MIEDO.(Sasuke y Hinata)

Capitulo 21:Guerra II

-El principio de los complejos de la vida I.

La puerta ubicada en el Este de la aldea, estaba completamente desierta... no parecía haber una alma en aquel lugar, nada destruido, todo en silencio demasiado silencio para el gusto de Shizune quien estaba llegando al lugar con un escuadrón Anbu. Todos se miraban alternamente extrañados de la paz que se sentía en aquel lugar. No había rastro de Kakashi lo cual era extrañó pues debía esperarla en aquel lugar así no hubiera ataque.

- Algo anda mal – dijo Shizune y los miembros Anbu asintieron.

- Todo esta muy tranquilo – dijo uno de ellos, difícil de saber quien era pues llevaba su mascara habitual.

- Demasiado tranquilo. – dijo Shizune mientras cerraba sus ojos y se concentraba en tratar de percibir algún chakra, alguna fuerza, alguna cosa fuera de lo normal. – Kakashi. – dijo alzando un poco la voz.

Esto es extraño. –le dijo una voz en la cabeza de Shizune una voz muy familiar. Pensó que lo había imaginado que estaba demasiado estresada que había imaginado aquel sonido.

- ¿Kakashi-sensei? – pregunto esta vez un poco mas bajo de lo normal.

Estoy frente a ti, puedo verte y escucharte, pero tu... tu no. – le repitió la familiar voz del ninja copiador.

- ¿Qué ha pasado? – pregunto quedamente.

No lo se. Era un hombre gordo, muy gordo, cerró los ojos y ahora estamos aquí. Parece un genjutsu pero a la vez no lo es. No se como salir y no se como entre.

- El ser esta con usted. – esta vez no era una pregunto o si lo era pero no la dijo como tal.

- No, no esta. – dijo una voz ronca, verdaderamente ronca tras ella y el escuadrón... una voz escalofriante, tétrica, firme donde se podía escuchar la aspereza de las palabras, no parecía que hablara así desde siempre parecía que había sufrido algo, una quemadura y por ese motivo hablaba de esa forma, pues se escuchaba dolor en cada palabra que lograba proferir. – buenas tardes. – dijo en un tono de voz tan neutral que sino supieran que no pertenecía a la aldea, hubieran saludado.

- ¿Quién es usted? – pregunto firmemente Shizune mientras sacaba un kunai de su pantalón. – Salga de esta aldea.

- Disculpa querida dama, pero no puedo hacer eso – dijo el hombre, lentamente mientras todos se erizaban al solo escuchar su voz, era un hombre mas gordo que Chouji, de unos 2 metros y completamente calvo, pero calvo porque así lo deseaba pues se podía notar el nacimiento de nuevo cabello, ojos grises como el mercurio líquido y grandes como los de un avestruz, no tenía parpados algo completamente fuera de lo común, tenía cientos de cicatrices en su rostro, algunas viejas, otras algo recientes pues aún mantenían ese matiz rosa de lo mas reciente. Iba vestido con una camiseta verde fosforescente, demasiado llamativa y excéntrica y unos pantalones de una tela extraña, parecía de fieltro, pero a la vez era como de seda, algo completamente inexplicable, estaba descalzo algo que los sorprendió a todos, era extraño que estuviera de esa manera, tenía una gran marca en la garganta, arrugada como las quemaduras, pero negra como el carbón... parecía algo delicado, doloroso y espantoso.

- ¿Por qué atacas nuestra aldea? – pregunto Shizune mientras sentía como su cuerpo se aferraba cada vez mas al piso, como su cabeza empezaba a zumbarle, le dolía respirar, parpadear...

- Porque es una orden, así que dejémonos de charla y a morir se ha dicho. – expreso el hombre con una gran sonrisa, cerró los ojos y dijo una serie de palabras un tanto extrañas para el vocabulario de los ninjas, eso no era lo único extraño sino que cada palabra dicha era en canto...