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Los reporteros llegan a ser en verdad molestos en las vidas de ciertas chicas.

La última vez, una de las chicas con las que trabajó mi mamá se suicidó porque un reportero había dicho que ella salía con un señor muchísimo más mayor que ella. La acosaron de interesada y le dijeron palabras que alguien como ella no merecía oír. Era falso.

Ahora habían dicho que yo tenía un nuevo novio sólo porque me habían visto en una heladería con un joven de "aproximadamente 28" que de hecho era el hijo de un amigo de mi madre. Él es gay y tiene novio.

Ruedo mis celestes ojos y suelto el periódico con brusquedad sobre una mesa con cristal de madera. ¿A ellos qué les importa?

Suspiro pesadamente y miro hacia la simple pared blanca frente a mis ojos. Pared que sería simple si mamá no hubiera insistido en que pusiera mis títulos ahí, incluyendo en estos el título de cuando gané un Miss Universe.

Me levanto del sillón gris y camino hasta la pared. Me esforcé tanto por ese título que en verdad lo aprecio mucho más que los demás.

Odio la forma en que las modelos salen a la pasarela. Allí afuera son como robots con vidas mandadas a hacer, con caras mandadas a hacer, sin sonrisas. Rostros sin vida. Cuerpos sin vida.

Es como si les hubieran lavado el cerebro, como si les ordenan qué hacer, aunque no se aleja mucho de la realidad.

Pero allí fue diferente. Allí todas esas chicas contaban con hermosos rostros, hermosos cuerpos, eran ellas mismas. ¿No se esforzaron? Lo hicieron, pero en ningún momento alguna de ellas dudaron en salir a la pasarela con sus hermosos y exóticos trajes llevando como mejor adorno una sonrisa. Yo, por supuesto, no dudé en ser como ellas.

—¡Lara! ¿Dónde estás? —escucho los pasos apresurados de mi madre que seguro acaba de ver el artículo que habla de mí.

Seguro quiere arreglar las cosas con la prensa. Bueno, tampoco es como que sea un rumor que me haga daño, pero puede afectar la popularidad que luego de tantos años he tenido.

—¡Lara!—

Mamá me mira con su semblante serio, yo le sostengo la mirada por un momento pero no tardo en quitarla rápidamente.

—No creo que me afecte— me veo interrumpida por la voz de mi madre que tiene mucha preocupación en ella.

—Oh, no, no 'creas' simplemente. Te conseguí una pareja falsa. Sólo será por un tiempo, sabes que es por tu—

—¡Madre! —mis ojos se aben considerablemente— ¿Qué la lleva a usted a tomar decisiones por mí? ¡Ya no soy una niña, deja de controlar mi vida!

Mi voz salió con ira. Odiaba que hiciera con mi vida lo que quisiera. No era alguien fanática de que me manipularan. Suficiente tenía con intentar complacerla.

—¡No me levante la voz, jovencita! Aún soy tu madre y soy la que decide lo mejor para ti. Vine a informante sobre algo, no a pedirte tú opinión.

—Madre...

—Nada de madre. Mañana a la 1:30 te espero en el centro comercial. Allí te presentaré el chico con el que saldrás durante un tiempo. Es lo mejor para los dos.

Pero no es lo que yo quería.

Es lo que ella quería, y, nuevamente, hizo lo que quiso conmigo, al igual que cuando era una niña.

Pero yo ya no era una niña y había aprendido a vivir sola. Y ella lo tendría que aprender.

#SoyLaÚnicaAutoraQuePublicaAEstaHora.

#TambiénLaÚnicaQueUsaHashtag.

#YPorSupuestoLaÚnicaQueEsTanIncumplida.

Puede que , peeero, recuerden que los amo ❤😂

Bien, ahora me iré a dormir porque estoy re-mamada. Tuve un día un poco pesado.

Los saluda y ama desde Colombia una agotada, Sara.

*Yukiko1421*

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⏰ Last updated: Apr 05, 2018 ⏰

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Cuerpos PerfectosWhere stories live. Discover now