SINIESTRO

Capítulo 4: Parte cuatro

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"Cuerpos?"

Louis retrocedió instantánea mente, ni siquiera estaba seguro de lo que eso significada, y se tambaleo por una respuesta, mientras solo miraba con ojos muy abiertos fijamente al chico llorando en frente de él. No lo había visto tan roto desde la noche.

—"A que...a que te refieres Harry?"— Pregunto Louis secamente, conteniendo el aliento hasta que pensó que sus pulmones estallarían. Se encontró a si mismo alejándose, pero Harry estaba agarrado a su camisa como un niño gritando por consuelo.

Harry estaba hiperventilándose y sollozando tan fuerte que sus palabras apenas eran coherentes, —"Cuerpos, Louis. Gente, niños- oh dios niños."— Louis se tensó y se deslizo fuera de la cama, mirando al chico, quien se retorcía como pez fuera del agua en desesperación. El hombre sentía como si fuera a vomitar, no quería creer esto- tenía que estar soñando.

Louis no se dio cuenta que había empezado a llorar hasta que hablo, —"¿!A que te refieres con más cuerpos Harry!?"—El grito, temblando y apoyándose en el borde de la cama para apoyo, mientras se sentía extremadamente mareado.

—"No lo sé, Louis,"— El chico sollozo, de repente sentándose derecho y arrastrándose en la cama para aferrarse a los brazos de Louis, quien se estremeció y se alejó, "Todo está borroso... V-Vienen partes, y piezas y no empezaba a recordar... cosas... hasta que vine aquí- hasta que te conocí." Sonaba tan herido y distante, estaba mirando a la pared con ojos llorosos y sus labios estaban hinchados y rojos, mejillas pintadas con líneas de lágrimas.

Louis ahora estaba aplastado en contra de la pared, su estómago girando constantemente y amenazando con voltearse al revés, "Mataste a más personas?" El susurro entrecortadamente, labio inferior temblando en horror.

Harry dejo salir un destrozado grito, cubriendo sus oídos y encorvándose hacia abajo como si alguien hubiera gritado directamente en su oído, apretando sus ojos mientras gemía aún más fuerte, "No lo digas, no quiero escucharlo."

"Harry!" Louis grito, empujándose de la pared y agarrando los lados de los hombros del chico, obligándolo a contacto visual de cara a cara, "Tienes que respirar para mí, está bien? Tienes que decirme que es lo que estas recordando." El intento tocar sus años de experiencia de terapista, pero todo era irregular y desordenado ante el hecho de que estaba cayendo tan fuerte por alguien que le acababa de decir que mató a más de siete personas.

Harry sacudió la cabeza una y otra vez, su pecho subiendo y bajando frenéticamente, labio inferior temblando, "NO LO SE, Louis! Lo siento, no lo veo o lo recuerdo...normalmente." Él dijo con voz ronca, mostrando los dientes, como si restringiendo algún tipo de furia. Louis tomo la oportunidad de frotar sus hombros para tratar de calmarlo, arrullándolo suavemente.

"Que sientes?"

Harry miro hacia arriba, la calma momentánea que se había puesto en el chico con el arrullo de Louis, cambio a vergüenza y desvió los ojos mientras su labio inferior temblaba otra vez y el sacudió la cabeza, mirando hacia la colcha.

"Harry, por favor."

El de nuevo negó con la cabeza una y otra vez, sollozos lastimeros de su boca haciendo eco, "S-Solo siento como este peso pesado en mi pecho- como si una roca esta solo sentada ahí. Como si...sus cuerpos estuvieran sofocándome." Él le susurro, voz casi inaudible.

Louis no pudo evitar el gemido aterrorizado que raspo en el fondo de su garganta, y no pudo evitar dejar escapar un pequeño sollozo, "Harry..." era todo lo que podía decir. Se sentía tan enfermo, no solo por el peso de la situación, sino también por el hecho de que sentía... lastima por él. Un segundo pensamiento estaba molestándolo -y si él estaba jugando la carta de culpa, inventando historias de nuevo? Pero con la mirada afligida en su cara, decidió en contra de eso. El paso una mano para empujar los rizos de su cara –y para sorpresa incluso de sí mismo, se inclinó hacia adelante y le dio un beso en la frente. El tomo un mordisco de la manzana prohibida, y un temblor inusual tomo todo su cuerpo. Harry momentáneamente dejo de temblar y miro hacia arriba debajo de sus pestañas mojadas. El sonrió débilmente –no su habitual sonrisa maliciosa- solo una de genuino agradecimiento. Louis dejo escapar un suspiro roto, ahuecando la mejilla del muchacho en su mano.