Capitulo 1

6.4K 292 7
                                    

[Negación] Todo Crepúsculo pertenece a Stephenie Meyer

** 1 **
Él está muerto, Edward está muerto, Él está muerto, Él está muerto, Dentro de mi cabeza
repetí las palabras una y otra vez. De alguna manera la esperanza de que sería capaz de captar la finalidad de ellos. Era imposible, sin embargo. No podía imaginar un mundo donde no existiera Edward. El sol se había desvanecido en mi mundo y la oscuridad eterna podría nublar mi alma siempre ahora.
Levanté el tejido que estaba sosteniendo a los ojos y fingí para enjugar las lágrimas que
nunca se caería.Mi corazón estaba vacío. Vacía, al igual que los tres ataúdes cerrados de pie delante de nosotros. Olí las flores, lirios blancos para Carlisle, rosas amarillas para Jasper y, finalmente, un ramo de flores silvestres de nuestro prado de mi amado Edward. Traté de
memorizar su rostro frente a mí. ¿Cuánto tiempo se tarda hasta que no podía recordar todos los pequeños detalles más?
La mano de Charlie estaba caliente en mi hombro, su calor humano que irradia a través
de la tela de mi vestido de negro. Él estaba tratando de consolarme, pero yo sabía que
era imposible.Con el tiempo todo había terminado. Oí las palabras de la gente, estaban formando pero era como si todo estaba apagado. Tal vez mi escudo estaba en modo de autoprotección ahora.
-Es hora de irse a casa.- La voz de Rosalie era suave y fue el único que logró llegar a mi oído. La seguí hasta el coche y me siento detrás de Emmett en el asiento del pasajero de la parte de atrás.
-Alice tenía razón para omitir esta farsa del funeral.- Ha indicado, el desmoronamiento de una roca del tamaño del puño en polvo fino antes de dejar que se caiga por la ventana entreabierta. Me hubiera gustado que alguien me estrellara como este. Los Volturis se habían ido, ¿Cómo voy a encontrar a alguien que me ayude a terminar con mi vida ahora? Entonces pensé en mi hija, mi Renesmee y yo sabía que tenía que ir a por ella, ya había perdido a su padre, no podía hacer de ella una huérfana completa.
-Bella, ¿ha conseguido llamar al perro?- Rosalie me preguntó cuándo aparcó el Mercedes delante de la casa de los Cullen a los pocos minutos.
- Él tiene que volver con Nes- Renesmee.-Negué con la cabeza. -No, yo prefiero tenerla lejos de todo esto posible, Jake va a llevar a Renesmee a Isle Esme.-
-¿Sabe ella sobre Edward?-
-No puedo dejar que Jake le diga que su padre está muerto, mañana voy a tomar un
vuelo a Río.-
-¿Nos estás dejando también?- Emmett preguntó antes de que ayudara a Esme que estaba sentado a mi lado en el coche para ponerse de pie. Sus manos temblaban, pero sus labios se quedaron prensan en una sonrisa que había sido congelada en su cara. No había hablado mucho desde luego. No había palabras necesarias para que sepa cómo se sentía. Al igual que yo Esme había perdido el amor de su existencia.
-No me puedo quedar aquí. No puedo soportarlo.-
-Vamos a estar cuidando de Esme.- Rosalie me aseguró. Ella envolvió sus brazos alrededor de su madre adoptiva y la atrajo hacia ella. -No es cierto,¿Emmett?-
-Seguro bebé.-
-Voy a empacar ahora.- Les dije antes de caminar lentamente a la casa de nuestra familia nos había dado Edward y a mí como un regalo. Ahora, con mi marido se ha ido irrevocablemente se sentía como una prisión para mí. Todo dentro de esa casa me recordaba a él. No podía soportarlo. El dolor me sofoca y tira de mí hacia abajo en una espiral de purgatorio emocional.
Podía oler a Alice antes de verla. Estaba sentada en el suelo de mi camarín, la celebración de una sola honda-bomba roja en sus manos delicadas.
