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POV LAUREN

- Y con Camila ¿Qué tal?

- Pues cada día mejor.  Nos vamos a comprar una casa más grande.

- ¡Qué bien! Cariño me alegro mucho por las dos.

- Camila va a dejar el trabajo. Quiero que se centre en la carrera y por eso le regalé los estudios.

- Hiciste perfecto. A partir de ahora tienes que buscar lo mejor para ti pero también para ella.

-Lo sé.

Camila apareció en la cocina con cara seria, la conocía bastante como para saber que las cosas no iban bien.

-¿Qué tal fue?- Yo estaba sentada al igual que mi madre. Le hice un gesto a Camz para que se sentase pero no lo hizo. Se puso en frente nuestra y nos dijo:

- No soy médica, sólo una estudiante pero creo que debe ir al hospital.

A Clara se le cambió la cara, a mi me costaba dar la noticia y tenía miedo a equivocarme en mi diagnóstico.

- Camila ¿Tú sabes lo que tiene? Por favor no me mientas.- Entendía la postura de Clara, si me ocultasen algo sobre la salud de Lauren estaría igual de preocupada.

- No es algo fijo pero creo que esta última crisis le repercutió en el funcionamiento de sus piernas porque me dijo que se le dormían últimamente y bueno... esto puede a que se deba a un fallo en su circulación sanguínea. Pero repito que es mejor que pidáis una segunda opinión.

- ¡Oh Dios mío!- Clara se llevó las manos a la cara.

-Mama... venga tranquila por favor.- Lauren abrazó a su madre y luego me miró. Sus ojos eran completa tristeza. Estaba destrozada pero no quería demostrarlo. -Camz, dinos todo. Sé que te guardas algo.

- Lauren repito que no estoy segura.

-Y yo repito que quiero saber todo.

Debía decírselo. No quería mentirle.

-Lolo... Tú padre está mal.

- ¿Tiene cura?

- No. Si hay opciones para paliar el dolor pero no para solucionarlo.

- ¿Cuánto tiempo le queda?

- Lauren no sé...

-¡JODER CAMILA CUANTO TIEMPO!

- ¡Lauren no le grites así a Camila!- Clara riñó a su hija pero no podía culpar a Lauren, estaba nerviosa. Yo sabía lo mucho que quería a su padre.

- Depende de cada persona puede que 2 semanas o 2 años.

- Voy a salir a fumar.

- Lauren espera, te acompaño.

- No. Quiero ir sola.

Le hice caso pero me mataba por dentro verla así. Clara en cambio se lo tomó con mucha más tranquilidad.

- Tarde o temprano iba a pasar.

-¿Lo sabías?

-Cuando le diagnosticaron la enfermedad a Mike, a mi me advirtieron de que esto podía ocurrir. Llevo años haciéndome la idea pero nunca quise contárselo a mis hijos.

- Clara, lo siento muchísimo. Ojalá hubiese una forma de ayudar.

- Y si que hay. No dejes a Lolo sola aunque te lo pida, ella necesita que la apoyen, que le digan lo mucho que la quieren y que no va a pasar por esto sola. Llorará e incluso se enfadará sin sentido pero por favor no la dejes, podría hacer una locura.

-Tranquila, de eso ya me encargo yo. Intentaré que venga a veros todos los días. 

- Gracias cariño.

Después de hablar con Clara fui a buscar a Sofía, era hora de irnos a casa, Lauren necesitaba descansar.

El viaje de vuelta fue en silencio, decidí conducir yo. Hice la cena mientras Lauren se duchaba, como tardaba y la peque se moría de hambre, decidimos ir comiendo pero Lauren seguía sin bajar a cenar. Le pedí a Sofi que se lavase los dientes y se fuese a dormir, así yo podía hablar tranquilamente con Laur. Fui a nuestra habitación y me puse el pijama, la puerta del baño seguía cerrada. Me preocupé.

-¿Lauren? ¿Estás bien?

No contestaba y me estaba preocupando. Abrí la puerta y me encontré a Lauren en el suelo, hecha una bolita con una toalla envuelta en su cuerpo. El agua seguía circulando pero le daba igual, estaba tan destrozada que no le importaba nada. Sólo lloraba.

-¡Lauren! Cariño levanta.

-¡Déjame!

- No quiero dejarte en esto sola te guste o no. Te quiero y me mata verte así, sé lo difícil que es esto, pasé por algo similar y en aquellos momentos me hubiese gustado tener a alguien que me diese la mano y me ayudase a levantarme.

-Camz...-Lauren levantó los brazos hacia mi para que la abrazase y no lo dudé ni un segundo, lo que menos quería era que sufriera.

-Shhhh venga Lolo vamos a buscar algo de ropa que te vas a resfriar.

Busqué un pijama y ropa interior. No tenía ni ánimo para cambiarse así que la ayudé. También sequé su pelo y la metí en la cama, luego me metí yo y la abracé, ella se aferró a mi con tanta fuerza que casi no podía respirar pero no me importaba pasar así la noche si eso la hacía sentir mejor.

-Mañana vas a ir a trabajar como un día normal, lo que menos necesita tu padre es ver a la gente que más quiere triste y luego, lo acompañarás al hospital con tu madre. Yo estaré allí porque me tocan prácticas así que estaré pendiente de todo lo que pase ¿Vale?

-Vale...- Sus lloros se fueron calmando y llegó un punto en que sólo se escuchaba como sonaba su nariz.

-Ahora debes dormir. Si por la noche te desvelas o te encuentras mal me despiertas.

- Te quiero

- Yo a ti más.- Le dejé un besito en su cabeza y pocos minutos después nos quedamos dormidas.

Crying in the club (CAMREN ESPAÑOL)Where stories live. Discover now