Cold Heart ❅ YoonSeok

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Era invierno, miles de niños estaban jugando en el parque a pesar de que estuviese nevando, todos llevaban sus chamarras y ropas de invierno con las que sus padres los habían cubierto para cuidarlos, parecían pequeños esquimales. Todos se llevaban bien, todos se querían, excepto por uno, ese niño llamado Min YoonGi al que todos los niños evitaban constantemente ya que era demasiado inexpresivo y antisocial para los demás.

Esa tarde de invierno se había mudado una nueva familia al vecindario, todos los niños al saber que habría un nuevo niño para jugar se emocionaron, todos excepto Min YoonGi, a él le daba igual todo, si llegaban o se iban, para él todo daba igual, por ello todos lo veían como un niño frío y sin sentimientos como una roca. YoonGi era el niño con corazón de hielo, un "Hielo", así le apodaban todos «¿Por qué nunca juegas niño hielo? ¿Te gusta estar solo niño hielo?» todos los niños nuevos siempre le preguntaban lo mismo, a lo que YoonGi no les contestaba de muy buena forma, a pesar de ser pequeño sabía perfectamente bien como mandar a todo el mundo a la mierda en menos de un segundo, era una especie de don que el pelinegro tenía.

‒¡Llegó el niño nuevo!‒ gritó uno de los pequeños al ver que un niño entraba al parque. YoonGi sólo suspiró y se sentó de nuevo en la banca donde solía estar, no estaba de humor para las posibles molestas y estúpidas preguntas que el nuevo chico le haría, sus padres lo habían regañado de nuevo por la queja de uno de los niños ya que YoonGi había usado un lenguaje demasiado ofensivo con él, obviamente el niño había mentido, YoonGi jamás le había dicho nada malo, sólo le había dicho amablemente que lo dejara en paz. Suspiró al recordar las duras palabras de sus padres, realmente odiaba que no le creyeran, sacó su DS y comenzó a jugar, eso era lo que hacía todas las tardes, por él jamás saldría de su cómoda habitación, sin embargo, sus padres querían que el pequeño pelinegro se llevara mejor con sus vecinos, querían que el pequeño YoonGi jugara con todos como cualquier otro niño, cosa que, notoriamente, jamás resultaría.

Se escuchaba como todos los niños interrogaban al niño nuevo, realmente eran escandalosos, a YoonGi le molestaba estar en lugares así de ruidosos ya que aquello lo hartaba y frustraba, por eso tampoco jugaba mucho con los demás, siempre gritaban y hacían tonterías, cosa que el pequeño pelinegro odiaba con toda su alma.

‒¿Cómo te llamas?‒

‒¿De dónde vienes?‒

‒¿Qué te gusta hacer en tu tiempo libre?‒

‒¿Qué te gusta jugar?‒

El pobre chico nuevo estaba siendo bombardeado con tantas preguntas que ni siquiera lo dejaban contestar, de repente todos se callaron al notar que el chico nuevo comenzó a reír, generalmente los nuevos eran extremadamente tímidos y no hablaban mucho el primer día, pero este chico no era así, no era como los demás, era un chico que podía agradarle a todos, un chico que amaba hablar y jamás era tímido.

‒Soy Jung HoSeok‒ dijo con una amplia y tierna sonrisa ‒Vengo de Gwangju‒

Los niños comenzaron a preguntarle más y más cosas las cuales HoSeok respondía con gusto, de repente algo llamó su atención, un niño pelinegro que estaba sentado solo en una banca jugando con un DS «¿Por qué está solo?» pensó el pequeño HoSeok, a él jamás le había gustado ver a alguien solo o sufriendo, finalmente él creía que todos los niños debían de estar felices y llenos de amigos, su madre le había enseñado aquel tierno pensamiento. YoonGi no estaba triste o por lo menos no lo parecía, sin embargo, había algo en su rostro que indicaba tristeza, o eso era lo que HoSeok había pensado, lo que percibía de aquel misterioso y solitario niño.

‒¿Quién es él?‒ preguntó el castaño con curiosidad mientras señalaba a YoonGi quien estaba más que metido en su juego. Los niños voltearon a ver al pelinegro y rieron levemente, HoSeok los vio con algo de confusión y diversión, por un momento pensó que era un amigo más de todos.