España, el Imperio del Lobo

Capítulo 1. El 12 de Mayo de 2019.

Francisco es mi nombre. Soy teniente, y ya he ganado 3 medallas. Cuando me uní a la Academia del I.E.L. tenía claro que mi futuro iba a ser dedicado a defender mi país. Renuncié a la empresa familiar, y continué por mi camino. Gracias a este puesto tengo mucho prestigio en la sociedad, y mis amigos son de clase Alta, políticos, militares y empresarios importantes, puesto que fui el primero del año en conseguir una medalla, que aunque parezca que no es digno de tanto prestigio, lo era, porque en esta sociedad valoramos los premios como una muestra de que esa persona es un ganador, y que no es precisamente alguien inútil.

Por supuesto, que, al entrar en el Ejército, renuncié a la familia, lo cual significa que no tengo pareja ni descendientes. Mi cara está oculta a todo el que no es mi espejo o mi perro. Soy alguien que lo deja todo, y mi razón es la seguridad del resto de ciudadanos. Aunque no parece lo que se dice, el I.E.L. es un gran compromiso.

Pero el 2 de Mayo de 2019, conocí a alguien de quien estoy atraído. Cuando estaba patrullando voluntariamente, o como mis amigos dicen, dando un paseo, encontré a una chica que estaba siendo robada por alguien de la clase baja. Al saberlo, desenfundé mi pistola, apunté, y le di la orden de no moverse y devolver lo que a robado. El hombre quiso escapar, y a cambio, se llevó un disparo en la pierna (He de recordaros, que las leyes no dictan que un oficial no pueda disparar a un hombre teniendo razones, es legal incapacitarlo o pararle de un disparo, lo que sería ilegal es que le hubiese matado). El hombre entregó todo, llamé a un servicio de emergencias para que lo recogiesen y le llevasen a un hospital. 

Cuando le devolví lo robado a esta chica, me empecé a sentir atraído por ninguna razón. Después de lo ocurrido, ella contacto conmigo para darme las gracias por mensajes de una red social. Me dio su número de teléfono para hablar y, como yo lo llamo, realizar un encuentro social un día. 

El 4 de Mayo fuimos a un restaurante cercano del cuartel. Para no identificarme, dejé mi uniforme y mis medallas y todo lo relacionado con el I.E.L. Tal como lo hablamos, nos vimos en la puerta del restaurante, a la hora establecida. Simplemente comimos y hicimos todo acorde al plan que teníamos.

El 7 de Mayo volvimos a realizar un encuentro social. Esa vez lo hicimos en el Parque de Atracciones. Se suponía que iba a ser un día divertido, pero entre las filas que había el tiempo que estuvimos se hizo muy corto, así que ella propuso hacer un viaje. A pesar de la gran oferta yo lo rechacé. 

El 11 de Mayo fue el día en el que fui a ver a su familia en una comida que habían organizado para celebrar el cumpleaños del hermano de mi 'amiga'. Ella me invitó, porque le gustaría que conociese a su familia para que vayamos acostumbrándonos. La comida no estuvo mal, pero la familia me pareció que no estaba a la altura de mi prestigio. Eran una especie de clase alta tirando a baja. Aunque me llevé muy bien con el padre.

El 12 de Mayo de 2019 es una gran fecha, en el peor de los sentidos. Fue el día del atentado en el centro, el lugar en el que nos encontrábamos. Por suerte, nunca me alejo de mi pistola, por lo que pude defenderme como pude. La policía llegó a tiempo, yo me hice la víctima y no mencioné nada de que a dos de ellos los maté yo. En ese día, hubo ciento treinta muertes, y treinta heridos, entre los heridos, mi 'amiga'. Ese día fue el día que más me afectó.

El atentado constó de tres oleadas: la primera fue el grupo de los que van armados, la segunda fue los que iban con la bomba, muy potente, que, si no hubiese estado a una esquina, me hubiese afectado. Y la tercera fue un gran grupo de personas, casualmente, del grupo de la oposición conocido como Los Gatos.

El grupo de Los Gatos es poderoso, pero siempre gana el I.E.L. Nunca hemos perdido una batalla. Cuando lo terroristas fueron abatidos, me acerqué a varios de ellos para identificar. Entre ellos estaba un hombre con una tarjeta de visita de un 'spa'. Acudí a ese Spa y pregunté por el terrorista. Interrogué a través de la fuerza al del Spa para que me dijese donde se encontraba la casa del terrorista. Después de muchos insultos, conseguí averiguar donde estaba. 

Cuando llegué a su casa, vi que tenía familia. Interrogué a su mujer sin insultos y delicadamente, puesto que le había mentido el terrorista en donde trabajaba, y se pensó que él fue víctima del atentado. La mujer sabía donde estaban las casas del resto de terroristas que participaron, pero no la base de los gatos. 

Me fijé que después de ese suceso, se reforzó mucho la seguridad. 

Fui a visitar a mi amiga, y resultó que se encontraba mejor. La familia estaba afectada, con lo cual, decidí ofrecer mi máximo apoyo para erradicar a la oposición y a las organizaciones terroristas. 

El 12 de Mayo de 2019 fue registrado como el atentado con más victimas mortales en España. El Señor Beagle, envió un mensaje por todos los medios de comunicación, advirtiendo de que Los Gatos iban a salir muy afectados de esto. 

Y el mensaje llevaba razón, los Gatos fueron muy afectados, y todas las familias de estas personas entraban en crisis, porque el gobierno decidió arruinar a la oposición. Los Escarabajos, al salir beneficiados con el IEL decidieron intentar unirse otra vez al Ejército, pero fueron rechazados, y los miembros de la oposición eran humillados diariamente por la televisión, los anuncios... Por ejemplo, uno de los anuncios que había decía: "¡Los Gatos son incultos! ¡Ven a la Escuela Privada ---- para formarte y no acabar siendo un Gato!", es decir, todos los humillaban, incluso los anuncios de plantillas del zapato, o incluso las peluquerías. Eran muy rebuscados para encontrar algo con lo que humillar a Los Gatos. Toda esta humillación será el producto de una masacre más, estoy seguro.

 El Señor Beagle emitía muchas advertencias contra ellos de que podía empezar el IEL a masacrarlos, como una advertencia de que en cualquier momento pueden atacar y acabar con toda la oposición. La alarma de guerra estaba siempre activa, a causa de ello, yo me mantenía siempre en el cuartel, para subirse a un bombardero si hace falta. Era muy posible un Golpe de Estado. 

Siempre llevaba mi arma, y nunca la dejaba en el cuartel. El Señor Beagle permitía a los soldados en este momento llevar sus armas a casa, ya que cualquier gato podría atacar en cualquier momento.