Cosas mías.

Dudas, y una mentora.

Les traigo una pequeña anécdota que me pasó hoy; resulta que fui a visitar a mi profesora de comunicación creyendo que me recibiría con  una sonrisa , mas no fue de ese modo.

Yo me he encariñado mucho con ella, pues me enseñó muchas cosas nuevas e innovadoras para poder escribir mejor, por lo cual se ganó mi corazón. Tanto así es mi cariño que incluso le regalé un pequeño cuento que hice, cabe mencionar que yo sólo escribo para mí, aunque recientemente estoy sacando una que otra idea a la luz, pero para ese entonces era así y incluso hay algunas historias que no comparto porque se basan en mis vivencias y frustraciones. No soy una persona muy abierta con sus sentimientos, por eso prefiero mantenerlos en secreto. Sin embargo, le obsequié mi pequeña historia como un regalo de agradecimiento.

Ella me dijo que era una de las mejores que había leído de todo el colegio, y fue entonces que sentí que escribir era más que un pasatiempo, era un segundo talento. Por dentro lloraba de emoción, pues me sentí especial, ni las historias de las chicas más "destacadas" por así decirlo, no lograron complacer a la profesora de comunicación. Por un momento, sentí que podría destacar en algo y ser la mejor en ello.

Hoy me pregunto, ¿lo habrá dicho porque sí? ¿He hecho algo mal?  A veces me hago problemas conmigo misma por nada significativo la verdad, quizás sólo deba dejarlo pasar, pero, esto me es difícil.