Capítulo 10: ¡Volviste!

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Desde la última vez que mamá vino han pasado casi dos meses y medio. Por fin voy a verla de nuevo, quiero tenerle un regalo pero no se que comprarle.

-Papá saldré con Anne porque quiero comprarle algo a mamá.
-¿Necesitas dinero?
-No Papi, no te preocupes tengo ahorros-me acerco a él-Deberías tenerle un regalo también e intentar arreglar las cosas con ella-le dejo un beso en la mejilla y me voy.

De camino al centro comercial me cuestiono sobre la situación de mi familia y me pregunto si mamá volverá a estar con nosotros pronto.
-Hey Nat, llegamos.
-Oh si, lo siento-. La voz de Anne me saca de mis pensamientos.
-Nat te conozco, no mucho, pero si lo suficiente para saber que te pasa algo. Dime, ¿qué tienes?
-Anne, no importa en serio, son cosas tontas.
-Entonces, dime qué cosa tonta es, Porque no soporto verte así, tú sabes que te quiero.
-Yo también te quiero Anne y en serio aprecio tu preocupación pero no es nada del otro mundo y tiene solución. No te preocupes-. Abrazo a mi amiga, no le digo qué me pasa porque considero que no tiene relevancia en este momento y puedo superarlo- vamos por el obsequio para mi mamá.
-Okay-refunfuñando siguió mis pasos.
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-Lo siento Anne, no se que comprarle a mamá.
-No te preocupes, en serio. Podemos ver que comprar.

-Buenos días, ¿Cómo puedo ayudarles?- preguntó muy alegre la señorita del almacén.
-Buenos días, mi madre viene de visita y quería tenerle un obsequio, él problema es que no se qué comprar.
-No te preocupes, sigueme.-La seguimos hasta un pasillo rosa lleno de muchas cosas bonitas.
-Muchas personas vienen con él mismo problema y no saben que regalar. Así qué en éste pasillo estoy segura que puedes encontrar algo para ella.
-Muchas gracias-le doy las gracias y luego la veo alejarse.

-Anne, ven por favor.
-Naty, tu conoces a tu mamá, sabes que le gustaría, yo no-. Me detengo a pensar en esa frase y me cuestiono si realmente conozco a mi mamá, pero la verdad es que de un tiempo acá ya no es la misma.
-Lo sé Anne, pero quiero algo que sea perfecto.
-¡Tengo una idea!-. Anne me mira con una expresión de alegría qué no puede ocultar.
-Te escucho (...)
-Que te parece si le das un afiche y le compras eso, con eso-Anne me señaló un frasco de vidrio lleno de dulces y mensajitos. La otra cosa que señaló fue un busito azul con rosado que me pareció muy lindo.
-Eres una genio.
-Lo sé amiga.

-¿Qué clase de afiche te gustaría? ¿Qué buscas? ¿Con imagen o sin imagen?¿Con color o sin color?¿con frase o sin frase? ¿Con dibujo o sim dibujo? ¿Costoso o Accesible? -estaba estresada y la chica me invadía con esas preguntas, no podía pensar claro, tuve que respirar profundo y tranquilizarme o podría contestar feo y no quería.
-Dame un momento para pensarlo-Tomo aire y me calmo-Me gustaría ése que está en la parte superior derecha -La chica utiliza un gancho para poder alcanzarlo-Muchas gracias.
-No es nada, espero que le guste a tu mamá.
-Vale, muchas gracias
Me dirijo a la caja registradora a pagar él afiche y luego a encontrarme con Anne en la rotonda del Centro comercial, yo tuve que ir a otra tienda por en afiche mientras Anne compraba él busito y él frasco de vidrio.
-¿Quieres?-pregunta mi amiga señalando él helado que comía mientras yo me sentaba a su lado-Está muy rico.
-SÍ, por favor-tomé él vaso de helado y metí una cucharada grande de helado de vainilla en mi boca-Amiga tengo muchos nervios hace mucho no veo a mi mamá.

-Ay por favor, es tú mamá. No es un extraño, ni una amiga, es tu mamá y cada vez que la veas tiene que ser muy especial porque sabes lo esfuerzos que hace.

-Tienes razón

-¿Cuándo no la tengo?

-Qué no se te suba a la cabeza linda-Replico finalizando la conversación.

