× cap 4 ×

146 11 5
                                    

Narra Adrien

Me levanté de mala gana, a decir verdad no dormir muy bien después del beso fugaz que me dió, se podría decir que me quedé atontado.

Hablando de Roma escuché a Marinette y Martín hablar en el pasillo.

-¿Come stai la mia ragazza?(Traducción:¿Cómo está mi niña?)

-Molto bene, ragazzo mio(Traducción: Muy bien mi niño)

Hablando italiano, que contrariedad, como sí no supera su idiota y si no los conocíera (Bueno a Marinette no la conozco) diría que coquetean entre ellos, pero ¿Martín? ¿Coquetear? ¡Sí se les lanzan todos a el sin pedir!.

-Ayer no le avisaste a Adrien donde era su cuarto- Oh oh, Marinette lanzadas la bomba! ¡Aquí habrá tercera guerra mundial!.

-Lo sé.-Espera ¿Qué?

-¿Pensaste que se lo había dicho yo o qué?

-No.-Puedo jurar que está sonriendo.

-¡Lo hiciste a Posta verdad!-Grito enojada, ¿Posta? ¿Es es eso?.

-Sí, Mia ragazza no se enoje, no lo hize con maldad.

-Claro, claro, solo quería que me acostara con él ¿Es eso verdad?-Estamos igual Mari.

-No exactamente, pero me alegra que no lo hayan echo, era más bien...una prueba.-¡Anda hacerle pruebas a tu madre!.

-¡Anda hacerle pruebas a tu madre maldición Martín!.-¡Oye! ¡Copiona! ¡Yo ya lo había dicho!.

-Ya, ya, cálmate, ve a la cosina y prepara algo, yo despierto a Adrien y enseguida te ayuda.-Dijo y me pare a correr a mi cama para simular estar "dormido".

No logré escuchar que le contesto Marinette, aunque supongo que ir dijo "está bien".

-¡Desperta oxigenado!-Grito Mar entrando de una patada, lo maldesi fingiendo voz de dormido.

-¡Maldita sea Martín quiero dormir!.

-Ya no princesa oxigenada, ahora te necesito en la cosina.-¡El muy cabrón me va ser cocinar! ¿¡Es encerio!?

-¡Déjame en paz!-Grite.

-Vamos, tú cocinas rico!-Dice y bufé, mierda...

-¿Marinette no cocina bien acaso?.

-Obvio que sí, pero quiero comer comida de ambos.

-Maldito tragón!.

-Anda levántate y quiero unas tostadas, los wuafles los hace Marinette ! ¡Son mis favoritos!.

Maldesi por lo bajo y me levanté, está bien que me levanté hace rato pero sigo teniendo las mismas gana que antes.

Me cambié rápidamente, después me daría una ducha y todas esas cosas.

Bajé y Marinette ya se encontraba en la cosina haciendo la comida, me acerque para asustarla.

-Ni se te ocurra-Dijo y bufé, ¡Carajo todo el mundo tiene ojos en la espalda menos yo!.

-¿Cómo sabías que era yo?.

-No sabía que eras tú, pensé que era Martín pero ya te voy acostumbrando.-Dijo normal y se dió la vuelta.-Tú cocina lo demás y yo hago los wuafles.

-Está bien, ¿Martín no cocina?.

-Si querés seguir viviendo, mejor que no cociné.-Bromeo y yo reí, joder me lo imagino gritando como una niña porque se le rompió una uña.-Maldita diva...-Susurre.

-Exacto.

-Okey ya entendí, tenés ojos en la espalda, tenés un súper oído, ¿Que más?-Pregunto divertido.

-jum...veamos...-Se acercó a mí peligrosamente.-tambien tengo el poder de que hagas lo que yo quiera.-Susurro en mi oído haciendo que me tienze.-Sacas los wuafles cuando terminen de cocinarse ¿Sí? Gracias.-Hablo y se fue.

Maldición que mujer...

(...)

Narra Marinette

-¿Todo bien en la cosina?-Pregunto Martín desvían la vista desde su celular.

-Sí, ¿Por qué la pregunta?-Digo prendiendo la tele.

-Por nada...-Seguimos en lo nuestro hasta que se levantó el y se acercó a mí.-Recuerda lo que me prometiste ayer...-Susurro coqueto, a este niño no se le pasa anda.

-Ya sé, ya sé, pero ¿Sabes? Te toca ir con el novato todo el día, lo siento...-Digo fingiendo pena y el hace una mueca.

-Maldito tramposa...-Le Guiñe un ojo.

-Así me amas, ahora alejate.-Me beso "rápidamente" y sobre todo "disimuladamente" y se fue a sentar para volver a lo de antes.

Marinette, Marinette, Marinette, siempre con tus conquistas, tu si que dejas y sabes muy bien como dejar a un hombre necesitado de tí. Lastima que lo haces por una razón, acuérdate niña, no eres fuerte, no eres invencible, no eres Júpiter.

Adrien llegó con la comida y estaba más que rojo a lo que yo reí por lo bajo, le guiñe un ojo que no pasó desapercibido por Martín, miro a Adrien con las cejas levantadas y este se encogió de hombros, increíble que nos comuniquemos así.

-Sabes, Marinette se a arrepentido de darme el papel de profesor, así que ir Adrien tendrás de vuelta a tu profesora.-Escupí en la cara de Martín el café.

-¡¿Eh?!.

-Lo-qué-es-cu-chas-te.-Hablo con una toalla en la cara secándose mi escupida, bi por el rabillo del ojo que Adrien se había puesto rojo desviando la mirada, patético, verdaderamente patético.

-Yo jamás-Me interrumpió Mar.

-¡Por no acceder a tener hoy tema!-Grito y se levanto-¡Karma!-Me saco la lengua burlón.

-¿Iban a tener sexo?-Pregunto Adrien, ¿Normal no? Típico de todos los días.

-Sí, le prometí ayer a la noche si te daba las clases a tí, a cambio de acostarme con él.

-Lindo...-Dijo con duda.-En fin, ¿Qué nos toca hoy? Profesora...-Con acento coqueto hablo.

-Bien novato-Digo de la misma forma-Hoy te buscaremos ropa.

-¿Qué?

-Como escuchaste, por parte de mí necesitas ropa que a mí me guste, así que...¡De compras!-Grite feliz.

-¿O solo me quieres ver en ropa interior?-Reí y me acerque coqueta.

-Creo qué es al revés mi amor-Digo y lo bese rápidamente como anterior mente en la noche, agarré mi taza de café y me fuí.

Ja, lo que le tengo preparado a este niño.

Amor en la Mafia-MLB-(EDITANDO)Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon