¿Solo Un Juego? (Boys Love)

Capítulo 36: Acto Consumado

La noche era simplemente perfecta. El cielo oscuro iluminado por la luna en cuarto menguante y escarchado por millones de estrellas plateadas, el silencio absoluto a pesar de sólo ser medianoche, ningún alma en las calles aparte de nosotros. Pero creo que lo mas hermoso fue que, entre todo ese silencio, sólo escuché la hermosa risa de mi rubio, y sólo sentí el calor de su mano con la mía, con nuestras manos juntas y entrelazadas. No podía dejar de verlo. Todo era... simplemente perfecto.

—Jajajajaja. Christian, no puedo creer lo que hiciste

—Solo canto para ti. No quiero que otra persona lo escuche algo que sólo es de nosotros

—¿Pero usar el escenario para atraerme y luego mandar a todos  diablo para llevarme corriendo de allí? ¿En serio?

—¡N-No se me ocurrió nada mejor!  —dije, con el rostro sonrojado a más no poder. Creo que evitar hacer el ridículo sólo hizo que quedara más ridículo.

Bien hecho, Christian. Bien. Hecho.

En eso sentí un cálido roce que despertó de mi ensoñación. Conocía esa sensación. Eran los labios de Daiki. Daiki... me estaba besando.

—Fue adorable... gracias —dijo, haciendo un rostro tan adorable que hacía que todo mi cuerpo se crispe. Desvíe la mirada, reforzando el agarre de nuestras manos

—Si sigues así... no creo que me pueda seguir conteniendo.

Desvíe la mirada. En verdad... no podíamos hacerlo, y eso era lo que más me dolía. Porque no era sólo mío. Porque fui un cobarde y otro tomó mi lugar. Porque no fui capaz... de proteger a quien amo.

De repente siento unos delicados dedos tomar mi barbilla, y al segundo siguiente, unos cálidos labios sobre los míos, iniciando un beso que no contenía ningún rastro de malicia, transmitiendo sentimientos que era imposible explicar con palabras. Un beso que sólo podía ser repetido entre nosotros, porque eran emociones tan contrarias desde el amor puro de unos niños hasta el deseo y amor pasional de nuestros cuerpos jóvenes.

—Daiki... —susurré su nombre con voz ronca mientras abría los ojos para verle mejor. Sus ojos esmeralda eran iluminados por la luz de la luna, haciendo mas notorio un brillo inusual en estos

—Ai...shiteru —me dijo, antes de volver a juntar nuestros labios para repetir ese acto. Correspondí el beso con deseo pasional y desenfrenado, bajando mis manos hasta su cintura y acariciando sus partes débiles, haciendo que suelte un gemido bajito.

—Dai...

—Cántame

—¿Huh?

—D-Dijiste que... cantar es algo sólo nuestro, que sólo lo haces para mí —me mira a los ojos— Si en verdad es así... quiero que cantes la canción que usaste para atraerme hacia el escenario.

Trague saliva y lo pensé un momento, para luego tomar una gran bocanada de aire

—Solo si me dejas besarte un poco más...

—Está bien —dijo con una sonrisa
Sonreí y me acerqué lentamente a él, pegando más su cuerpo al mío mientras daba besos en su cuello

—"Saisho kara kimi o suki de irarete yokatta" nante ("Me alegro haberte amado desde el principio")
Sora ni utaunda (Esas palabras yo gritaré al cielo)