¿Les digo algo? Si alguna vez nececitan ayuda con la literatura inglesa, busquen ayuda con Harry Styles.
Debido a la exelencia de "mi" trabajo, que realmente hizo Harry saqué 8.
Llegué corriendo de el colegio a mi casa, Harry y papá conversaban en el jardín, seguro era día libre de mi papá porque los dos estaban en short en los camastros al lado de la alberca tomando el sol.
No me importo el hecho de que estubiera papá presente, me lanzé sobre Harry, quedamos en una pocicion algo extraña, es decir, mi rodilla estaba en su amigito, nuestros rostros a centimetros.
Aún así sonreí.
—Saqué un ocho.
Su rostro estaba rojo, se veía nervioso. Como no, si su amigito estaba poniendose feliz, dios mio, que hormonas.
—Felicidades. —medio sonrió.
—Gracias. —escondí mi rostro en su cuello.
—_____ estas incomodando a Harry. —dijó mi papá.
—¿Y?
Sabía que no me bajaría de él hasta que me aburriera, así que dejó ese tema.
—¿En que sacaste 8?
—Literatura Inglesa.
Los ojos de mi papá casi salen de su lugar.
—Siempre sacas 5 o 6.
—Harry me ayudó con un trabajo y gracias a eso Flanagan me pusó 8.
—¡Eso sin duda hay que celebrarlo! ¡Sonia!
La empleada llegó corriendo. Estúpidas lambisconas.
—Digame señor Tomlinson.
—Avisale a mis hijos y a mi esposa que se arreglen, iremos a comer.
—Si señor. —la mujer desapareció.
—Bueno, vayan a arreglarse, hay que festejar el primer 8 de mi princesa. —besó mi mejilla y se fué.
—¿Primer ocho?
alzé la mirada, nuestros rostros estaban a cm, no se cuando fue que Harry empezó a rodear mi cintura con su brazo.
Su amigito seguía feliz , pero creo que ahora que papá se había ido tenía más confianza.
—No siempre el mejor amigo de tu papá te hace la tarea.
Harry rió.
—Creo que debes ir a arreglarte.
—Me gusta más estar aquí con usted.
Harry se sonrojo. Patetico.
—Tu papá puede malinterpretar esto.
—Al cuerno mi papá.
Me acerqué a él lentamente, cuando estaba a tan solo un centimetro de sus labios el cerro los ojos, besé su mejilla rápidamente y corrí al interior de la casa.
No vi su reaccion, pero de imaginarmela me daban ganas de reir.
Me pusé una blusa de encaje blanco, un short estampado y tacones negros, simplemente me recogí el cabello
Mamá y mi hermana portaban vestidos de colores pasteles y recojidos perfectos, ese sinceramente no era mi estilo.
Al principio me decían cosas, luego se resignaron a que no iba cambiar.
Papá condujo hasta un restaurant muy fino , realmente a mi no me gustaba,pero a ellos realmente no les importaba mi opinión.
La comida no fue muy interesante, papá y Harry hablaban de negocios, mamá y Catherine de moda, mi hermano se mensajeaba con quien sabe quien y yo simplemente los observaba a todos.
Agradecí cuando Tomlinson pidió la cuenta y nos devolvimos a casa.
Ya era de noche cuando llegamos, me metí a mi habitacion, me pusé la pijama cuando estaba por dormir alguien llamó a mi puerta.
Era Mattew.
—Hola Matt. —sonreí contenta.
Adoraba a mi hermano, era realmente bueno hablar con el.
—Hola chiquita.
Siempre me había llamado así, literalmente.
—¿Qué sucede?
—Bueno, es que tu eres una chica y...
—¿Quién te gusta? —suspiré.
Mi hermano había salido con una chica en sus 16 años. Su nombre era Patricia y era un verdadero dolor de cabeza, sin contar que le pusó el cuerno a mi hermano.
—Se llama Polly. —se rascó la cabeza.
—Ajá, continua.
—Ella es realmente diferente. —rió enamorado.
—¿Diferente en que sentido?
—No es la tipica chica obcecionada con la moda y el fisico, es más como tú, por eso te pidó ayuda a ti.
—¿Cómo yo? —fruncí el ceño.
—Ama el skate, las fiestas, odia a las huecas, es grosera, alocada, tu entiendes, prefiere los tenis sobre los tacones, las gorras sobre las diademas... Como tú.
Finalmente mi hermano se había conseguido a una chica bien.
—Bueno. —sonreí. —No seas empalagoso, odiamos a los chicos así, se coqueto, exitante ¿Sabes a lo que me refiero no? —el asintió. —Comprale cosas, hablale sobre skate, sorprendela, ya sabes, pasa por ella sin previo avizó, llevala a lugares.
—Creí que a las chicas les gustaban los hombres romanticos.
—A las chicas normales si.
Matt rió.
—Gracias hermanita. —se asercó a mi y me abrazo.
—De nada. —sonreí.
—¿Y tú?
—¿Yo?
—¿Cómo vas con el amor?
—El amor es una estupidez Matt, sin ofender.
—¿Segura?
—Si ¿por?
—Por como mirabas a Styles ¿te gusta no?