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Capítulo 10

El policía hizo como que llamó a las ambulancias que el Señor White pidió. Una mentira que se iba a notar, pero como escusa diría que no se atrevieron a venir en el lugar más peligroso, y con eso White entendería. Posiblemente, mande a llamar a su científico para que cure a algunos, pero no todos se salvaran. Una ganancia.

El policía es así por lo que le pasó hace años, en aquel huracán con esa anormalidad.

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Un policía, en medio de un tiroteo, ve como su amigo muere a manos de un criminal, un villano.

― ¡No escaparas! ―grita el villano.

El villano lo araña con sus garras, una y otra vez, y cada vez que lo hacia sus garras crecían más.

― ¡Carlos! ―grito el policía.

El policía no podía pararse por sus heridas, y aunque lo lograra, el viento del huracán le impediría caminar. Las últimas noticias decían que el huracán tiene una anormalidad, algo nuevo para los científicos: Subió rápidamente a la categoría diez. Este cambio tomó por sorpresa a todos, principalmente a quienes estaban en la persecución de la banda de criminales de la noche anterior.

En este clima, solamente pueden andar los seres de sobre fuerza humana.

Cuando el villano terminó de arañar al policía Carlos, simplemente reía y miraba a su alrededor, nota al otro policía. Carlos presentaba heridas mortales, los arañazos le atravesaban el cuerpo, lo cual hizo que su muerte se volviera lenta y extremadamente dolorosa.

―Carlos... ―dice el policía de manera desanimada al ver el inevitable fin de su Compañero.

No ve que el villano se le acerca, no ve que el villano prepara sus garras para él, no ve que el villano lo tiene como nuevo objetivo.

No puede correr, no puede moverse, no puede ni siquiera levantarse porque el viento se lo lleva corriendo. Todo terminó.

― ¿Triste? Que mal ―empieza hablar el villano―. Quería ver tu cara de miedo no de tristeza.

De esa persecución, solo quedaron diez policías de los doscientos que participaban. Carlos murió intentando comunicarse con White, pero éste estuvo todo ese día en el cementerio, con viento en contra. Un héroe inservible.

―White te matará.

―Ese tonto, sigue llorando la muerte de su gatita.

― ¿Cómo lo sabes?

― ¿Por qué crees que salgo a la calle tan libremente? Claro, además que me pagaron para proteger a todos los criminales de la emboscada de anoche.

Agarra al policía de la cabeza y le aprieta un poco.

― ¿Sabes que es lo peor? ―dice con voz malvada.

― ¿Qué es lo peor? ―dice con voz débil.

―Que solo me pagaron para matar a los policías que planearon el ataque.

― ¿Qué?

―Te lo explico ya que vas a morir. Los policías sobornaron para que otros criminales tuvieran una falsa reunión y así crear una emboscada. Como puedes deducir no había reunión alguna de criminales y tú no eres uno de esos que lo planeo, pero el que está a tras de ti, sí.

― ¡¿Qué?! ―dice sorprendido el policía.

―Ustedes los policías, están tan opacados por los héroes.

Al terminar ese comentario, empieza a caminar hacia otro oficial y sin soltar al que tenía en mano. Cuando llega al otro oficial, el villano nota que tiene heridas de balas.