5. Mágico L.A.

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La vida de Cayla Maldonado comenzaba a cambiar. Nada ni nadie puede condenar ni detener los sueños de ninguna persona, que se vuelvan realidad es logro de uno mismo, resultado del esfuerzo y la dedicación, el punto es no darse por vencido y no dejar de soñar.

Tras un par de meses presentándose por las tardes – noches en el pequeño foro del restaurante donde empezó a trabajar como mesera, todo mostraba una mejoría enorme, al lugar le iba tan bien, que Cayla dejó de ser mesera para tener un sueldo presentándose como cantante, así podia destinar más tiempo a terminar su carrera de arte dramático y comenzar a foguearse yendo a algunos castings.

Una de esas noches, un cazatalentos muy astuto, cenaba en aquel restaurante. Unos 32 años, era un hombre muy joven, pero visionario, al escuchar la voz de Cayla, supo que estaba viendo a una persona talentosa, pasó una agradable noche escuchándola, y la esperó, hasta poder hablarle de frente, la felicitó y le dijo que le encantaría poder trabajar con ella, sabía que podía llegar muy lejos.

Erick Gómez era muy bueno para los negocios, pudo haberse convertido en un empresario muy talentoso haciéndose cargo de las empresas de su padre, pero no quería dejar de lado el buen instinto para reconocer a un artista, y aquí lo teníamos, empezando a apostarlo todo por aquella joven de ojos marrones, tratando de convencerla de que le dejara guiarle. Cayla no aceptó a la primera, aunque toda artista principiante se hubiera dejado llevar muy fácil, la chica era lista, pasó un tiempo conociéndole, haciendo que tanto Erick como ella pudieran realmente confiar, aceptó y al principio no fue sencillo, pero ambos no se daban por vencidos, y eso era lo que les hacía un gran equipo.

"Estoy muy emocionada de anunciarles que tendré una presentación en el Foro VOILÀ de la Plaza Antara, el 29 de mayo, 20:00hrs. Un show acústico y de Jazz, estará increíble, los boletos ya están a la venta."

Decía un tweet de la cuenta de Cayla Maldonado, hacía un par de días que Alexia había comenzado a seguir su cuenta. Miró la pantalla de su celular emocionada, desde que escuchó su voz en aquel restaurant – bar hace algunas semanas, algo se había apoderado de ella, y tenía que ir. Miró su calendario, ese día tenía que estudiar para un examen muy importante en la Universidad, contestó el tweet de Cayla, no esperaba una respuesta.

Alexia a Cayla: ¿Habrá otra fecha? Tal vez no pueda ir ese día :(

Cayla a Alexia: No creo por el momento, ojalá que si puedas ir. :) ¡Saludos!

Alexia se sorprendió de que Cayla le hubiera contestado, la chica no era aún famosa, ni nada, pero la mayoría de las veces se piensa que alguien dedicado al medio artístico en la foma que fuera, no tiene tanto contacto con la gente.

Después de esa vez, se dió cuenta de que podía tener algunas conversaciones cortas con Cayla vía Twitter, esto le daba mucha emoción, y Cayla decidió seguirla, después de todo, Alexia era agradable y divertida, después vinieron las conversaciones más largas vía mensaje directo, luego intercambiaron su número de teléfono. Sabían ya, cuál era su comida favorita, que música escuchaban, lugares favoritos, libros, películas, cosas básicas que dicen mucho de una persona, al menos para Cayla así era, fue un plus enorme cuando Alexia dijo que prefería quedarse dormida escuchando música clásica, a poner en peligro su sentido del oído escuchando reaggeton, la verdad es que Alexia hacía reír mucho a Cayla.

Alexia era una chica muy inteligente y apasionada; delgada, tez blanca, cabello negro e intensos ojos verdes, y tenía un estilo muy Taylor Momsen, muy rudo y sexy para lo tierna y simpática que podía llegar a ser, toques geeks, una personalidad muy noble y aventurera y esa capacidad de hacer reír y sorprender que eran únicas.

ContraolasWhere stories live. Discover now