Cuando se detuvo, me dejó sentada en un sillón blanco muy elegante, comencé a ver todo detenidamente.
Estaba en la mansión Phantomhive, pero... ¿No se había quemado?
Esto era demasiado confuso.
-Quédese aquí - me entregó mi libro por el cual, ahora estoy cumpliendo una condena en donde sea que estoy - No se mueva, debo hacerle el té de la tarde a mi amo, que, por usted, se atrasó cero coma diez segundos -
Con aquella confesión, se fue a lo que creía era la cocina.
Lentamente y lo más silenciosa, me atreví a pararme y aún con el cuaderno de dibujo en mi poder, me quité los zapatos para hacer menos ruido y corrí hacia las escaleras, las subí rápidamente, cuando llegué hacia la planta superior, lo escuché.
-¡Señorita venga aquí ahora! - tragué en seco -
Corrí y en el momento que vi hacia atrás, me tropecé y los bocetos cayeron al suelo.
Además, para empeorar la situación, enfrente de mí, a un metro o dos, Ciel Phantomhive me miraba algo sorprendido.
-Sebastian, ve a hacer mi té, yo hablaré con ella - miré de nuevo hacia atrás, el mayordomo simplemente asintió y volvió a bajar las escaleras.
-Y-yo... -
- levántate, eres una dama, las damas no se caen, ni tartamudean, ni menos se quedan en el suelo mientras un Conde se le acerca - tragué en seco y me paré justo a tiempo cuando estuvo a unos pocos centímetros, era... Una cabeza más alto que yo - Cómo te llamas- aquello había sonado como una exigencia a mi nombre más bien.
-L-luci Ivanov, s-soy Rusa - se cruzó de brazos -
-No lo pareces - se agachó para mirarme - eres demasiado... Perdona la palabra, tierna para serlo - miré hacia abajo -
-m-me lo dicen mucho, no se preocupe-
Suspiró, se agachó y comenzó a juntar las hojas, lo ayudé, sin embargo, él negó.
-No me gusta que las mujeres hagan muchos esfuerzos - cuando se levantó, arregló las hojas en el cuaderno que sostenía ya de pie - creo que las mujeres están para ser amadas y las que quieren ser algo, se esforzarían con belleza e inteligencia-
-G-gracias -
-¿Por qué tiemblas? -
-Por nada. E-es solo que te he admirado tanto tiempo y resultas aterrador en persona... Y mucho más alto de lo que dicen - sonrió de lado-
-Muy bien, sígueme - me empujó un poco y comenzamos a caminar.
El la última puerta, entramos, era su despacho, cerró la puerta a mis espaldas y se fue a sentar detrás de su gran escritorio, lleno de papeles, las paredes estaban a reventar de hojas con varios proyectos, algunos tenían una equis y otros un tal vez y muy pocos un aprobado.
-Entonces... Siéntate - asentí rápidamente enfrente de él del otro lado del escritorio, extendió la mano- Me gustaría saber - le di el cuaderno - si alguna vez has vendido algo de lo que tienes aquí, y... De dónde salen tus ideas, de igual manera, me ayudarás en mi trabajo, te pagaré bien - comenzó a hojear -
-N-no me importa mucho la paga la verdad, de igual manera he venido... Casi obligada -
-¿casi? -
-Ese casi es para apaciguar la siguiente palabra, lo lamento -
-No lo lamentes, yo le di la orden, pero... Si no quieres trabajar para mí, te dejaré irte - me miró - ¿Quiéres trabajar para mí? - asentí rápidamente - Perfecto - sonrió - iniciaremos mañana a primera hora, le diré a Sebastian que te despierte, y por cierto - me señaló el cuaderno- me gustan los diseños ¿has hecho prototipos? -
-Sí, están en mi habitación, y solo... Solo he vendido uno, luego no tuve tiempo -
-¿Estás en la universidad? -
-tengo 16, pero sí, me adelantaron unos años y ahora estudio Ciencias Económicas y Empresariales, planeaba trabajar para la empresa de Xavier... O algo así - me miró serio -
-Ese es mi rival - tragué en seco -
-¡lo siento pero e-era más fácil entrar allí que en la suya y...
-No importa, al menos te traje a tiempo aquí - frunció el ceño - por cierto - cerró el cuaderno provocando que diese un pequeño salto - Me gustaría que Sebastian te...
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My Little.
RomanceCiel, cansado, propone encontrar a una persona que pueda ayúdalo en el trabajo. Por lo que pide a su mayordomo, Sebastian, que encuentre a una persona en Londres que pueda combatir con sus juguetes. Sebastian terminó eligiendo a una niña de casi l...