-Bueno, es hora de irnos amiga-Anne me hala del brazo y me obliga a ponerme en pie-Tienes que preparar todo para recibir a tu mamá.

-¡Cielos! es verdad, gracias por acompañarme, en verdad no sabes lo que esto significa para mí-La abrazo muy fuerte y me despido.

Nos separamos, tomamos caminos distintos, ella a su casa y yo a la mía. Falta muy poco para que llegue mamá, la ultima vez que la llamé me dijo que a las 6:00 pm estaría aquí y son exactamente las 4:00 de la tarde aún tengo tiempo para ordenar todo.

5:58 pm

-¡Hola mi amor!- Mamá abraza a mi hermanito quien abrió la puerta, luego alza la vista y me dice-Ven aquí- Y extiende sus brazos hacía mi.

-No saben la falta que me hacen.

-Lo sabemos mami, ¿Te quedarás toda la semana?

-Me gustaría mucho Naty, pero sabes qué tengo que volver al trabajo

-Ahh sí lo sé, pero tenía la pequeña esperanza de que te quedaras más tiempo. Por cierto mamá, ¿Cuándo volverás a vivir con nosotros?-Noto cómo mamá se incomoda y al mismo tiempo se pone triste.

-Hija, por ahora no puedo venir con ustedes, tengo un buen trabajo allá y no estoy segura de conseguir uno igual acá, además no estamos mal económicamente gracias a ese empleo así que disfrutemos cada segundo que podamos pasar en familia, ¿Bueno?

-Si mami-me da un beso y se dirige por fin a papá.

Mamá haló del brazo a papá y lo llevó hasta la cocina, normalmente no soy una chismosa pero quería saber de que hablarían. Me escondo y escucho atentamente la conversación que tienen.

-¡Que sorpresa, qué pudiste viajar a visitar a tu familia!
-Augusto, no vamos a tener esa conversación.
-¡¿Por qué no?! ¡¿No crees que es un tema importante y que los niños deberían tener a su mamá presente?!
-Mira Augusto, yo me esfuerzo demasiado trabajando y lucho cada día para poderles mandar dinero y que estén bien.
-Yo podría trabajar Amanda, y es él deber ser que él hombre lleve él sustento al hogar pero me parece un concepto muy machista, así que te apoyo en todas las decisiones que tomas. Yo amo a mis hijos y los cuido, velo por ellos y trato de ser él mejor papá, pero por ejemplo: Natasha está viviendo cosas que solo las puede hablar con su mamá y no puede, porque TÚ-NO-ESTÁS.-Papá enfatizó la última frase.
-Tienes razón, no estoy con ellos tanto tiempo, pero eso no significa que no los ame o que dejé de ser su mamá, NO. Al contrario, los extraño cada día y hago todo lo posible por venir pero aveces no puedo, ahora no entiendes todo lo que estoy haciendo y lo difícil que es pero pronto lo sabrás y ¿sabes qué? Si quieres trabajar dale, los niños pueden tener una niñera.
-Ya se quedaron sin mamá, no los dejaré sin papá.-Luego de decir eso papá salió de la cocina y tuve que acurrucarme aún más para no ser descubierta.
-Espera Augusto tengo que decirte algo-Mamá intentó detenerlo del brazo pero su agarre no era tan fuerte.
-Sueltame, ¿si?. No tenemos nada de que hablar.
-Es sobre mi trabajo, creo que debo decírtelo.
-No me interesa seguir hablando de tu trabajo.
-Augusto. Te pido que por favor me escuches, es algo realmente importante.
-Amanda yo te amo, te amo como nunca he amado a nadie y si queremos conservar nuestro matrimonio y nuestra familia, disfrutemos cada segundo que estas acá, si te parece.

El amor entre mis papás es aún notable, a pesar de que hoy en día los matrimonios casi no duran y ellos llevan 17 años casados, han luchado por seguir juntos a pesar de las dificultades.

-Está bien-Responde mamá.

En ese momento corrí a las escaleras antes de que salieran de la cocina. Casi fuí descubierta pero salvé mi pellejo.
Una duda me cuestiona mucho.
¿Qué es eso tan importante que mamá quería decirle a papá?

NOTA DE AUTORA:
Gracias por esperar este capítulo, las cosas se ponen cada vez mejor.
Amanda tiene un secreto, ¿cual podría ser?

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