«Fetiche ; Sam»

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|Resumen › [__] tiene una debilidad con los hombres en traje. Sobretodo si es Sam quien lo lleva.

Sam Drake/lectora [nsfw].

[__] suspiró por décima vez al escuchar maldiciones provenientes de la habitación. Arreglaba su peinado y añadía algo de maquillaje en su rostro, no en exceso pero aún así se veía natural y presentable.
Salió del baño y rodó sus [c/o] ojos al ver el intento de Sam de ponerse la corbata.

—Eres un desastre, –comentó ella caminando hacia él. —deja que te ayude.

La distancia se acortó entre ellos, las delicadas manos de [__] arreglaron la negra corbata mientras que las gruesas manos del Drake se posaron en su cintura, acariciándola con su dedo pulgar.
Sus ojos se fijaron en sus acciones, de vez en cuando la miraba, fijándose en los detalles de su rostro.

—¿Es necesario ir? –se quejó él. —Te recuerdo que no conozco a nadie, más razones para que me confundan con tu padre.

—Sí y no. –contestó ella riendo. —No eres tan viejo, ¿cuántos años dices que tenías?

—45, –respondió. —y tú treinta. ¿Lo ves?

—A mi me gustan los hombres de tu edad, cariño, y te repito que no eres viejo. –le dió un rápido beso al acabar y se apartó para ir de nuevo al baño. —Además, les he hablado a algunas amigas de ti, dicen que eres un hombre que sabe bien lo que hace con-

[__] salió de nuevo y se quedó quieta en su sitio ante la exquisita vista de la que sus ojos estaban siendo testigos.
Sam se giró hacia ella, extrañado de su abrupta interrupción mientras acomodaba la chaqueta y abrochaba los últimos botones.

—¿Con qué? –preguntó al ver que ella aún no decía nada. —¿Cómo me veo? –trató de llamar su atención.

La mujer salió de su pequeño trance y mordió su labio inferior disimuladamente, pero fue en vano, Sam ya había notado el gesto y no mentiría en que quería saber que era lo que le ella estaba pensando en ese instante.

—¿Quieres qué siga contando lo otro o quieres qué te diga cómo te ves?

—Me encantaría oírte decir que es lo que estás pensando, pequeña.

Que te follaría ahora mismo con el traje puesto.

Justo como lo imaginaba Sam, sonrió victorioso y caminó hacia ella, de nuevo acortando las distancias. Sus gruesas manos rozaron su cintura en un intento de elevar la tela del vestido, dejando sus piernas más al descubierto.

Sam mantuvo el contacto visual con [__].
Y pudo ver que ella intentaba no perder su compostura, además de no deterrirse en ese momento. Sin embargo, la presión pudo con sus deseos y ella no tardó en depositar sus recién pintados labios contra los de él.
Sam se sorprendió pero aún así cerró sus ojos y dejó que las manos de [__] le empujaran en dirección a la cama, así pues, ella se subió encima y lo miró con adoración.

—Me encanta cuando te tengo debajo Sammy. –sonrió con dulzura. —Voy a dejar la marca de mis labios, espero que no te moleste, pero veo que ha sido demasiado tarde.

Rió intentando quitar el resto de pintalabios de los labios de Sam con sus dedos. Pero él los agarró y los atrajo a su boca donde comenzó a lamerlos lentamente, haciendo que ella tragara saliva fuertemente y mordiera su labio inferior ante la vista.
Sam sonrió seductoramente. Un poco más y haría que ella llegara al orgasmo con solo lamer sus dedos mientras pensaba en qué lugar podrían haber estado anteriormente.

Uncharted one-shots ›;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora