~Primer Amor~ [Hiro & Tú] [Terminada]

~Capítulo 22~

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Dejé a Tyler en el suelo, él balbuceó antes de agarrarse del sofá y comenzar a dar pequeños pasos, sosteniéndose de los objetos.

- Tengo un hijo cobarde, tiene casi dos años y todavía se agarra de las cosas para caminar. -dijo Hiro, le pegué. 

- Lo sacó de ti. -dije, mientras caminaba hacia la cocina. Terminando de hacer la cena y la papilla de mi bebé.

- Te amo, bonita. -sentí unos labios en mi mejilla y de inmediato supe que se trataba de Hiro. Volteé, pasando mis brazos por su cuello y besándolo en los labios. 

Serví la comida en platos y luego la papilla de Tyler. Sentí que jalaban mi pantalón, y de inmediato mi vista bajó al suelo. El bebé me miraba sonriendo, mostrando algunos de sus dientes. Lo cargué y besé sus mejillas. Tyler rió. 

- ¿Vas a comer, bebé? -lo acomodé en su sillita antes de haber puesto la papilla en frente de él. Coloqué los platos en la mesa y comencé a alimentar al bebé. Quién tenía mucha hambre.

Una vez Tyler acabó, comencé a comer. Mi comida aún continuaba caliente debido a que mi hijo come muy rápido. Ama comer, lo sacó de mí.

Cuándo todos terminamos de comer, Hiro lavó los platos y yo me dirigí a la habitación de Tyler, para acomodar su ropa. El bebé se acercó a mí gateando. Sonrió cuándo lo cargué y puse sobre el pequeño puff, igualmente se levantó y comenzó a tomar la ropa que estaba en el suelo, preparada para ser doblada. Casi muero de ternura cuándo quiso doblar uno de sus mamelucos. El ebbé gruñó al no poder hacerlo. Y aventó la prenda. 

- Ty, ve a buscar eso, por favor. -dije. Tyler se paró difícilmente y me miró, algo aterrado. -Sí ve caminando. -sonreí ampliamente y aguanté mis lágrimas cuándo el bebé dió torpes y cortos pasos para tomar su prenda, y luego devolvérmela. - ¡Ay, bebé! -chillé, abrazando a mi hijo.

Hiro llegó a la habitación corriendo. Tyler le sonrió a su papá, y luego caminó de nuevo hacia él. Hiro se sonrojó y caminó hasta mí. Me abrazó y besó mis mejillas.

- Los amo. -tomó a Tyler y nos abrazó a ambos.

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Pasaron los días, y Tyler ya camina. Torpemente, pero lo hace. 

- ¿Quieres ir a ver a la abuela?.. -pregunté, tomando a mi bebé. Él sonrió. - Hay que abrigarte, hace mucho, mucho frío. -le coloqué una chamarra enorme y luego todos salimos.

Hiro se subió al auto y yo me senté detrás junto a Tyler.

Llegamos a casa de mamá. Entré sin siquiera tocar. Mi madre estaba ayudando a Jordan con la tarea. Mi hermano menor corrió a abrazarme y le besé la mejilla, sacudiéndole el cabello.

Caminé hasta mi madre y le abracé. Hiro bajó a Tyler, él se quedó mirando todo el alrededor, me miró a mí y estiró sus brazos. Negué con la cabeza, mientras le hacía una seña de que viniera hacia aquí. El bebé frunció el ceño antes de caminar torpemente hacia dónde yo estaba. Escuché cómo mi madre reprimió un chillido al cubrirse la boca. Tyle sonrió mientras se lanzaba a mis brazos, besé su mejilla para que luego el hiciera lo mismo con la mía.

- ¡Mi nieto ha aprendido a caminar! -mi mamá me abrazó y besó a Tyler en la mejilla. El bebé frunció el ceño e hizo un puchero, comencé a hacer caras raras para que no lo hiciera.

- ¡El tío Jordan está muy orgulloso de ti! -mi hermano tomó en brazos a Tyler y le meció, el bebé sonrió.

Jordan caminó hasta el sofá y comenzó a jugar con autos, Tyler le quitó uno y cuándo quiso llevárselo a la boca, mi hermano lo apartó, bruscamente. Fue sin querer, pero el bebé comenzó a llorar.

- Ya, ya.. -dije, comenzando a mecerlo. Tyler buscó el pecho. - ¿Ya estás un poco grande, no crees? -pero luego recordé que el doctor había dicho que era recomendable darle el pecho hasta los dos años. Tyler cumplirá dos en unos meses. 

Caminé hasta la cocina y senté al bebé en mi regazo, liberé uno de mis pechos y comencé a amamantarlo.

- Creo que está un poco grande, ¿no? -habló mi madre, mientras colocaba unas galletas y chocolate caliente frente a mí.

- Mamá, te amo, pero es mi hijo, no el tuyo. -dije. Ella frunció el ceño y luego Tyler dejó el pecho. Me acomodé y lo bajé. Él corrió dónde Jordan y se subió torpemente al sofá. Sentándose al lado de su tío. Ambos comenzaron a ver... algo en la TV.

Y... luego mi hijo se quedó dormido.