- ¡Mierda! ¡La sesión de fotos! - Me levanté de la cama y cogí ropa de mi maleta. Una camiseta y unos jeans largos.
- Abraham ¿Puedes llevarme a la sesión? Por favor.
- ¡Ah! ¡Primero me pegas, y luego me pides ayuda! - Se hizo el ofendido.
Me subí a la cama y me acerqué a él.
- Por favor...
Él se quedó mirándome con la cara roja.
* Surtió efecto... Nadie se te resiste, Sara... je...je... JA...JAAAAA*
Acomodó mi pelo detrás de mi oreja.
- Eres... tan hermosa...
Me quedé mirándole y me puse roja. Bajé rápido de la cama y me di la vuelta.
- ¿Me llevas o no? - Dije fría. - Bah, déjalo. Me voy yo sola.
Abraham se encogió de hombros y se volvió a dormir.
Será idiota.
Cuando llegué a la sesión de fotos, estaban ahí Scarlet y Daian.
- Hola chicas. - Dije y las abracé.
- Sara, perdona por lo de ayer - Dijo y yo le dije que no pasaba nada.
- ¿Dónde vives ahora? - Preguntó Scarlet.
- ... Con Abraham Mateo - Dije con vergüenza.
- Pero si no le soportas - Soltó Dayan.
- Ya, pero no tengo otra casa. Ser bailarina y modelo no da para tanto - Dije.
- Pues a mí me parece que te estás aprovechando de él - Escuché la voz de Marian por detrás.
- ¿Qué? - Respondí confusa.
- Le has tratado fatal, y ahora que le necesitas, acudes a su casa. Eso se llama interés. Y está muy mal. - Se cruzó de brazos.
- Tienes razón, pero... - Dije sin saber que decir.
- Chicas, rápido, id a maquillaje - Dijo Ariana. - Menos tú, Sara. Quédate un minuto.
Las chicas asistieron y nos dejaron solas.
- Sara, dime que no estás viviendo con Abraham. - Dijo.
- ¡Qué rápido se entera la gente de las cosas! - Dije llevando los brazos al cielo.
- Madre mía... No, no... - Se llevó una mano a la cara. - Mira, te diré lo que vamos a hacer. Vas a coger tus maletas y te vas a ir pitando de allí, antes de que se entere Jacobo.
- ¿Por qué? La casa es de Abraham. - Dije sin entender.
- Escucha, Abraham no puede tener novia, ¿entiendes? - Yo rodé los ojos.
- No es, ni quiero que sea mi novio. Nunca.
- Vale, pero ¿entiendes qué pasaría si alguna fan te viera con él? - Preguntó con los brazos cruzados. - Está casa no está protegida como las de la gira.
- Pues no se qué pasaría, ¿no puede tener amigas? - Dije - No es que yo sea su amiga.
- Dame igual, tienes que irte de ahí o Jacobo cancelará el contrato.
- ¡Pues que lo rompa! - Me fui enfadada a maquillaje.
La sesión era de ropa de boda. Me pusieron un vestido y los labios rojos. Y fuimos al centro de la ciudad a hacer las fotos.
- ¡Perfecta! DIOS, la de rojo, esa cara es PERFECTA - Decía el fotógrafo mientras me hacía las fotos. - Ahora mira hacia un lado, así
Miré hacia mi derecha y ahí estaba Abraham, mirándome. Me hizo este gesto 👍
para que no me preocupara.La gente curiosa se arremolinaba a nuestro alrededor, mirándome. Hasta que alguien gritó: ¡ES ABRAHAM MATEO!
Todos le miraron y se le echaron encima.
*Te lo mereces* Pensé.
- ¿Qué estás diciendo? - Dije enseguida, y fui a ayudarle.
- ¡Dejadle! - Grité. Pero todos gritaban, nadie me escuchaba.
No me queda otra...
Me quite el vestido, quedando en sujetador y me pasee por ahí. Todos los hombres se fijaron en mi y me fui corriendo. Eso los entretuvo y Abraham pudo salir del círculo de personas.
Fui hasta una cafetería, dónde me puse el vestido de nuevo.
Me llegó un WhatsApp de Abraham.
Ab - Te he visto desnuda
Yo - Eres subnormal o qué. Por cierto, de nada.
Y esa es la razón por la que no le soportaba.
Ab - Gracias.
Ab - Vamos a casa
Yo - Vale
Fui hasta casa; la sesión de fotos se había cancelado.
Al entrar en casa observé a Abraham en calzoncillos, mirándome con esta cara 😏😏😏😏😏
- QUÉ - Dije.
- Está es tu recompensa... - Subió los brazos a su nuca.
...
- ¡AHHHHHHHHH! SÓLO ERA UNA BROMA ¡AHHHHHHHHH! - Gritó Abraham mientras golpeaba su estómago.
Paré tras unos golpes más, roja.
- Eso te pasa por ser tan idiota.
- Creo que me has roto una costilla... - Dijo y yo me giré para mirarle.
- Lo dices para que te revise.
- Me has pillado ah - Dijo encogiendose de hombros - No tienes apenas fuerza
Dijo pasando por mi lado.