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ㅡ¿Te gustaría algo de café?

ㅡB-bueno...hm...un Americano, por favor.

Todas las tardes, entre las cuatro y las cinco, Wonwoo llega a su departamento y toca el timbre dos veces y Mingyu le abre la puerta. Se miran, se sonríen y Wonwoo pasa. De Lunes a Lunes es así, todas las tardes, entre las cuatro y las cinco, en invierno, otoño, primavera y verano desde hace un poco más de un año.

Al comienzo estaba bien para Mingyu, compartir dos horas al día todos los días con Wonwoo. Él prepara café antes de que llegue, lo sirve en una taza amarilla y se la da cuando llega, entonces se ponen a conversar de cosas triviales, de sus vidas, de sus sueños, de todo mientras el negro café desaparece detrás de los labios de Wonwoo y cuando termina es la hora de despedirse hasta el siguiente día.

Pero mientras los días se convierten en semanas, Mingyu desea compartir más tiempo del que el café le permite.

ㅡHyung, ¿puedes quedarte un poco más hoy?

Le preguntó, cierta tarde, en otoño.

ㅡPero, el café se terminó.

ㅡEstá bien, puedo preparar más para ti.

Y lo hizo, preparó una taza más.

A Mingyu nunca le gustó el café, le parecía amargo, fuerte y siempre que tomaba le causaba dolor de cabeza pero cuando conoció a Wonwoo, sin pensarlo, le preguntó si le gustaría tomar algo de café. Conversaron casualmente esa primera vez mientras que Wonwoo tomaba el café que Mingyu decidió pagar por él y para cuando terminó, el menor lo acompañó hasta la parada del metro y dejó en la mesa de la cafetería el café frío que ni siquiera probó.

Desde entonces Wonwoo va a su departamento, a tomar café, todas las tardes, entre las cuatro y cinco.

ㅡPero...hyung...¿Quién te gusta? ¿el café caliente o yo?

Le pregunta, mientras prepara la segunda taza de café.

ㅡ¿Qué?

Mingyu detiene su trabajo de preparar café por unos segundos, el silencio se vuelve algo incómodo.

ㅡHm, hyung...ㅡcarraspea su garganta y se da la vuelta, con el café ya servido y lo deja sobre la mesa, frente a Wonwooㅡ¿Te gusta mucho el café, cierto?

ㅡMe gustaㅡdice Wonwoo, tomando la taza amarilla entre sus manosㅡ, pero el único café que me gusta mucho es el de Mingyu.

Mingyu sonríe y se pregunta si su hyung entenderá sus sentimientos.

ㅡRealmente...¿Quién te gusta? ¿el café caliente o yo?ㅡpregunta otra vez, apoyando su mano contra la mesa, mirando desde arriba a Wonwoo.

ㅡ¿Por qué...?

Wonwoo no termina su pregunta cuando de repente los labios de Mingyu sobre los suyos lo interrumpen.

Amargo.

El sabor de los labios de Wonwoo es amargo debido al café y Mingyu odia el café pero en este momento, con sus labios presionando los de Wonwoo, el sabor amargo del café es el más dulce de todos. Podría volverse un adicto el café de los labios de su hyung.

ㅡTu novio, ¿no puedo ser yo?ㅡmurmura, apoyando su frente contra la de Wonwoo, con sus ojos cerrados. Su voz se escucha suave, no tiene la intención de sonar a reclamo, es más bien una suplica porque él realmente desea ser su novio.

ㅡMingyu...ㅡmurmura Wonwoo con su voz profunda y manda ondas electricas por todo el cuerpo de Mingyuㅡ...debo irme.

ㅡAún no terminas tu café.

ㅡEl café se enfrió.

ㅡPuedo prepararte otro.

Wonwoo sonríe y niega levemente.

ㅡNo me gusta el café.

Mingyu se separa levemente debido a la confusión tras escuchar esas palabras y Wonwoo aún está sonriendo.

ㅡEl que me gusta eres tú.ㅡdice Wonwoo y con su mano toma la de Mingyu y lo vuelve a traer hacia él para besarlo.

Para besarlo con sus labios sabor café que sabe dulce únicamente para Mingyu, aunque él odie el café.

coffee ; meanie.Onde histórias criam vida. Descubra agora