RAMÉ |Fear 1|

RAMÈ |Capitulo 1|

Gastón Perida
"Rebelde y seductor"

¡Irreconocible! Así estaba Nina, sus anteojos y su aspecto angelical habían desaparecido ¿Quién es ella? La chica que me gusta desde los ocho años ¿Por qué nunca se lo dije? No lo se, a veces siento que esta tan lejos como las mismas estrellas aún siendo mí amiga de años.

—Perida...—si la misma Nina se
paro enfrente mio—¿Entusiasmado por el primer día de clases?
—¡Oh si!—hable sarcástico—no
sabes estoy saltando de la alegría

Nos quedamos unos segundos sin decir nada hasta que ella corto el silencio.

—¿Te gusta mi cambio de imagen Gastón?—pregunto con una sonrisa
—prefiero a la pequeña Nina, más angelical y con anteojos—respondí sincero—¿Por qué lo hiciste?

Sabía bien que Nina sola no había tenido la idea de un cambio, había algo más y me asustaba averíguarlo.

—bueno, solo intento que este
año—respondió—el chico que
me gusta me mire y me diga que
estoy linda, ridícula ¿No?

Y lo que temía se hizo realidad, Nina hacía todo esto por un chico.

—sos hermosa Nina—me acerqué a ella—con o sin anteojos, con y sin maquillaje y el que no lo ve es un autentico estupido ¿Si pequeña?
—gracias Gastón—respondió con la mirada en el suelo—sos increible

No dije más nada y la abracé, ella
era mi pequeña Nina, la chica más hermosa y sobre todo más autentica de todo el Blake; me dolía pensar que ella se había enamorado de alguien más y aún más que ella le reclamara atención cambiando su aspecto porque ella era hermosa sin necesidad de cambios.

—me veo estúpida ¿No?—cuestiono
—yo creo que te ves bien—encogí

mis hombros—es más el que no lleves puesto tus anteojos hace resaltar tus ojos, son muy lindos ¿Sabes Nina?
—gracias—le brillaban los ojos

Aún la tenía en mi brazos y juro por Dios que no la quería soltar, ella significaba tanto para mí.

—¿Por qué los chicos no me ven Gastón?—cuestionó aún sin soltarse de mí agarre—digo si me miran
pero para ellos no soy ni siquiera
una maldita opción y me molesta
—pero que cosas dices peque, el que no te ve es porque esta realmente ciego—respondí separando me de ella para mirarla a los ojos—eres igual de valiosa que cualquier chica solo que el problema está en que vos no te ves, no te valoras como deberías Nina

Ella me regalo una tierna sonrisa,
si viera lo que yo veo; para mi no había nadie como Nina, me había cautivado de todas las formas.

—siempre tenés las palabras justas para hacerme sentir mejor—habló finalmente—vos me haces sentir bien
—y vos a mí peque—tome su mano

Nos quedamos unos minutos en silencio, contemplando uno al
otro; no era incómodo, al contrario me agradaba, me daba paz.

—siempre estas ahí... —murmuro
—vos también siempre estas para mí peque—exclame con una sonrisa—yo nunca te voy a dejar pase lo que pase

Nos acercamos nuevamente, la
abrace y deseaba con fuerzas que
este momento no terminara; ella
era lo mejor de mís días, lo más interesante y por el momento lo más estable. Me había enamorado de Niña, ya ni recordaba cuando, había pasado tanto tiempo que sentía que desde siempre la quería.

—te quiero—susurro en mí oído y sentí todo mí cuerpo estremecerse

Te amo, pensé pero era tan cobarde que jamás lo admitiría en voz alta.

—yo también te quiero peque.

Ella me regalo una calidad sonrisa y nos separamos finalmente para ir cada uno a su respectiva clase.