Chapter 24

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Mire de forma detenida el techo, mis pies dolían como nunca y mi cabeza aun peor, me levante con cuidado y tape nuevamente el cuerpo de gema, cogí mi celular y Salí de la habitación para ir a la sala, que para sorpresa mia, se encontraba un sonriente Harry cocinando

-como esta esa resaca, preciosa- le saque la lengua y me serví una taza de café, con la cafetera

-buenos días- encendí mi móvil y gruñí al ver que solo eran las nueve y media- que haces despierto tan temprano, demonios

-Taylor ha venido a dejarte ropa, dijo que probablemente querrías pasar a ver a lauren antes de irte a áfrica- dijo apuntando al sillón, negué con una sonrisa, nunca cambiaras tay- por cuanto tiempo te vas

-solo iba a ser un mes, pero tuve un problema así que me quedare hasta que terminen el hospital- tome una tostada y le di un mordisco- yo creo que serán dos o tres meses, mis trabajadores son rápidos y hacen muy bien su trabajo

-no lo dudo, digo, no todos los días trabajas para Camila cabello- me termine de beber mi café y lo deje en el lavabo- solo quiero que estés aquí para que pasemos tu cumpleaños juntos

-eres un idiota y claro que estare aqui- solté saliendo de la cocina

-igual me amas- le mostré el dedo medio y tome el bolso del sillón para irme al baño. Me di una larga ducha, que logro relajar cada uno de mis músculos, me mire en el espejo y amarre mi cabello en una cola alta, tome el bolso y rápidamente Salí

-ya es hora de que me vaya- Harry se acercó a mí y me abrazo por los hombros

-mucha suerte cariño, y espero que salga bien todo lo que están haciendo- me beso la frente y se alejó- buen viaje

-gracias rulos, me despides de las chicas vale- asintió, tome mi celular y Salí del departamento de los chicos, tengo que pedirle disculpas por lo que paso ayer, mire el anillo y sonreí, ella quería protegerme para que no me hicieran daño, es imposible no amarla. Cruce el lobby y Salí encontrándome con un sonriente Taylor- me puedes decir que haces aquí y no estás en tu casa recuperándote de una resaca- me quito el bolso y nos dimos un abrazo

-nunca te dejaría, lo sabes- asentí- feliz navidad mila

-feliz navidad tay- bese su mejilla y me separe de él, con una sonrisa abrió mi puerta- tienes que ir por tu obsequio he- nos subimos al coche y emprendió camino al departamento de lauren. Luego de un par de minutos de camino, por fin estábamos afuera del departamento de lauren

-debes de apurarte, ya son las diez con quince- asentí, me baje del coche y corrí dentro para comenzar a subir los tres escalones, cuando llegue a la puerta, golpee una, dos, tres veces y nada, la llave, me pare en las puntas y saque la llave, entre y enseguida mi ceño se frunció, ese olor, no es de lauren, deje la llave sobre la mesa y fui a la cocina, nada, camine a la habitación y empuje lentamente la puerta quedando sin respiración cuando vi la escenita que había frente a mis ojos, lauren con un brazo sobre su abdomen desnudo y un brazo cayendo por la cama, y al otro lado una chica de cabello castaño en melena de espaldas hacia mí, tapada hasta la cintura, y yo de estúpida viniendo aquí para pedirle perdón, entre al baño, llene el vaso que tenía lauren en el baño con agua y Salí nuevamente, me acerque un poco a ella y le lance el agua haciendo que se levantara de golpe

-así que esto era lo que ocurría, por eso me has dejado tirada- rugí apuntando a la chica, aguantándome las lágrimas que se habían acumulado en mis ojos, de la rabia, esta se voltio y salió de un salto de la cama, quedando únicamente en bóxer

-camz no tengo nada que ver co..- me di media vuelta y camine rápidamente a la puerta, pero antes de tomarla fui agarrada por ella- camz, créeme por favor, yo no me he acostado con ella, no sé ni cómo llego ahí

Dama de Compañia; Carmen (en Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora