Salí de la habitación hecha una furia en cuanto había visto mi reflejo en el espejo. Dwight me paro en medio de mi camino, lo miré con duda y enojo.
—Hey... ¿te encuentras bien? —Arqueé una ceja.
— ¿En serio Dwight?
—Tienes cara de enojo.
—Será por esto —Señalé mi cabello que ahora se encontraba verde.
Dwight carraspeó para evitar reír, solté un suspiro frustrado y le lance un golpe.
— ¡Hey! —Se quejó.
—No-te-burles.
— ¿Quién te hizo esto? —Señalo mi cabello.
—Negan.
—Está en su cuarto —Sonreí.
—Gracias Dwight.
Seguí mi camino hacía la habitación de Negan. Toque la puerta y un par de segundos después él apareció con una sonrisa que se borró apenas me vio.
— ¡Yo no fui! —Trato de cerrar la puerta pero fui más rápida y lo empuje.
— ¿Y crees que te voy a creer idiota? —Lo golpeé y él se quejó.
—Pegas como un hombre.
— ¿Sí? —Lo volví a golpear.
—No pensé que te quedaría así. Cabe destacar que te ves preciosa.
—Por idiota no tendrás sexo por una semana.
— ¡¿Qué?! No, eso sí que no —Se acercó de manera amenazante.
— ¡Claro que sí!
— ¡Vamos ________! Sólo fue una pequeña broma.
— ¿Pequeña? ¡¿Pequeña?! Teñiste mi cabello de verde Negan.
—Si, tal vez no sea tan pequeña —Sonrió.
Rodé los ojos y bufé.
—Ya no tengo ganas de hablar.
Me comencé a alejar para poder salir de la habitación pero una mano alrededor de mi muñeca me lo prohibió.
—Cariño, de verdad lo siento —Murmuro y paso una mano por mi cintura.
—Ya Negan, ya no importa —Sonreí levemente.
— ¿Aun así me dejaras sin sexo? —Rodé los ojos y reí.
—Aun así.
—Hablando en serio, realmente lo siento preciosa.
—Está bien Negan.
—Yo... eh —Carraspeó—, te amo ¿lo sabes verdad?
Abrí los ojos por el asombro.
— ¿Acaso acabo de oír que Negan me dijo te amo? —Reí levemente. Negan rodó los ojos.
—Sí, lo dije.
—Yo también te amo — Respondí. Él sonrió y luego de acerco para dejar un beso en mis labios.
—Vuelvo a repetir, realmente lo siento.
Reí mientras lo abrazaba.
—De todas maneras no me venía mal un cambio.