Capítulo 1 Nacer

8 1 1
                                    

Concentrado en la pared de enfrente, toda agujerada y frágil, sentí como si se fuera a caer cuando el viento soplara, y aun así no me movía.

Dos balas me habían atravesado, pero no me dolía mi cuerpo, me dolía el alma, estaba ahí arrinconado en una calle, me acompañaba ese frio que me helaba hasta los huesos.... Solo, el día estaba muriendo lentamente, un silencio... un silencio absoluto y tranquilizador que consumía y asfixiaba, ese día fue mi primer día solo... Me levante con ayuda de la pared, era muy doloroso moverme, por una cortada que tenía debajo del hombro del lado derecho, sentía como pequeñas agujas se clavaban una a una, cada vez que movía alguna parte de mi cuerpo, incluso después de caminar un largo rato no encontraba un lugar lo suficientemente sólido para dormir o al menos tratar, la noche había llegado, no tenía reloj pero calculé que eran como las 11pm.

12/04/2569

El hambre me levanta con un gruñido más que espantoso, sentía como si mi estómago se consumiera a sí mismo, y con él todas mis fuerzas; tenía que conseguir comida. A pesar de que yo pertenecía a la nueva generación de humano, los cuales solo comían una vez a la semana, yo moría de hambre. Recuerdo que mi última comida fue un pez bastante feo, para mi gusto nada exigente.

Encontré un edificio, era viejo pero sólido, debía de ser de unas 3 generaciones atrás, aún tenía el signo de la resistencia, era posible que dentro hubiera comida. Apenas di dos pasos dentro del edificio de la planta baja y mi nariz percibía el olor de cuerpos en descomposición, era un olor de putrefacción que me hizo sentir como si los gusanos ya estuvieran devorándome. Después de ver escasamente el primer piso, corrí hacia el segundo, pero nada me era útil. Así recorrí otros dos pisos sin ver vida y sin ver comida. Entrando al quinto piso me tropecé con una mochila grande, mi instinto me hizo sacar mi pistola rápidamente. Al llegar al suelo me espere un segundo para escuchar pasos, pero solo escuche un crujido. En la mochila había mucha comida, tanta para alimentarme unos dos meses sin pasar hambre, me senté en el suelo junto a la mochila sin tomar precauciones. Sin embargo, a los dos minutos concurridos ya tenía a un hombre mayor apuntándome con una pistola.

-escucha, mi familia tiene hambre y no te quiero matar, pero...-su voz sonaba asustada.

Mire de reojo y vi a una mujer como de 40 años, aunque tal vez tendría menos, la gente envejece al nutrirse mal y no dormir, había una niña como de 9 años a su lado. Sólo que ella no parecía tener miedo pues me miraba con una mirada penetrante y tierna. Sin embargo, no sé si su encanto era una especie de espejismo que constituía la fuerza con la que me miraba.

-escóndanse, que no las vea- le dijo con miedo volteando y quitando la vista de mí.

Cuando regresó a verme, yo ya había colocado mi arma en su cuello.

-lo hare por ella, y no me moveré de este lugar hasta mañana-respondí

-nosotros tampoco, gracias-lo dijo un poco más tranquilo.

Después de eso comimos y sobró muy poca comida.

Volteé a ver a la niña para sostenerle la mirada unos segundos hasta que ella dijo:

-hola soy Annie-

-Frank....-

La herida me dolía, aunque menos esta vez, me quite la camisa para ver como estaba, se veía bastante mal y no tenía con que tratarla, Annie volteo a verme y con los ojos sobre mi herida se acercó, no dijo nada y se fue para regresar en un instante con su mochila, me trato la herida y me puso una venda, lo hizo con tanta tranquilidad y cuidado que me quede dormido cuando terminó.

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Aug 25, 2017 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Earth DividedWhere stories live. Discover now