UNO DE NOSOTROS

Capítulo VIII

(BULMA)

Al día siguiente no tenía cara para ver a Lapiz, seguro estaría molesto conmigo, y realmente me interesaba, de la cabeza no se me quitaba que Vegeta había planeado todo para que él nos viera, al llegar a mi salón evite verlos directamente ahí estaban los tres en la parte de atrás como siempre, se reían de lo más ameno supongo que entre ellos no habría mayor problema, me senté entre las rubias como ya era costumbre y ambas no se cansaban de molestarme hasta que me levante y les dije a las dos que no toleraría más de sus actitudes infantiles para conmigo era prácticamente todo un reto tolerar la situación y encima que este par estén de insolentes.

Ambas guardaron silencio por unos minutos hasta que la de melena hablo.

-Me agradas tú, que tal sí a la salida hacemos algo –escuche confundida, y aunque no sabía que responder rápidamente asentí con la cabeza- la mañana paso el almuerzo y luego la salida, y como me lo habían dicho ahí estaban Lazuli y Launch una Launch peli azul supongo que habría estornudado en algún momento entre el almuerzo y la salida.

Las tres fuimos caminando hacia la plaza principal, había una feria no sé por qué razón pero ahí estaba, Lazuli nos llevó a su casa que estaba cerca a la plaza al entrar le pregunte cual era el cuarto de su hermano me lo mostro de pasada, nos arreglamos para volver a salir en apenas un par de horas parecíamos amigas inseparables, Lazuli nos prestó ropa muy provocativa nos recogimos el pelo las tres en coletas, llevábamos faldas cortas y una polera que dejaba ver parte de nuestro abdomen, unos zapatos de plataformas y el maquillaje perfecto, antes de salir y después de confesarle que su hermano me gustaba pedí permiso para entrar al cuarto de Lápiz, ella sonrió como dando su autorización, entonces me avente sobre su cama mientras ellas se reían desde la puerta, agarre una de sus almohadas y la aspire aún mantenía el aroma de su perfume, suspire, Lazuli tomo de su mesita de noche una manilla y la puso en la mano donde llevaba la que Vegeta me había obsequiado, me dijo que era mejor que me quite la otra porque todos sabíamos que esas manillas Vegeta las repartía a todas las mujeres que pretendía, entendí que no era un regalo especial así que me la quite y la guarde en el bolsillo, salimos robando la mirada de todos los hombres y no era de menos las tres estábamos hermosas.

Llegamos a la plaza y los vi estaban los tres juntos, 17 vino hacia mi encuentro y me puse nerviosa mientras su hermana me susurraba que yo le gustaba mucho y que no dejaba de hablar de mí, me dio más seguridad.

-Lo has cambiado Bulma ayer estaba celoso, según te vio con Vegeta, lo vi como nunca, pero si a pesar de eso está viniendo a hablarte créeme que le interesas de verdad.

-Te aseguro que es correspondido… -dije mientras una canción pop en ingles empezaba a sonar de pronto los tres estaban acercándose ya no sólo 17.

-¿Quieren Bailar chicas? Pregunto Goku amablemente

-¿Aquí? –pregunto Lazuli nadie más lo hacía.

-¿Por qué no? ¡Vamos a Bailar -me tomo de una mano y empezó a llevarme al son de la música, me olvide de los demás solo veía los ojos de Goku con esa sonrisa tan bella que poseía, gire a ver y Vegeta estaba bailando con Lazuli y Launch con Lapiz, sentí algo de celos, pero preferí disfruta la compañía de Goku.

Rápidamente Vegeta se acercó y le dijo a Goku que quería bailar ahora conmigo, y Goku aceptó de inmediato, ese hombre me desesperaba, baile con el pero casi obligada, el rodeo con una mano mi cintura y la presiono contra el muy fuerte eso me molesto y lo empuje, empezaba a alejarme sentí que me seguia se acerco lo suficiente y me tomo de la mano haciendo que me detenga, volteé para darle una bofetada pero la detuvo con la otra mano, sin embargo no era Vegeta, sino 17.

-Aún no has bailado conmigo y ya piensas irte –me acaricio el rostro me sostuvo de la parte posterior de mi cuello debajo la nuca y se acercó despacio hasta darme un beso, lo rodee con ambas manos y nuevamente sentí mi corazón latir tan fuerte que parecía salir de mi pecho en cualquier instante, se alejó y me tomo de la mano vio la manilla que tomamos de su cuarto y sonrió.

- ¿Te gusta? Es un recuerdo de mi madre pero puedes conservarlo –después de sus palabras observe detrás de él que alguien nos observaba ¡maldición!