Ella es una chica diferente, no tiene amigas, pero no está sola, tiene a cuatro chicos que siempre están para ella, esos cuatro chicos que ama más que a nadie.
-Te encontraré, Byers.- sollozó ella dirigiéndose al supercom.
Ella lo buscará hasta enc...
Nos encontrábamos en la casa de Mike, estábamos jugando "Calabozos y Dragones." era nuestro juego favorito desde que nos conocimos, desde cuarto grado, cuándo conocí a estos maravillosos chicos que cambiaron mi vida estúpidamente, desde que lo conocí a él, a Will Byers.
-Algo se acerca, algo sediento de sangre. -Dramatizó Mike haciendo que todos abriéramos los ojos. Nos tomábamos el juego muy en serio. -Una sombra crece en el muro de atrás y los sumerge en la oscuridad. Ya casi llega.
-¿Qué es? -Exclamé con cierto entusiasmo, mirando al proveniente de la voz.
- ¿Y si es el Demogorgon? -Dijo Dustin mirándonos a todos, preocupándonos más. -Cielos, si es él estamos tan fritos.
-No es él. -Dijo Lucas mirando al enrulado y yo sonreí levemente, provocando la mirada de Will, lo mire también y sentí como la sangre se acumulaba en mis mejillas. Él sonrió.
Cielos, ¿como es que una mirada puede causar tanto en mí?
-¡Un ejercito de trogloditas irrumpió en la recámara! -Suspiré decepcionada.
-Eso si que es una mierda. -Murmuré negando, Mike entrecerró los ojos mirándome con reproche, a lo cual yo le mostré mi lengua riendo.
-Eso será fácil, ajá. -Sonrió Lucas, victorioso. Will sonrió y yo lo miré, provocando una sonrisa de mi parte también.
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-Un momento. -Susurró Mike, muy bajo, fruncí el ceño. -¿Oyeron eso? ¿Ese sonido? -Miró hacia todos lados, haciendo que nosotros también lo hiciéramos. -Boom, Boom...¡Boom! -Golpeó la mesa, nos sobresaltamos. -No fueron las trogloditas, fue otra cosa. ¡El demogorgon! -Sonreí.
-¡Carajo! -Gritó Dustin, me recliné en la silla.
-Will, ¡acción! -Grité yo tomando su brazo, el se sonrojó.
-Sí, ¡vamos, tomate! -Solté una carcajada sin gracia. Los chicos nos molestaban mucho a Will y a mí, ellos saben que el me gusta, pero no creo gustarle yo a el.
-No sé que hacer. -Puso sus manos en la mesa y miro el tablero.
-Lo que te parezca mejor, de todos modos eres un sabio. -sonrío levemente, yo también.
-¡Bola de fuego! -Gritó Lucas. Yo asentí frenéticamente, apoyando a Lucas.
-¡Necesitaría trece o más! -Me miró, tenía razón.
-No, muy peligroso. Hechizo protector. -Suspiré. Puede que Dustin tenga razón. Me miró nuevamente en forma de ayuda, no sabía que hacer, yo era la que siempre la ayudaba con estas elecciones.
-No seas cobarde, ¡Bola de fuego! -Gritó Lucas, Dustin le contradijo y así estuvieron un buen rato.
-¡El demorgorgon se cansó de sus tontos altercados humanos! -Exclamó Mike de repente, provocandome un buen susto. -¡Avanza hacia ustedes!
