Prólogo

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Pilmaiken:

Trafkintu es un rito Mapuche donde se intercambian bienes, semillas, saberes y conocimiento.

Esta obra es una disposición de confianza en letras efímeras hechas de viento y sueños.

Aquí se permuta la palabra, complementándose con sonidos, melodías, música y voces que consolidan la diversidad de cada uno; abrazándonos desde tres honduras diferentes.

Mañuntun:

Magomer: infinitas gracias por escuchar mi pensamiento y acunar mi otra visión del mundo.

Carinavolans: Gracias por dejar que mis letras te habiten con sus melodías.

Aladeriva: Chaltumai por la más hermosa de las portadas.

Somos sólo un leve suspiro latiendo desde nuestras propias individualidades.

Carinavolans:

Las melodías y los pliegues de la voz seguirán los pasos de agua y tierra. Pasos que guían hacia las raíces de una golondrina.

Las letras de estas canciones siembran una verdad, que canta para ser oída y ser compartida.

El espíritu de esta música es la gestación de una semilla, que representa vida.

Magomer:

Quiero hacer algunas indicaciones sobre la música.

En primer lugar no se pretende, cosa imposible por otra parte, ni descubrir ni sustituir la música mapuche. Este pueblo ya tiene su música y sus excepcionales intérpretes, tanto tradicional como actual, de la que queremos aprender aunque solo sea una mínima parte. La intención es musicalizar ciertos poemas de una persona arraigada en esa cultura y si acaso, aportar un solidario granito de arena, forzosamente personal, a la divulgación de la problemática que afecta a ese pueblo.

En segundo lugar advertimos que los poemas, mucho más cortos que una canción corriente y sin la estructura típica de estas, una vez musicalizados tienen el carácter de pequeños botones de muestra, de cortas ráfagas musicales. Se tiende más a crear un clima a lo largo de las diez o doce composiciones que tendrá el cuaderno, que a desplegar espectaculares y largas creaciones musicales.

Indicaré también que esto no es música de estudio profesional, no deja de ser música casera, realizada con los medios que todos tenemos en nuestro hogar y a veces hasta con el océano de por medio en las colaboraciones.

Solo me queda desear que este reto sea, al menos, medianamente agradable a vuestra vista y a vuestros oídos.

Trafkintu De La TierraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora