Capítulo 21: ¿Enfrentar o Escapar?

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La azabache los quedó mirando a todos, y vio que en sus ojos no había ni una pizca de broma, pero aún así ella quería pensar que era una broma.

—Jajajaja— empezó a reír fuertemente. No podía ser cierto lo que su padre decía, era una tontería, ¿ella? ¿Marinette Dupain Cheng? ¿Charlotte? Y ¿porqué? ¿Porque le hicieron creer que era la hermana de Bridgette y no su hija?

—No quisimos mentirte— habló su madre, con miedo a como reaccionaría. —Todo lo hicimos por tu bien, para cuidarte.

—¿Ustedes también lo sabían?— preguntó dirigiéndose a Chloe y André. A lo que ellos negaron moviendo la cabeza. —Entonces soy la última en enterarme.

—En realidad, Adrien y tú son los últimos. En este momento su padre debe estar explicándole, que va a pasar de ahora en adelante.

Mansión Agreste

—¿Marinette? Pero...

—Sí, es difícil de creer. Pero todo coincide, a mí también me costó creerlo pero sí, ella es Charlotte— dijo su padre parado con los brazos en la espalda mirando por el ventanal.

—Todo tiene un porque, Adrien. Y lo de ustedes es muy peligroso ya que corren riesgo sus vidas. Ustedes dos tienen una conexión muy grande al estar juntos, y eso lo siente Hawk Moth. Ahora que ha vuelto y está en busca de ustedes dos, nada ni nadie, ni siquiera Ladybug y Cat Noir los podrá salvar.

Tienes que irte pronto de Francia, tu vuelo parte mañana por la mañana a Los Ángeles.

—Pero yo no me quiero separar de ella, ahora que se quien es y la hemos encontrado. No puedo y no lo haré, así me cueste la vida— Anunció poniéndose de pié.

—Tienes que entender, estando juntos, será peor. Si tú no me obedeces, el sacrificio de tu madre va a ser en vano— Habló esta vez mirándolo o los ojos. Era cierto, su madre había muerto por salvarlo a él y a su padre. Pero el ahora era él héroe de París y tenía una promesa que cumplir, además el villano no conocía su identidad. —¿Y Marinette? Digo Charlotte, ¿ella también saldrá del país?

—Esa decisión la tomará su abuelo, André.

—Pero Sabine y Tom ¿No se opondrán? Ellos la criaron, podrían reclamar esos derechos, también son sus abuelos.

—Si pero, André tiene todas las de ganar si se oponen. Además es por el bien de Charlie.

Panadería–2do piso Dupain Cheng

—De ninguna manera, manden a Chloe si quieren, pero yo no voy.

—Yo no soy la que está en riesgo Char— reclamó la rubia con las manos en la cintura —Además Perú y Argentina son países muy bonitos, en Perú podríamos visitar Machu Picchu, Las lineas de Nazca, Caral, La playa de Huanchaco y en Argentina podríamos ir a la Villa General Belgrano, dicen que es como un colonia Alemana ¡Ah! Y también Cataratas del Iguazú, Bosque de Arrayanes, El fa...

—Basta— interrumpió Mari levantando la voz —No quiero ir, mi deber es quedarme aquí y protegerlos, no los puedo abandonar.
Así me den un pasaje oara recorrer todo el mundo, no me voy.

Tom, estaba muy orgullosos de su pequeña pero su vida corría riesgo y tenía que salvarla, no podía permitirse perder a alguien más. —Pero tu vida corre riesgo, no me perdonaría nunca si te pierdo, princesa. Eres lo único que nos queda de ellos.

—Nathaniel, ¿tu tienes algo que decir?— preguntó la azabache al ver que su amigo no había dicho nada desde que había llegado.

—Bueno...tu vida está en peligro. Eres mi amiga, mi hermana. Y no me gustaría perderte por un simple capricho tuyo. Pero si quieres arriesgar tu vida y quedarte a enfrentar, yo te apoyo— Marinette solo sonrió feliz porque al menos tenía a alguien quien la apoyara, pero al pelirrojo no le fué tan bién con esas palabras solo se ganó una mirada oscura de parte de todos.

Marinette se preguntaba como lo habría tomado Adrien, mañana era el día. Tenía miedo no quería irse tan rápido como lo hicieron sus padres, pero si tenía que pasar, entonces moriría con honor. Porque al menos sabía que había luchado por sus seres y por su patria.

Adrien por otro lado se encontraba en su cuarto contemplando a su Kwami dormir, durante el tiempo que habían estado juntos le habia empezado a tomar cariño, con la llegada de Plagg su vida cambió, con el pudo ser el mismo. Tenía miedo que mañana llegase, quería detener el tiempo pero no podía el ya había escogido su camino. Y si enfrentar le costaba la vida lo haría, por salvar a su padre y a los seres que más amaba.

Amor Y Destino (Adrinette) EN EDICIÓNWhere stories live. Discover now