II

52 5 11
                                    

Dormí como un bebé con cólicos, despertaba entre sueños cortados, calor, sudor en mi frente, frío. Lo que no se supone que es normal en una noche de mi ciudad.

Mi despertador comenzó a sonar a lo más que pudo, aunque el sonido que emanaba era distinto. Ya no se escuchaba el típico "titi titi tiiiiiiiiiiiiiiiiiiii" Era un sonido de campanas agudo.  Como el de las iglesias. 

Intente apagarlo, buscando entre las cobijas, pero no captaba la forma cuadrada que no paraba de sonar hasta que encontré un rectángulo, aplanado "¿un celular? ¿acaso esto es un celular?" Lo jale de inmediato, yo no tengo celular ¿que hacía uno en mi cama? 

Tome con cuidado el objeto, lo zafe de el mar de cobijas y sabanas y sí, era un celular. Lo encendí con el botón de en medio, que detecto mi huella y se desbloqueo, tenía de fondo una foto mía con mi mejor amigo ¿Qué? 

Traté de  entenderlo, pero me acorde del pentagrama, encendí la luz del cuarto con el apagador que estaba del lado izquierdo de mi cama. ¿Este es mi cuarto? Lucía demasiado diferente a la bodega donde mi padre me hace dormir. 

Salte a la cama que había y comencé a buscar el pentagrama, busqué y busqué, hasta que me rendí. ¿DONDE ESTABA? ¿Esta pasando esto realmente? 

¿Cambie de dimensión? 

De repente se escucho un sonido que me sobresalto...


Un simple pentagrama.Where stories live. Discover now