Capítulo 4: ¿Puedo confiar en tí?

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A veces la vida apesta ¿verdad? Siempre imaginamos algo lindo que queremos que nos pase pero nos pasa todo lo contrario... Bueno ese es mi caso. La verdad es que no sé qué me pasa pero estoy sumergida en fantasías de cosas que me podrían pasar, por ejemplo, que no me traten como alguien invisible o que mi padre aparezca. Pienso en esas cosas y después al volver a la realidad me doy cuenta que lo hago porque mi vida es un desastre, no se si describirlo así, es como que siempre tuve ese sentimiento de que alrededor mío sólo hay gente falsa, nadie es real, no tengo y nunca tuve a nadie a quien decirle mis secretos o a quien abrazar, no tengo nadie en quien confiar.
A veces siento que ni puedo confiar en Kate, que aún la sigo viendo.
Antes en mi anterior secundaria había muchísima gente falsa, que los solía llamar "amigos", pensar que les había contado mis secretos, todo.
Siempre es como que... Elegían con quién estar, a veces elegían estar mucho con alguien y dejaban de lado a la otra, siempre a la misma, y esa obviamente era yo, me trataban como si no existiera, había días que sí y días que no, tengo miedo de que las chicas que conocí en mi nueva escuela sean falsas.
Siento que estoy sola, que no soy nadie, antes también me pasaba pero no quería decirle a mi madre, ya que tenía asuntos peores de los cuales preocuparse, como pagar las cuentas de la casa, la comida, además la desaparición de mi padre le frustraba aún más, no sabía si estaba vivo o perdido en algún lugar lejano.

Ella no le podía pedir ayuda a mi familia, ni yo entiendo por qué. Hace mucho que no veo a mi familia, desde los 9 años que no los veo, no sé si es por que viven en otra ciudad y es muy caro que vengan hasta aqui o que vayamos nosotras, pero lo raro es que nunca me deja hablar con ellos, ni en mi cumpleaños, nada. Yo siempre le pregunto por qué pero me dice que es tema de grandes, con el tiempo me di cuenta que sería porque estan peleados o algo así.

Extraño a mi padre, mucho, quiero un abrazo de él, uno que se que me va a dar calidez, que va a sanarme esas heridas, con él todo era mejor. Cuando mi padre no había desaparecido vivíamos en una casa cerca de un bosque, recuerdo que mi padre siempre me llevaba, parecía otro mundo totalmente diferente, un mundo donde sólo había pájaros cantando, el ruido del viento, sólo había paz. En ese bosque había un árbol donde mi padre me subía hasta lo más alto, desde ahí se veía todo un paisaje hermoso. Mi padre me cantaba una melodía, no recuerdo cúal, pero sé que era una que sin palabras decía algo muy hermoso. Pero todo cambió cuando desapareció.

Cuando tenía 9 años, y estaba en mi anterior escuela, siempre algo malo pasaba, además mis compañeros eran tan... tan, no sé como decirlo, pero eran personas que no me entendían, no me conocían, siempre era la tímida del grupo, pero no era así, yo solo era tímida en mi escuela, no sé por qué. Siempre todos me miraban con esas caras raras, con esas miradas que siempre apuntaban a mi, siempre estaba con ese aire tóxico que no me dejaba respirar. Siempre cuando volvía a mi casa me sentía tan mal, pero no quería decirle a mi madre, ya que no quería darle más problemas. Cuando no aguantaba más esas lágrimas iba a aquel bosque donde me llevaba mi padre, ahí estaba totalmente desconectada del mundo que me atormentaba, siempre iba ahí y sacaba todas mis lágrimas, gritaba hasta que mi padre me pudiera escuchar y volver conmigo, estaba harta, harta de todo.

Incluso ahora me siento así, toda mi vida lo hice. Mi padre siempre me dijo que cuando él se vaya alguien más iba a cuidarme, pero, ahora me doy cuenta de que ese alguien nunca va a llegar, pero quisiera que lo haga.

