❝Si hubiera tenido la oportunidad te habría dedicado todos mis dibujos.❞
•La imagen utilizada en la portada no me pertenece, yo sólo la edité.
Créditos a su/s respectivo/s autor/a/es/as.
•Todos los personajes pertenecen a Thomas Astruc.
•Fanfic 100%...
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Llegó a casa cansada, traía sus zapatos en las manos, se regañaba a sí misma por no haber llevado sus preciados tenis, había algo diferente en su hogar. El ambiente era más... Familiar.
Se acercó a la cocina, tenía sueño, soltó un bostezo a penas llegó al umbral de la puerta, miró a Gabriel y a Adrien sentados en el comedor, su progenitora iba y venía preparando la comida, estaban tan metidos en ese ambiente familiar que no notaron su presencia. O eso creía ella.
—________, llegas tarde cariño —Habló Alissa aún de espaldas.
Las miradas se dirigieron a ella inmediatamente.
—Lo sé, necesitaba dar una vuelta por ahí, no tuve un buen día —respondió sin moverse de su lugar. —Lo sabemos, Adrien nos lo dijo, Lila está suspendida una semana —informó Gabriel con una pequeña sonrisa. —Oh... —fue lo único que pudo salir de su boca. —¿Qué ocurre con tus zapatos? —Por fin, Alissa la miraba. —Eh, nada, me lastimaban, es todo, estaré en mi habitación —se dió la vuelta para dirigirse a la segunda planta de la casa.
Cambió su ropa por una más cómoda y subió al ático. Volvió a abrir el baúl de su padre, observó un pequeño paquete y una carta, tomó la carta. Su nombre estaba escrito en el sobre, lo abrió y comenzó a leer.
_________:
¿Qué tal cariño? Te estoy escribiendo ésta carta desde la India
«Pero él nunca fue a la India»
¿Recuerdas cuándo creíamos que Radha era la diosa de la alegría? He de admitir que estábamos equivocados, al llegar les pregunté a las personas que me recibieron, cabe recalcar que fueron muy amables, ellos me comentaron que Radha era la diosa del amor y de la belleza.
Te extraño y espero que puedas responder ésta carta, sé que lo he dicho en las demás cartas que te he enviado, pero aún así mantengo la esperanza de que responderás.
-Papá.
«¿Qué? ¿Demás cartas?»
Observó el paquete, rompió la cinta y retiró el papel, un montón de cartas salieron de allí.
Abrió los ojos, su respiración estaba agitada, frente a ella Adrien la miraba sorprendido, sus ojos esmeralda la analizaban.
—Lo lamento, no quería despertarte, así, Alissa dice que la comida está lista —sonrió ligeramente. —Gracias, en un momento bajo —Adrien asintió.
