Harry.
____ me había dicho que todo se había acabado. Pero yo no la creía, almenos no quería ni quiero creerla, porque supe, después del beso, que la quería. Y saber que no quería nada... me dolía, así que prefería no creerla. Pero ella ya había empezado a demostrarme que sólo éramos amigos. Que no habría nada más. Hoy había quedado con Louis. Amigo de Ido. El simple hecho de que fuera amigo de esa chica ya no me gustaba. Aunque tenía que admitir que Ido tenía un buen cuerpo a pesar de ser como era. No pasaba nada por follártela unas veces. Aunque sabiendo que ella me amaba, no lo haría.
Llegué a casa. Dejé mi mochila en el sofá de la habitación de los invitados ya que ese sería mi cuarto por unos días. Estaban pintando las paredes de mi habitación.
Me puse un jersey fino que había sobre la cama. La verdad, es que en esa habitación corría el aire. Tenía una ventana enorme que ocupaba toda la pared y que a través de ella podías ver el jardín, prácticamente no podías tener mucha intimidad aunque las cortinas de la ventana estaban pensadas para ello. La otra parte de la pared la ocupaba un inmenso cuadro de la ciudad de Barcelona, quizás era lo único de ese cuarto que me gustaba. Las paredes estaban pintadas de un color pistacho apagado y el suelo era parquet, no se podía decir que era encantadora pero sí muy grande.
Salí de ella y me dirigí a la cocina para merendar.
-¡Harry! Hoy veo que no has quedado- me di la vuelta al oír eso, dejando el sandwich en el mármol.
-Ah, hola Gemma. No, hoy tengo deberes, demasiados.
-Está bien. ¿Te encuentras bien? Pareces procupado o molesto.
-No, tranquila. Solo que quiero volver ya a mi habitación -mentí- Es un horror -mi hermana asintió con la cabeza.
-Se te va a enfríar el sandwich.
-¿Y por qué quiero la lechuga caliente?
-¿Comes lechuga para merendar? Cada día eres más raro Harold.
-Tu comes pasta para desayunar.
-Son las sobras de la cena.
-Pero la comes.
-¿De qué habláis?- Elle entró en la cocina. A veces se quedaba en casa porque sus padres se peleaban mucho y no los soportaba.
-De lechuga- respondí.
-Y pasta- añadió Gemma.
-De verdad que sois raros, chicos- cogió la Nutella y salió por la puerta.
-¡Eh, Eh, Elle! ¡Esa Nutella es mía!- gritó mi hermana y corrió tras ella. Era gracioso verla correr tras mi prima.
Comiendo el sandwich fui directo al comedor ya que en la “nueva” habitación no quería estar. Me senté en el sofá, conecté los auriculares al móvil y empecé a reproducir mi lista de música.
_____.
Ido a veces me sorprendía. Pero no quería darle vueltas a lo ocurrido, Niall había estado divertido y ya.
En cuanto me instalé y me acerqué a la cocina olía a canelones, me encantaban así que una vez en la cocina no podía resistirme a pasar el dedo por el lateral de la bandeja cubriendo mi dedo con beixamel y un poco de carne picada. Delicioso.
Después de comer subí las escaleras para ir al baño a retocarme antes de que Louis me recogiera para ir a tomar un helado. Al final acabaría aburriéndome de los helados.
-____, Louis está aquí- anunció mi hermano. Perfecto. Cogí el bolso y me despedí de Niall con un dulce beso en la mejilla.
-¡Hola Louis!- lo abrazé.
-Hola guapa- me sonrió.
-No hagas de Harry por favor- no pudo contenerse la risa. Adorable.
-Lo siento ____.
-Mejor- sonreí- ¿Sabes qué? No me apetece el helado.
-¡Oh! ¡Suerte que lo has dicho! Yo también estoy harto ya de ir con mis hermanas a comer helado. Con Ido y Zayn sólo vamos a los pubs y nada de helados.
¿Con Zayn? ¿El que parecía un chico duro? Sabía menos cosas de lo que pensaba, su apariencia engañaba. Aunque sabía que casi no lo conocía, durante el curso sólo lo había visto unas... cinco veces y tres de ellas estaba garabateando un muro del instituto construido por eso pero que sólo había dibujos de Zayn, muy originales y chulos, Zayn dibujaba muy bien.
-¿Qué te parece si vamos al cine?
-A mi me vale, pero pago yo.
-No te molestes Louis, yo ya llevo dinero.
-Pues no te dejaré pagar.
-Venga Louis no te gastes dinero por mí.
-Me lo voy a gastar- dijo el chico canturreando.
-Bueno, si con eso eres feliz...
-Ayudarte me hace feliz.
-Gracias Lou, eres un cielo.
-No me las des.
Entramos al cine y nos fuimos directos a las taquillas.
-¿Qué película escojo?
-Me da igual Louis, la que quieras pero date prisa que empezarán.
-Vale, vale, tranquila.
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Estuve toda la película cogiendo el brazo de Louis y escondiendo mi cabeza entre sus brazos porque el chico había escogido una de terror. Y le gustaba. Lo peor esque el sabía que no me gustaba nada ese tipo de películas. Pero me lo pasé bien, pasar ese rato con él me gustó mucho, a pesar de todo.
-¿Te gustó la película?- preguntó Louis en tono burlón mientras salíamos de la sala.
-Eres idiota.
-No es culpa mía, tu me digistes que escogiera la que yo quería, que te daba igual.
-Pues no era así.
-Tomaré nota- me guiñó el ojo. Ay, que ojazos azules más bonitos que tenía- ¿Quieres ir a tomar algo?
-Louis, tengo que hacer deberes, no sé si tu los has hecho pero recuerda que tenemos un trabajo y estoy algo cansada como para seguir paseando.
-Bien pues vamos a tu casa a terminar el trabajo.
-¿Eso lo decides tú?
-Claro.
-Que tonto- dije yo entre risitas.
Como el moreno se enterase de que le estaba utilizando para enseñarle a Harry que el beso no significó nada en nuestra relación nunca me lo perdonaría.
