Un gran año

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Bill y Anna llegaron tomados de las manos y casualmente a los primeros que se encontraron fueron a Ron a Hermione y a Harry.
-¡Ey! Ustedes dos... ¿están saliendo?- pregunto Ron con cara de felicidad.
Anna se quedó callada porque la verdad no tenía idea de la respuesta.
-Si, espero que no te moleste Harry- respondió Bill.
Anna estaba roja pues la verdad  salía con alguien sin que le hubieran preguntado, no es que no quisiera, obvio que quería pero no se lo esperaba.
-Cuídala bien Bill- exclamo Harry como un hermano que cuida a su hermana.
-Entonces... Fleur no es más...- empezó Ron.
-No, no lo es-. termino Bill.
Ron no pudo contenerse a celebrarlo, pues la verdad odiaba la pareja de Bill con Fleur.
Estaban todos sentados en las mesas de sus respectivas casas, Anna y Bill en las mesas de los profesores, y Dumbledore empezó a hablar:
-Bueno... como verán, hoy entregaremos la copa de las casas, y me gusta esta decoración verde, le da un poco de vida al lugar- dijo Dumbledore- pero... creo que la decoración tendría que ser otra-.
Los de la mesa de Slytherin miraban con odio hacia la mesa de los profesores, al igual que el profesor Snape.
-Le doy... 50 puntos a Hermione Granger, por su astucia y valor- dijo Dumbledore.
Toda la mesa de Gryffindor incluidos Anna y Bill empezaron a festejar y a gritar el nombre de Hermione.
-Si,si,si... también, 50 puntos para Ron Weasley, por el mejor juego de ajedrez visto en muchos años- prosiguió.
Bill estaba muy orgulloso y la mesa de Gryffindor volvió a partir en aplausos.
-También... 60 puntos, para Harry Potter, por su valentía y fuerza en frente de una situación extrema- dijo.
Anna estaba casi llorando de la felicidad, la mesa de Gryffindor no dejaba de partirse en aplausos.
-¡Los mismos puntos que Slytherin!- le dijo Bill a Anna.
-Y por último... 10 puntos para Neville Longbottom, porque se necesita valentía para enfrentarse ante sus enemigos pero aún más para enfrentarse a tus amigos- terminó Dumbledore.
Anna estaba feliz por Neville, sabía sobre el destino de los padres de Neville, ella los había ido a visitar de vez en cuando.
La decoración de la sala cambió instaneamente  de los colores de Slytherin a los de Gryffindor.
-Antes de entregar la copa quiero comentarles otra cosa- frenó el griterío Dumbledore- dadas las circunstancias, para el año que viene, el profesor Quirrel no podrá enseñarles Defensa contra las Artes Oscuras... así que...-
Anna no entendía nada pues pensó que le darían el puesto a Snape.
-Anna Potter, ¿Te gustaría ser la profesora de defensa contra las artes oscuras los próximos años de la escuela de Hogwarts?-
Anna estaba realmente sorprendida y mientras ella estaba en shock los de las mesas de Gryffindor, Hufflepuff y Ravenclaw gritaban a coro "que lo acepte" "que lo acepte".
Anna finalmente aceptó y estaba relamente contenta.
-Ven, di algo- le dijo Dumbledore.
Cuando se paró para dirigirse a decir algunas palabras de freno y no pudo evitar mirar a Snape.
-Será otra vez Severus- lo miró a Snape con una sonrisa pícara, este no pudo evitar soltar una risa, lo cual fue sorprendente para varios alumnos ya que estaban acostumbrado a verlo malhumorado y gruñón todas las clases.
-Bueno...-empezó Anna- no se que decir... muchísimas gracias por esta oportunidad y de verdad espero podes ser una buena profesora que los ayude en el camino fuera de Hogwarts y gracias Dumbledore y a todos los profesores por apoyarme en todo esto-.
Anna recibió muchos aplausos incluidas de todas las mesas menos una.
¿Cuál podría ser?
Al terminar esa noche mágica, Anna se fue a su habitación y se sentó un rato en el espejo, se sentía bien ver a sus padres.Luego de mirar el espejo por un rato de fue a dormir, mañana les esperaba el viaje de regreso.
A la mañana siguiente, Anna se despertó temprano para preparar sus cosas y bajar rápido a desayunar, para poder despedirse de Hagrid.
Cuando estaba hablando con Hagrid se dio cuenta que era tarde así que se despidió de él con un fuerte abrazo y salió corriendo hacia la estación.
Hermione,Ron y Harry estaba a punto de abordar el tren cuando vieron a Anna, y la esperaron.
Ya dentro del tren Anna les empezó a contar muchas de sus anécdotas hasta que todos se quedaron dormidos y cuando Harry despertó, estaba en su cama, en su casa.
Fue un gran primer año para Harry, y un gran recuerdo para Anna.

Anna Potter, la hermana de Harry PotterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora