Enamorada de un Extranjero.

Cap 1

— Come, es para ti—  Digo con ternura en mi voz, le sonrió , estaba realmente feliz de su regreso, el hace lo mismo, un tanto nervioso aun por verme. Yo también estaba estaba así, ya había ocurrido tanto tiempo desde la ultima vez que lo vi que fue como verlo por primera vez.

¡No podía dejar de mirarlo y de sonreír!  Supongo que es el efecto de pasar tanto tiempo entre llamadas, horas sin dormir por los cambios de horarios y momentos donde queríamos vernos pero estábamos tan lejos que se nos era imposible. Pero ahora estaba aquí , yo aun no podía creerlo.

— Guao! Este pollo al horno esta exquisito! — me sonrojo y el sonríe mientras sigue hablandome sobre su vuelo. 

Decidí hacer un pollo especial para el, por eso era a la naranja, se veía jugoso y le había puesto las naranjas encima por todo el alrededor. Amaba que mis platos se vieran hermosos, aunque no era chef, me gustaba darle un toque especial para las personas que lo recibían.  

 El con su ropa formal y tan precioso, quería que lo viera más formal y así causarme impresión lo cual lo logro, no dejaba de detallar cada parte de su cuerpo, como la primera vez, aunque ahora con menos pena, pues  ya había confianza suficiente. Estábamos comprometidos, sus piel canela, su cabello impecable, liso  y perfecto color negro, que brillaba incluso más que el mio de forma natural, eso a veces me molestaba, ¿Cómo podía ser? ¡No era justo! que su cabello fuera mejor que el mio. Veía sus  manos preciosas mientras cortaba los trozos de comida. 

Estaba idiotizada! pero no, aun no era tanto como cuando me detuve en su cara, sus perfectos ojos achinados, nariz perfilada un poquito redonda en la punta , me recordaba a la mía, y la cantidad de chistes de su familia sobre que nuestra nariz era muy parecida, ni decir de  sus preciosos labios como si se los exfoliara, para mi era increíble que el fuera tan natural, tan color de piel precioso y ademas con tantas cualidades, al menos para mi eran demasiadas.  Quizas  podrían haber más chicos perfectos que el, pero para mi el era todo lo que necesitaba. A mis ojos el era perfecto. A el no le molestaba que lo mirara así, al contrario le encantaba. Yo sentía que no podía parar porque me parecía hasta ireal tenerlo tan cerca de mi que no me lo creía.

 Yo sin embargo debía, usar cremas, y diferentes cosas para poderme ver bien,  bueno aunque era yo la que pensaba así, sobre todo con mi cabellos, el siempre me decía lo contrario, mi cara si me gustaba, no puedo negar que salí bendecida con mi rostro, pues no tenia manchas ni espinillas, excepto  unas cuantas pecas debido a mi color rojo natural de cabello, aunque mi cuerpo también era medio rojizo, si me exponía al sol nunca me quemaba me volvía camarón, como me decían algunos, luego de ir a la playa. Mi ojos muy diferentes a los de el, grandes y grises, mientras lo de el eran pequeños, marrones y tiernos. 

Luego de este almuerzo especial, peor no romántico. Decidimos arreglar finalmente todas las cosas que acababa de traer, yo estaba muy anciosa, el siempre era repleto de sorpresas y eso me asustaba mucho, no sabia que traería y yo en esos casos, era como aquella niña que se emociona por los regalos inesperados de papá, uy! cuanto extrañaba eso... Volví inmediatamente al ahora y lo abraze tan fuerte que no se lo esperaba, es que no podía evitarlo, del abrazo hago que choque un poco con las maletas gris y azul y me tiende también sus manos para sostenerme, comencé a llorar. 

—  Amor no puedo creer que estés aquí, te he extrañado mucho, no quiero que nos separemos más —hablaba entrecortando mis palabras de cada lágrima que salia, quería poder respirar. 

—  Mi amor, eso ya no pasara, te lo prometo. Es hora de estar juntos, he dejado todo, solo por estar contigo. ¿Crees que tres años separados no fue ya suficiente? aquí estoy, y es donde quiero estar—  Lo apreté fuerte cerrando mi cara en su pecho. — Sabes que nunca he roto una promesa, y ahora es nuestro momento. Regrese para estar aquí para ti.

Me llevo cargada al cuarto, donde le había dejado una sorpresa en la pared. La cual pensé que ya había dañado por  la emoción que tenia. Me dejo en la cama y comenzó a ver los detalles.

Muchos post que formaban un corazón gigante, y cada uno decía te amo, algunos den distintos idiomas, pero mayormente en español.

Gracias amor, y volvió a la cama.