Qué suerte tengo, joder. Qué suerte tengo de tener a una persona que me saca mil sonrisas cada vez que estamos juntos. Y es que si le pierdo, me muero, ya que con ese hombre todo cambia y hace que me sienta en otro puto mundo. Cada tarde que estamos juntos, que pasamos el día de risas, la gente pesará qué pedo llevan. Pero no, no es así. Es como somos nosotros, al natural, sin tener que fingir ni aparentar nada. Cuando nos juntamos es una locura porque lo que he vivido con él, no lo voy a vivir con nadie y es que os juro que repetiría cada segundo a su lado mil veces. La gente habla y habla pero qué va, no pienso perderle, porque no podría llegar a perdonármelo nunca. Porque me importa, porque le quiero y porque con él puedo ser yo misma sin que me preocupe el qué decir por lo que pueda llegar a pensar de mi. Siempre ha estado a mi lado, sin importar el momento; en mis peores, en mis malas rachas, en los días en los que no me soporto ni yo misma. Así que nada, que pasen los días, las semanas, los meses y los años; que yo me quedo a su lado. Te quiero, idiota.
