Cartas de Johann

Ella es única

Querido Dylan:

Me tienes preguntado qué es lo que me quita el sueño y hace que ya no escuche tus palabras.
Es ella. Ella es mis días y mis noches, mi sol y mi luna, mi guía y mi perdición. Ella es a quien dedico mis sonrisas. Mi último pensamiento casa noche y mi primera decepción cada mañana, al no encontrarla a mi lado como aquellas preciosas noches. Fue ella quien me volvió más loco de lo que ya estaba. Loco por su sonrisa, por sus ojos, por cada uno de sus gestos.
En una vida destruída, ella es el único pilar que queda a mi lado, cuando no quiero caer al suelo. Entre trabajo y trababjo, ella es un deporte que acelera mi corazón. Entre gritos y sollozos, ella es una caricia y un "deseo verte".
Porque cuando todas las luces están apagadas y lass puertas y ventanas se han cerrado, siempre hay alguien que consigue entrar e iluminarlo todo. Ella entró en mi cabeza, hermano, y no parece querer salir. En mis mejores noches me abraza, y en las peores, noto su ausencia como un dolor en el pecho y un frío que ni las mantas consiguen calentar. Este verano será el más largo de mi vida.
Espero que puedas entender que no por eso te eprecio menos a ti. Al fin y al cabo sigues siendo mi hermano. Esperaré tu respuesta.

Tu mejor amigo, Johann.