WhatsApp Desconocido - Chrisdiel |Terminada|Editando|

Capítulo 34

Narra Erick.   (especial joerick).

Estaba nervioso, mucho a decir a verdad. De esta conversación dependía el futuro de mi relación con Joel. Llegue al parque y lo vi sentado en una banca viendo sus manos, como si de la nada estas fueran mas interesantes que de costumbre. Una oleada de nervios me volvió a atacar pero reuní todo el valor suficiente para acercarme a él.

Levanto su vista justo antes de posicionarme frente a el, sus ojos cafés cautivantes me miraban y esas largas pestañas que lo hacian ver adorable, el siempre me dijo que sus ojos eran comunes, por ser cafés pero yo digo que no. De comunes no tienen nada, su mirada tierna hace que mis piernas tiemblen, entonces se para y sin yo poder evitarlo lo abrazo y comienzo a sollozar. Esos días en los que me ignoraba fueron los peores para mi.

Posa una de sus manos en mi cintura y la otra en mi espalda, me aprieta fuerte como si temiera que fuese a salir arrancando.

-L-lo s-siento.- Le digo entre sollozos.

El solo me abraza y besa mi cabeza para luego sentarse y sentarme en sus piernas, entrelaza nuestros dedos. Aún mantiene una de sus manos en mi espalda y la mueve de arriba hacia abajo causando que mi cuerpo tiemble. Me besa, una rara mezcla entre pasión y ternura, un beso que nos dice cuanto nos extrañamos en estos dias.

-Descuida amor se que estabas enojado bebe y yo igual tuve culpa.- Dice parándose con migo aferrado a su cuerpo como si fuese un koala.

-Donde vamos.- digo riendo, al ver como camina.

-A casa, hay mucho tiempo que recuperar.- dice besando mi mejilla.

(...)

Me recuesto en la cama estoy desnudo, joel esta sobre mi besando mi cuello, sus manos en cada parte de mi cuerpo, soy un mar de gemidos. Entonces lo veo bajar hasta mi miembro, ya erecto, comienza a besar la cabeza pasando su lengua en círculos, chupando y lamiendo. Luego de un rato siento mi vientre contraerse y me corro en su boca. Comienza a subir dejando besos en mi estomago, pecho y cuello.

Pone tres dedos frente a mi y sonríe, yo solo me enderezó y los meto en mi boca, pasando mi lengua por los dedos y entre medio de estos, los saca de mi boca cuando ya están listos.

-Abre las piernas bebe.- me dice, su vos ronca por la excitación.

Cumplo con lo que me dice, y siento como intruduse un dedo en mi, duele pero no como la primera ves que estuve con el, porque si, Joel fue mi primera ves y desearía desde el fondo de mi corazón, que sea el ultimo, lo amo y de eso ya no hay dudas, introduce el tercer dedo y para cuando esto pasa, mis mejillas están rojas por el calor, mi cuerpo pidiendo por mas, siento como saca sus dedos de mi por remplazarlos por algo mas grande. Suelto un suspiro cuando siento que a entrado completamente en mi. Comienza un lento vaivén que en poco tiempo va aumentando su rapidez y profundidad.

La habitación llena de gemidos y roncos suspiros de parte de ambos. Haciéndose saber mutuamente con sus cuerpos cuanto se habían extrañado. Con cada toque, con cada profunda embestida del morocho hacia su pequeño, se amaban y nada cambiara eso. Ni siquiera un discusión sin sentido que en su momento dolió pero que ahora esa herida era reparada por los suaves y dulces gemidos que salían de la boca del ojiverde.

Joel no sabia cuanto lo había extrañado, hasta cuando lo vio. Mirando y perdiéndose en esos increíbles ojos que tanto le gustaban. No sabia cuanto lo necesitaba en su vida hasta que sintió perderlo. Hasta que Zabdiel lo hizo entrar en razón y ahora estaba allí, junto a la persona que mas amaba, disfrutando y deleitándose con cada parte de su cuerpo.

Joel sintió como su vientre se contraía para segundos después liberar todo su semen dentro del trasero de su novio.

Se levantó y fue al baño para segundos después volver con unos paños para limpiarlo. Se recostó a su lado y lo abrazo sintiendo que ahora todo estaba como debía ser.

-Te amo.- dijo erick para soltar un bostezo y comenzar a cerrar sus ojos.

-Yo igual pequeño.- dijo joel besando cariñosamente la mejilla del menor.- Ahora duerme bebe.

Y hací los dos se durmieron acurrucados y abrazados. Sintiendo en su pecho esa paz que tanto habían extrañado y es que ninguno de los dos sabia como estar sin el otro.

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Chicas estamos en él puesto #357 en fanfic, estoy muy emocionada. (Notita antigua jejej)

Las quiero mucho❤.

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