la puerta.

Harry está entrando con Liam y otros jugadores, llevan la chaqueta del equipo de la preparatoria; todos uniformados.

Edward aprieta el vaso cuando su hermano se acerca y le da un golpe con el balón en la mejilla.

— Hermanito — toma el trozo de pizza del tatuado y le da una mordida. — Hola Louis, ¿te está molestando éste friki?

— No — dice. — Solo estamos comiendo.

— Me doy cuenta — responde y le da una mirada burlona a Edward.

Su gemelo lo mira, esperando a que se vaya con sus amigos; sin embargo no lo hace.

Sus compañeros van a otra mesa y él se sienta a un lado de su hermano.

Edward & Harry. Where stories live. Discover now