Siempe me siento sola, no tengo en quien confiar. Si tendría que describirme diría que soy Venus, una chica que es insegura con el mundo que la rodea, una persona con tanta imaginación que se desconecta totalmente del mundo para escaparse de esa vida que la atormenta, soy una persona con miedo. Soy una persona con miedo porque no se si la persona con la que hablo me habla en serio o me habla sólo por que le doy lastima o está jugando conmigo. Soy una persona con miedo porque cuando tengo que salir de mi "burbuja" y volver al mundo real no quiero hacerlo, porque sé que no habrá nadie fuera de mi burbuja que pueda abrazarme.

Siempre a la noche lloro para desahogarme de todas esas cosas que siento, lloro para que mi padre me escuche.

Ayer en la escuela empezó a notarse que tal vez mis nuevas "amigas" ya me traten como invisible, era de esperarse.

De repente empecé a escuchar una melodía, una melodía que empezó a generarme nostalgia, a traerme recuerdos de mi padre, recuerdos de él cantándome esa melodía, y justamente esa melodía que estaba escuchando era la de mi padre. Estaban por caerme las lágrimas, no sé por que pero estaba apunto de llorar. De repente me doy cuenta de quien estaba cantando esa melodía era, era Jupiter. No podía entender como él conocía esa melodía.

Me puse tan mal que salí corriendo de la escuela, no sé a donde iba, pero lo único que quería hacer era irme de ese lugar. De repente, no sé como, pero llegue a aquel bosque, estaba igual que antes, y estaba, estaba aquel árbol, seguía ahí. Me subí y sentí una calidez de alguna u otra forma, se convirtió en mi refugio. Empezé a llorar, y a gritar, a desahogarme. De repente, Jupiter por alguna razón se subió al árbol sin que me diese cuenta.

Venus: ¡Que haces aqui¡ ¿acaso me seguiste?

Jupiter: Si, ¿acaso no puedo?

Venus: ¡Claro que no! vuelve a la escuela.

Jupiter: No quiero, ¿que es lo que te pasó petiza?

Venus: ¡No soy petiza!, bueno, no tanto, ¡y no te interesa que me pasa!

Jupiter: Claro que si, por eso pregunto.

Venus: Bueno no voy a decirte de todas maneras.

De repente hubo un minuto de silencio donde el me seguia mirando y yo miraba para otro lado para pensar en otra cosa y no ponerme a llorar.

Jupiter: ¿Por qué no me miras a los ojos?

Venus: Por que no quiero.

Jupiter: ¿Qué? ¿acaso mis ojos son tan hermosos que cuando los ves te sonrojas?

Venus: ¡Claro que no!

Jupiter: ¿Entonces por qué es?

Venus: No te importa.

Jupiter: ¿Crees que así disimulas que me amas?

Venus: ¡No te miro a los ojos porque cuando estoy triste no quiero ver a nadie a los ojos! por que me pongo nerviosa y lloro cada vez más. ¿Ahora estás feliz?

Jupiter: Ah, con que sigues poniendo excusas ¿eh?

Se volvió tan insoportable que al no dejarme en paz tenía ganas de llorar por que se mezclaban los sentimientos con lo que me pasaba más lo insoportable que era él, de repente empecé a llorar.

Venus: ¿No ves que me siento mal? ¡no ves que te estas pasando!, perdón si te lo tomas como un chiste pero para mi no, ¡quiero estar sola!, ¡no me conoces!, no tienes por que pensar cosas de mi, no tienes por que seguirme o preguntarme cosas como por ejemplo, por qué lloro ya que no te responder porque se que es una mentira para burlarte de mi.

De repente ¡el me abraza! ¿por qué se le da por abrazarme?

Jupiter: No sé que te pasa pero quiero que dejes de llorar, no llores más.

Venus: ¿Pero por qué me abrazas? ¡no te hagas el que se preocupa por mi!

No importaba lo que le diga, el me seguía abrazando, me abrazaba con tanta seguridad que me di cuenta de que era un abrazo de verdad, fue, mi primer verdadero abrazo. Era un abrazo con calidez, sin ser falso, era como si, pudiese confiar en él.

Entre Mundos (EDITANDO)Where stories live. Discover now