Te atravesaste en mi camino. (Tom Holland)

BONUS 11

Terminamos la videollamada y aun que hicimos diferentes cosas para pasar el día lo único que yo realmente hacía era esperar a que anocheciera para terminar nuestra conversación.
Sonará absurdo pero toda la tarde un pensamiento descabellado y una sensación odiosa me inudaban y aturdían. Me sentía inquieto, inseguro, disgustado, enfadado, desepcionado, intranquilo...de todo.
¿Por qué? Porque ella realmente se había preocupado al ver el rostro lastimado de Harrison, se notó en la expresión de sus ojos y en la forma en la que me miró después de haberme echado la culpa de ciertas heridas en la cara de mi amigo.
No era solo eso lo que me inquietaba, sino el hecho de que no me preguntara como me encontraba yo en ningún momento, su falta de interés en mi, su forma de ver y referirse al otro chico en lugar de referirse a mi, hasta la manera en que ella le sonreía...aun que me cueste admitirlo...estaba celoso.
¿Sería posible que ella sintiera algo por Hazza? ¿Sería posible que quisiera ser más que "la amiga de su amigo"? ¿Sentiría alguna clase de atracción hacia él? ¿Habría pasado algo entre ellos mientras yo dormía cuando volví del hospital? ¿A caso yo había entrado directito a la friendzone?
De golpe otra cosa llegó a mi cabeza: ese sujeto apestoso que quería con ella. Laura era una chica hermosa,  increíble, tímida, tiernamente sexy, y sobre todo...INTOCABLE, y Haz lo sabía, pero el tipo ese no. Estaba seguro de que solo estaba esperando cualquier oportunidad de quedarse con ella, de convencerla de que a su lado sería más feliz que al mío, de quitarmela. 
Ya estaba maldiciendo todo y a todos cuando mi otro yo apareció y me dijo que no fuera tan paranoico. No me relajé ni nada de eso solo recapacité y seguí tratando de olvidar el tema y dejar las cosas por la paz porque a fin de cuentas era yo con quien hablaba todas las noches, era yo quien la hacía reír en las madrugadas, era yo con quién compartía unos momentos de su vida y a quien le tenía más confianza; y a fin de cuentas era por mi que había volado ella sola sin importarle nada más que verme y asegurarse de que estaba bien. Esas eran buenas señales ¿No?

Al llegar la noche hablamos solo un poco más, al decir "solo un poco más" me refería a solo un par de horas y no toda la madrugada como de costumbre, ya que se sentía cansada y tenía sueño y al otro día tenía clases y practica de volley.
De entre tantas cosas me contó que estaba en una especie de concurso de canto y que esa noche había cantado "Single ladies" de Beyonce. Me sorprendió porque esa era una canción díficil, sin embargo pudo con ella y permaneció en la competencia. Laura dijo que le daba miedo esa pieza pero la eligió para mantener vivo el interés del público en ella. De nuevo envidié a las personas que podían darse el lujo de verla y escucharla los fines de semana. También me contó que en dos semanas empezarían sus vacaciones, pero que las empezaría mal ya que su primer martes libre era el cumpleamos de una de sus tías. Ella de verdad no quería ir. Pobrecita, de verdad me disgustaba que ella estuviera así, que la trataran de ese modo, que la hicieran sentir mal consigo misma. Me partía el corazón imaginarla llorando gracias a esas brujas.
Quería hacer algo, debía hacer algo para ayudarla pero también para que supiera de una vez por todas lo que realmente sentía por ella. Pero debía ser algo especial, fuera de lo normal, nada rutinario ni tradicional; debía ser algo que demostrara lo loco que me traía y lo importante que era para mi.