Mi Nombre es _______ Stark, si soy hija del famoso Tony Stark o mejor conocido como Iron man, y soy una Nefilim una larga historia, Tony nunca confio en mi y hasta ahora me ha mantenido en secreto, hasta que Tony le confio su secreto ha alguien más...
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Mi nombre es ________ Stark, soy una Nefilim, mi madre solía ser un arcángel, pero fue corrompida por sus deseos carnales, peco contra nuestro creador al acostarse con un humano, y si ese humano fue Anthony Stark el multimillonario empresario, mi madre quedo embarazada de mí, una de las últimas Nefilim. Mi madre fue asesinada, pero se aseguro que nadie supiera de mi ni mi propio padre, van 18 años y nadie sabe de mi existencia.
Estuve aislada toda mi vida lejos del mundo mortal con otros Nefilim en un instituto avandonado, eramos buscados y devueltos al infierno, yo fui la unica que logre escapar de aquella masacre, los demás fueron asesinados.
Mientras tanto yo, regrese a estar aislada en una celda para criminales peligrosos.
*Hoy* -¿Cuando van a sacarme de aquí?-grite fastidiada.
-Tenemos ordenes especificas del señor Stark, de nunca sacarte de aquí-dijo el guardia.
Si olvide decir que Stark no me recibió del todo con los brazos abiertos, ni si quiera me reconocio como su hija, así que me convertí en su problema cuando lo traicione por despecho. *FLASHBACK*
Estaba dentro de la torre Stark era muy grande y bonita, aunque no entendía nada de lo que había en ella nunca vi esos artefactos.
-Hola ¿puedo ayudarte?.-dijo una mujer rubia sonriendo.
-Yo...Yo busco al señor Anthony Stark.-dije nerviosa.
-¿De parte de quien?-pregunto.
-De su hija.-dije sonriendo con nerviosismo, la mujer me miro confundida y bastante molesta.
-¿Es una broma?.-dijo sin gracia.
-no.-dije negando enseguida.
-Hola cariño.-dijo Stark saliendo de un traje metálico. -Hola niña desconocida.-dijo sonriendo.
-podemos hablar.-dijo la mujer tomando del brazo a Stark.
Mire todo alrededor, recuerdo que mi mamá era alguien muy linda y de tan buen corazón, pero muy ruda a la hora de pelear, los Nefilim recibimos un entrenamiento especial, mi mamá me enseño a utilizar mis alas como armas, los Nefilim somos muy fuertes incluso más que los ángeles mismos e incluso superamos la fuerza de los arcángeles, y tenemos magia dentro de nosotros, tenemos acceso a muchas cosas, como velocidad, fuerza, destreza, muchos de ellos necesitan runas pero yo soy hija de una arcángel yo no las necesito, puedes manipular a tú antojo, pero mi madre me prohibio utilizarlos para el mal.
-Bien niña, no sé quien eres, y no sé porque inventas que soy tu padre.-dijo Stark sacándome de mis pensamientos.
-No te miento.-dije segura.
-No te creo.-dijo mirándome.
-Lo juro, mi madre era Elizabeth, la recuerdas tenias 20 años cuando la conociste.-dije mirándolo.
