Ilegal |Joerick| |EN EDICIÓN|

Aceptó.

Cuándo el taxi se detiene a las afueras de mi casa, vuelvo a bajar y entro, y lo primero que veo es a mi madre.

-Necesito pagar el taxi- fue lo único que dije.

Mi madre toma su bolso y de su cartera me da 40 dólares, los tomó y regreso con el chófer, le doy el dinero y las gracias, vuelvo a la casa y mi madre no espera a empezar a reclamar.

-¿¡Donde estabas!?- pregunta alterada.

Mamá, por favor, no más, estoy fatal emocional.

-Perdón por todo mamá- me disculpe sinceramente.

Ella me miro.

-Mañana vendrá el abogado para ir a poner la denuncia, no creas que esto se va a quedar así- me recordó.- Vete a tu cuarto.

Baje la mirada y subí hasta mi habitación, me encerré y me acosté, tire al suelo la mochila y las últimas galletas que me quedaron del paquete.

-¿Por que caí en tu juego Erick? ¿por que me tuve que enamorar de ti?- me pregunté a mi mismo.

Cerré mis ojos y casi en instantes me quede dormido.

*
-¡Deje que lo vea maldición!- escuche una voz entre mis sueños.

-¡Largo de aquí, si no llamaré a la policía!- ahora la voz era de mi madre.

Después todo quedo en silencio, pero a los segundos se escucho un golpe y los gritos de mi mamá.

Adormilado me levanté de mi cama y camine a paso lento a la puerta, pero antes de que llegará, esta es abierta y por ella entra Erick.

-...Joel...- mi nombre suena como una gloria para mí.

Tallo mis ojos con las manos y lo miro mejor.

-¿Que hace aquí? ¿No cree que es suficiente profesor?- pregunté agarrando valor.

Mi madre entra e intenta sacar a Erick de mi cuarto.

-Largo de mi casa y deje a mi hijo en paz, maldito pedófilo- gruño mi mamá.

Pero Erick no me dejaba de mirar y al parecer las palabras de mi madre no las llevaría a cabo.

-¿Me amas?- si, te amo.

-¿Cree usted eso?- le respondo con una pregunta.

Mi madre nos mira a los dos, sin entender nada.

-¿Para que me fuiste a buscar?

Dile la verdad.

-Para darme cuenta de que estúpido hombre me enamoré.

Mi madre me mira y se pone detrás de mi, sabe que esto me esta doliendo, después de todo, ella no me dejará en esto.

Erick sonríe y ladea un poco la cabeza.

-Pues que pena, por que yo nunca me hubiera enamorado de ti- y juro, que sentí, como el corazón se me rompió.

***************

Fin