-No encuentro el otro, debe estar perdido.-
-No importa.- Susurré, me senté a su lado.-Nada importa ya.-
-Lo sé. Yo ya he empacado tus maletas. Están en tu dormitorio.-
-Gracias.- Murmuré, extendiendo mi mano para colocarlo cuidadosamente sobre la de
ella.- No tenías que hacer eso.-
-Lo sé. Yo quería.-
Me he dado cuenta por primera vez de lo delicada que sus manos son, los dedos de Alice me recuerdan a la de una muñeca de porcelana.
-Jasper está muerto, es mi culpa, debería haber regresado por mi cuenta.-
-No es tu culpa.- Le digo, la agarre de las manos apretando alrededor de la suya. -Lo
que sucedió no es su culpa.-
-Vi lo que iba a pasar, lo vi todo. Eso no te hace responsable de nada. Aro es el que hizo la elección.-
-No debí de dejar que Jasper vuelva aquí conmigo. No debí dejarlo.-
-Jasper vino contigo porque te quería.- Un gemido torturado sale de su boca y se inmutó cuando ella se mueve hacia delante a gran velocidad. Sus puños se conectan con las paredes, la fabricación de hormigón y madera astilla que nos rodea.
-Detente!! Estás destruyendo la casa y te haces daño!!.- Le grite
-No me importa! Tienes razón. Jasper regresó conmigo porque me quería. SU
AMOR POR MI LO MATO!! .-
Me las arreglo para alejarla de la pared. Ella tiembla en mis brazos cuando le pongo en mi regazo como un niño pequeño. Por un momento me acuerdo de lo que me llevó a cabo después de que ella había regresado después de que Edward me dejó. Como ella me consoló. Ahora, era mi turno de hacer lo mismo por ella.
-Grita si así lo deseas. Nadie te va a escuchar más que yo. Las paredes son a prueba de sonido.- Ella gime como que el rock adelante y atrás, acariciando suavemente su espalda con mis
dedos hasta que finalmente se calme. Durante un tiempo seguimos siendo como somos.
Ambos somos incapaces de mover una sola pulgada.
-Tus ojos son de color negro.- Le digo.-¿Cuándo fue la última vez que cazaste?-
-No puedo recordar-
-Entonces vamos a ir ahora. Ven conmigo.-
-No quiero cazar. No quiero nada, aparte de detener este dolor dentro de mí. Es insoportable.- Su voz es torturada y sé que si ella no caza en el corto plazo del dolor físico comenzará a dominar a la emocional.Tire de ella a fuera conmigo y prácticamente obligarla a beber de los primeros alces que nos encontramos. Ella bebe con avidez, suaves gemidos escapar de su boca con cada trago lleno de sangre se toma. Ha sido raro, Hay una gracia en Alice mientras ella se alimenta del animal que es simplemente hermoso.
-Quiero estar muerta.- susurra. -Aro debería haberme matado en primer lugar.-
-No digas eso. Me alegro de que estás todavía aquí. Te amo.-
-Te amo demasiado. Lo siento por Edward. Te quería tanto. Levantándose del suelo prendí fuego a los alces muertos en el suelo. -Vamos a volver a casa.-
Ella toma mi mano y la levanta se queda quieta con su boca cubierta de sangre.
-Gracias por no odiarme. Podría entender si lo haces-
-No te culpo por lo que pasó. Por favor, no creas eso.-
-Pero tú no quieres quedarte aquí. Te vas lejos y luego voy a estar sola.-
Me quito las botas cuando entramos en la casa de nuevo y suspiro. -Todo aquí me
recuerda a Edward. No puedo soportar esto.-
-Lo sé. Pero también sé que no va a volver ... nunca.- Alice puede ver la idea que se propaga a través de mi cabeza incluso antes de que las palabras salgan de mi boca. Ella envuelve sus brazos alrededor de mí y responde a mi pregunta sin darme la posibilidad de volver a pensar en mi decisión. -Sí.- susurra en voz baja. -Quiero ir contigo a Isle Esme.

Lo que el Corazón Necesita (Bellice)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora