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¿Quién ha dicho que el hecho de ser famoso ya es sinónimo de vida perfecta? Sí, dicen que por el hecho de tener fama significa que tienes lo que quieres y necesitas, que eres la persona más feliz del mundo, que todos te aman.. Pero no, no es así.

Pensaba en eso mientras me miraba inseguro en el espejo.
-Hey! Jimin, saldremos a comer, ¿vienes?- Se asomó Jungkook por la puerta.
-No, me quedaré ensayando.- respondo sin siquiera darle una mirada.
-Ensayarás después, debes comer.
-No gracias, no tengo apetito.- miento, como siempre lo hacia para no despertar preocupación en los demás.
-Está bien, te traeremos algo por si luego sientes hambre.- asentí.

Una vez la puerta cerrada me alejé del espejo para dirigirme a mi móvil para colocar música y empezar a ensayar.

[...]

No podía más, sentía que en cualquier momento colapsaría y eso significaba que debía detenerme y descansar; me dirigí hacia el rincón donde tenía mis cosas para tomar mi botella de agua, mientras bebía de ella sentí un terrible mareo que me tambaleó hasta quedar en el suelo de rodillas, definitivamente la debilidad de mis defensas me estaba matando, algo que yo mismo me estoy ocasionando.

Me levanté del suelo y me dirigí hacia la puerta para tomar rumbo a mi departamento; al caminar por los pasillos me llamó la atención una chica la cual creía haberla visto antes.

Mi corazón se detuvo al verla voltear, era ella, después de casi un año, era ella. La chica de la cual viví enamorado por años, finalmente la veo, se alejó de mí por ir a el extranjero, ¿razón? No la sé pero me dolió demasiado aquella noticia de la cual no me enteré por ella misma; mis pensamientos fueron interrumpidos cuando sentí sus brazos rodear mi cintura, no sé en que momento se acercó pero si ya estaba demasiado sorprendido, ahora estoy peor.

-Perdóname.- Sentí un inmenso escalofrío al oír aquella palabra salir de su boca, ella fue la que se alejó pero sin embargo yo me sentía culpable.
-(T-T/n)..- nada más podía salir de mi boca, estaba completamente paralizado.
-De verdad lo siento, no debí irme así, no fui más que una egoísta al hacer eso, me enteré por lo que haz estado pasando, por eso regresé.- sentía que en cualquier momento podría echarme a llorar, todos mis problemas vinieron de golpe y no sabía si podía soportarlo.

En un movimiento rápido la tomé del brazo y la llevé a mi departamento ya que no quería ningún tipo de problemas, bueno, a decir verdad quería estar a solas.
Nadie decía nada, creo que hasta podíamos escuchar nuestros propios latidos de tan silencioso que se encontraba el ambiente.

En toda la trayectoria podía sentir como ella seguía sorprendida por el hecho de que la tomara del brazo tan repentinamente. Una vez que llegamos observé todos los lados para asegurarme de que nadie vea lo que estoy apunto de hacer; ¿qué creen que la gente va a pensar al ver que un Idol esté metiendo a una chica a su departamento? Nada lindo, ¿no?

-Pasa..- obedeció, con pasos inseguros entró.
-¿P-Por qué me traes a-aquí?- sabía que comenzaría a tartamudear, era algo muy común en ella al estar en este tipo de situaciones.
-¿Por qué me dejaste solo?- la miré fijamente a los ojos, aún no había encendido y luz pero la iluminación de la luna entraba por la ventana así que podía apreciar cada facción en ella.
-De verdad lo siento.- una lágrima salió de su ojo derecho, era muy notorio que se le formaba un nudo en la garganta.-Solo quise conseguir una buena educación en el extranjero, recibí una propuesta y tuve que ir.- agachó su cabeza.
-¿Tan difícil fue decir eso?

Ahora caminaba de un lado a otro desesperado, no podía aguantar lo que estaba pasando.
Todo lo que estaba pasando era algo demasiado complejo de soportar y no sabía si quiera como enfrentarlo.

