Capitulo 32

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Caminaba con dificultad en un desierto. Era lo más ilógico, ni siquiera sabía como es que llegaba a cada mundo.

Vi una sombra a lo lejos, un hombre con lo que parecía ser ¿un camello? ¿Es en serio?

- Aquí no hay donde esconderte, fue una mala idea pequeña - voltee y vi a Roberto muy cerca de mí.

- ¿Como es que siempre me encuentras? - sentía mis piernas temblar, sabía que me haría daño en cualquier momento.

- Eres tan predecible - reía, había tanta burla en ella que me ponía los pelos de punta.

- ¿Por qué quieres ser el único en tener este poder? - quería saber una razón y grite con desesperación - ¿Qué tiene de especial?

- Aún eres muy pequeña como para entender el gran poder que tienes en las manos. - en un rápido movimiento puso sus manos en mi cuello.

- Deja... - se me dificultaba respirar e intente quitarme sus manos, pero no podía. Él hizo que cayera y de nuevo puso sus manos en mi cuello. Sacó una daga que tenía muchos símbolos.

Oí un grito a lo lejos y cuando voltee un hombre venía corriendo a nosotros. Le dio una patada a Roberto en las costillas y cayó al lado de mi. El hombre golpeaba en muchas partes a Roberto, tomó la daga y me la puso en las manos.

- Huye, no importa a donde, solo hazlo y cuida muy bien esa cosa porque puede ser tu única esperanza.

Asustada hice lo que el hombre me dijo y trate de esconderme. Recorrí muchos mundos hasta que uno se me hizo familiar.

Estaba en un callejón y al salir de ahí me di cuenta de que estaba cerca de la casa de Baekhyun. Tenía dos grandes preguntas ¿Por qué llegué al mundo de Dana? Y la otra, ¿Como es que llegue a Corea?

Toque el timbre y me abrió Baekhyun.

- ¿Dana? - pregunto extrañado.

- Soy Dara. - sentía ganas de llorar, al fin podía estar con él.

- ¿Qué te pasó? ¿Cómo es que llegaste aquí? - parecía nervioso y por un instante como si tuviera miedo.

- Mi don, éste se ha desarrollado demasiado y he logrado viajar a muchos mundos con mi propio cuerpo ¿Como lo hago? No tengo ni la menor idea. Pero he venido por ti y quiero que regreses a casa.

- Estas muy lastimada... - toco mi cuello el cual me dolía mucho.

- He sido atacada y necesito regresarte a salvo a casa antes de que sea demasiado tarde. - tome sus manos - no quiero que tu seas lastimado por mi culpa. Me deshidrate demasiado en el desierto que ya ni siquiera me salen las lágrimas ¿Me darías un poco de agua?

- Claro, pasa.

Observaba a Baekhyun, no tenía ninguna expresión en su rostro y eso no me daba buena espina. Él había dicho que me prepararía algo para que me sintiera mejor pero actuaba muy mecánicamente y evitaba verme a los ojos.

- ¿Estas bien Baek? - pregunte.

- Sí ¿Por qué no lo estaría? - sonrió pero su sonrisa era tan falsa.

- Estas tan raro ¿Por qué no quieres decirme? - me levante y camine hacia él.

- Siéntate - cada vez que daba un paso para acercarme él retrocedía. - tu descansa.

- ¿Baek que pasa contigo? - me tenía miedo... Y no sabía por qué.

- Por favor no te acerques... - quedo pegado a la pared.

- ¿Me tienes miedo? - pregunté - ¿Por qué?

Puse mis manos al lado de él y me di cuenta de que tenía la daga en mi mano derecha.

Mundos Paralelos [Baekhyun EXO] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora