Capitulo 1

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   -Buenos días jóvenes, yo soy su profesor de matemáticas, ya me conocen pero para los que no, soy su profesor Luis Montebello- dijo el profesor dejando sus cosas en el escritorio y sacando el marcador de la pizarra. Hoy es lunes y sigo sin creer que la primera clase del día sea matemáticas, soy tan mala en matemáticas que mis padres tuvieron que conseguir un tutor para que me ayude cuando tenia 12 años pero yo me pregunto ¿Porque les importa tanto que aprenda matemática si no seré ingeniera  o contadora? - Hoy vamos a dedicar nuestro tiempo en un repaso del año pasado- y con eso se volvió a la pizarra y empezó a escribir los ejercicios

   Escuche una risas de 3 personas, me volví y los idiotas que se reían eran Emily, Gabriel y Hector- ¿Y ustedes de que tanto se ríen?- pregunte

   - Mirale el zapato al profesor- me dijo Emily que esta a mi lado, le hice caso y vi el zapato del profesor

  - yo no veo nada- dije

   -no el derecho, gafa,  el izquierdo- dijo Gabriel

  Vi el izquierdo y tenia un trozo de papel higiénico pegado a la suela del zapato, aguante la risa pero igual no sirvió de nada

   - ¿Que le parece tan gracioso señorita Garces?- dijo el viejo antipático

Oh nada solo que tiene la prueba de que cago, en sus zapatos- pensé

   -Es García- dije rodando los ojos

   -Eso no fue lo que le pregunte

   -Pues nada profe, siga escribiendo

   Y con eso volvio a hacer lo que estaba haciendo y yo me gire a los sin oficios y les dije- ¿Son estúpidos o que? casi me regañan por eso

   -Pero no lo hicieron- Dijo Hector

   -Oigan, ¿Que tal si al salir de clases nos vemos en mi casa?- Dijo Gabriel

   -El grupo de atrás ¡Callense!- grito el profesor y se fue a su escritorio a hacer que se yo con el teléfono

   -A veces pienso que nos dejara sordos- Dije- Esta bien yo me apunto a ir a tu casa

   -Yo igual- Dijeron Emily y Hector al unisono

   -¡Ay! no empiecen- dije tapándome la cara con las manos y Gabriel riéndose

   - ¡Me debes un chocolate!- dijeron Emily y Hector- ¡Me debes otro chocolate

   -¡Me debes otro chocolate!- Y con ese alzaron la voz y el profesor se levanto molesto

   -¡Aquel grupito ¿quiere que los saque de clases?!

   -No profe, nos vamos a quedar callados, se lo prometemos- Dije, como siempre, la defensora del grupo

   -Espero que así sea. Ahora menos habladera y mas trabajo

   -ya oyeron- Dijo Hector

   -Idiota- Dije rodando los ojos y vi como Hector y Gabriel sacaban sus cuadernos y sus lapices- Oh, trajeron cuadernos ¿Que les paso a los locos que no traían ni mochila el primer día  de clases?

   -Pasa que si no nos ponemos las pilas repetiremos el año-Dijo Gabriel

   -Exacto- Dijo Hector

   Emily y yo nos miramos extrañadas y volvimos a los ejercicios

   -¡Ah! se me olvido decirles, no saldrán de esta aula hasta que vea que terminaron todos los ejercicios- dijo el profe

   -¿QUE?- Dije

   -No puede ser- Dijo Emily

   - No se vale- todos empezaron a protestar

   -No se quejen, en mi clase...

   -manda usted- dijo todo el salón cansados de escuchar lo mismo cada año; el viejo canoso sonrió y volvio a su teléfono

I need you in my lifeWhere stories live. Discover now