C 49: Calidez

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(He vuelto con otro capítulo, no puedo creer que ya estemos aquí, en el penúltimo capítulo, creo que lloraré xD

Escritora: muy bien chicos, comencemos, luces, cámara y acción...!!!!)

Para todos los presentes fue inesperado cada uno de los acontecimientos pasados. Sesshomaru, un Daiyokai sanguinario, comportándose así. Era obvio su proceder, no obstante, terminaba de ser irreal. Casi mata a su medio hermano reclamando a Kagome. ¡Cielo santo!, nadie lo esperaba.

Los padres de la joven conocían de la repentina obsesión por el demonio en su hija pero... nadie llegó a intuir la atracción de él hacia ella. Incluso los progenitores del hombre permanecían callados y confundidos. Se veían unos con otros.

-¿Quién les dice que la ceremonia ya va a comenzar?- dice Bankotsu.

-No me miren a mí- se adelanta Inuyasha -Yo mejor espero en el jardín- se retira seguido de su futura esposa.

La tensión era grande, nadie quería interumpir lo que sea que estuvieran haciendo. Las miradas iba de una persona a otra.

-Sus padres debería hacerlo- dice Hitomiko.

-Yo no- arremete Irazue -Estoy ocupada con la organización...

-Yo estoy ayudando a la señora Irazue...- dice Midoriko.

-¿Qué hay de ustedes?- pregunta Sango señalando a los dos yokais.

-Yo...- Naraku trata de buscar una excusa -Debo...

-Yo tengo que ayudar a mi otro hijo- interrumpe Inu no Taisho.

Las miradas recayeron en Naraku quién seguía tratando de encontrar una excusa.

-Hola- aparece Koga.

-¡Koga!- gritan todos con una sonrisa malévola.

-Oigan... ¿Qué pasa?- tiembla asustado.
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Sesshomaru se dedicaba a besar los labios de aquella azabache de ojos azules.

-La boda... ya va a comenzar- suspira encantada. Él se separa.

-No me interesa- vuelve a besarla.

Lleva sus manos a aquella cintura cuyas curvas le encantaban. Realmente no le importaba la dichosa boda, Inuyasha podría casarse con quién quisiera, con un ciempiés si lo desea y a él seguiría sin importarle.

-Es importante para mí- dice retirándose un poco y poder verle a los ojos.

El notar como sus cejas se juntan para formar ése divino ceño fruncido la hizo reír.

-Es mi mejor amigo, tu hermano y Kikyo es mi amiga también...- acaricia la arruga en su frente por el enojo -Te ves sexi molesto, espera... siempre estás molesto...- se le escapa una risada.

Taisho no sabía si sentirse halagado o más molesto, pensaba en eso cuando tocaron la puerta, ninguno contestó. Se abrió lentamente.

-O-oigan- dice el lobo -Ya va a comenzar la ceremonia y... necesitan su presencia- habla con total valentía.

El daiyokai ruge pero la joven le toma el rostro, deposita un fugaz beso en su mejilla y le sonríe.

-Ya oíste- se separó de él y fue hasta la salida.

No tuvo más opción que seguirla, al pasar al lado del idiota de Koga lo miró furioso, el lobo tembló.

Ya todos los invitados se dirigían al enorme jardín, poco a poco tomaban sus lugares, la ceremonia estaba a punto de comenzar. Taisho ocupó su lugar cerca de su familia obviando las miradas curiosas. Kagome permanecía más atrás junto a sus padres y amigos, de vez en vez los azules cielos volteaban al yokai. ¡Que increíble poder recordarle!, todo lo que habían vivido juntos... todos los momentos bueno y los malos. Pensó en su familia humana, ¿Podría volver a verlos...?

Tal como te imaginé (Sesshome)Where stories live. Discover now