-Creí que dolería más despedirnos.
-Pues a mí me dolió más que desaparecieras así como así.- apreté mis puños resistiendo todo lo que quería sacar dentro de mí.
-De verdad estuve arrepentida, te juro que apenas llegué a Canadá solo quería regresar por ti, pero no pude.- pude escuchar como sollozaba ligeramente- y no me arrepiento de haber regresado, me doy cuenta de que es verdad de lo que te está pasando.- tomó mi mano, acción que me sorprendió debido a que estaba de espaldas.

Quería llorar, tenía todas las ganas del mundo por hacerlo, pero resistí, no quería que me viera en un estado tan débil como ese.

Soy una persona que no le gusta demostrarse débil o vulnerable frente a los demás y mucho menos frente a ella; lo único que consigo es que los otros sientan lástima por mi y es lo que menos quiero conseguir.

-¿Qué haz oído?- ahora me encontraba frente a ella.
-Tu extrema pérdida de peso, tu extremo esfuerzo en ensayos, entre otras cosas más, y todo eso por críticas.- y sí, así es como consiguió que mis primeras lágrimas salieran.
-¿Qué puedo hacer al respecto? Solo obedezco a mis fans con tal de mantener una buena imagen y que ellas estén complacidas
.- miré hacia el techo para coger aire.
-Jimin..

-A decir verdad no entiendo que es lo que quieren, me dicen que estoy gordo y debo adelgazar, bien, lo hago; dicen que debo tener los cachetes como los tenía antes, okay, subo de peso para devolver mis mejillas a como estaban; quieren que tenga más masa muscular, bueno, me ejercito más seguido; quieren que mejore mis habilidades vocales, entiendo, me esfuerzo practicando y mejorando pero sin embargo me dicen que no debo esforzarme tanto.. ¡¿Entonces que demonios debo hacer?!- solté un golpe a la pared.

Ella rápidamente me tomó del brazo para que deje de lastimarme, yo solo me deje caer en el suelo llorando como si dependiera de ello.
-Por favor ya deja de hacerte daño.- su llanto se volvía cada vez más intenso.
En un acto desesperado la abracé con fuerza, ella rápidamente me abrazó de vuelta, nos quedamos así un largo rato.

-Estás demasiado débil, detén lo que estás haciendo porque lo único que logras es hacerte daño a ti mismo, me duele demasiado ver como estás sufriendo.. Perdóname por haberte dejado así, no creí que llegaría a pasar algo tan extremo.- se levantó para luego ayudarme a levantar y llevarme hacia el sofá.

-Por favor no me vuelvas a dejar solo, te lo pido.- secó lentamente mis lágrimas.
-Jamás lo volveré a hacer, te lo prometo.- besó mi mejilla- te ayudaré a superar todo lo que está pasando.- sentí como mi corazón se saldría en cualquier momento, finalmente escucho aquella palabras que siempre esperé. No pude más y la besé, pude notar como quedó totalmente paralizada ante mi acto pero sin embargo no tardó en reaccionar, el beso fue un tanto corto pero sentí como si pasaran horas.

-¿Te puedo decir algo?- asentí.- siempre esperé que hagas eso.- soltó una pequeña risita.
-Perdón por tardar tanto.- volví a besarla, juro que no resistía hacerlo y podría continuar haciéndolo mucho más y sé que ella piensa lo mismo.
-Te amo.- sus mejillas tomaron un tono rosa que me encantaba.
-Te amo más.

Creí que las cosas empeorarían, creí que nunca iba a poder ser feliz, pero apareció ella y todo cambió, era la persona que más necesitaba. Con ella podrían cambiar las cosas y mejorar. Ella era todo lo que necesitaba para sentirme bien, su apoyo era mi soporte y ahora lo tendría por siempre.

Siempre creí que lo nuestro quedaría en amistad, creí que sólo me veía para eso, pero me equivoqué, al igual que yo ella siente algo más que sólo esa simple amistad, conseguí lo que más anhelaba y eso me hacia sentir con más fuerzas para superarlo todo.

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⏰ Última actualización: Sep 07, 2017 ⏰

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