ACTO II: Capítulo .5 y I

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Levi procedió a quitarse las botas, el día fue largo, decepcionante. Había decidido sentarse en su silla dando final a este día tan "catastrófico"

"Pensé que no podría tener paz en mi propia cas..."

"Levi!!!!!"

El grito de Hanji atravesó la casa y casi despertó a su pequeña.

"...sssa, mierda, tal vez hablé demasiado pronto"

Levi se levantó del cómodo sofá en el que dormiriá. Llevó su periódico que estaba sobre una mesa qué sostenía la vieja lámpara. Para encontrar a Hanji en la cocina.

"Bienvenida Cuatro Ojos"

Dijo con sarcasmo antes de dar un leve golpe con el periódico a la cabeza de Hanji, al ver el desastre de ella comiendo de inmediato se puso a limpiar.

"¿Hubo suerte?"

"Da veddad ed quedd"

"No hables con la boca llena idiota"

Cerró los labios de Hanji con sus dedos y le susurró que terminará de mascar.

Terminó la cena

Ambos se miraron a los ojos, Levi limpió sus labios y sus mejillas llenas de Comida. Hace 6 dias (Casi una Semana) que comían sobras de lo mismo.

"Hanji...encontraremos algo, ¿deacuerdo?"

Beso su frente y la tomó en brazos, después de comer se había quedado medio dormida sobre la silla de la cocina.

"Levi, mí pequeño amor... yo lo siento"

"¿Puedes Dormir Gafas?, ambos lo necesitamos"

La casa era de sólo una habitación, eso dice ya mucho de que tan pequeña podía ser, un baño, una cocina y en la misma el comedor, eso sí todo limpió cómo le gustaba a Levi.

Llegando a la única habitación, Levi dejo con cuidado a Hanji sobre la cama, junto a su "pequeña persona" (bebé) pero así le decía el.

"Es linda, ¿no?"

"No es fea"

"Levi!!!"

Le dio un codazo Sin fuerzas.

"Si, es linda"

Ella se tapó y a su hija, con sus brazos protegiendola al mismo tiempo que mimandola hasta quedarse dormida.

El sólo podía observar, cómo ambas eran parecidas, una tenía casi 40 y la otra casi 4, pero amaba a ambas.
Pensó, cómo Hanji había bajado mucho de peso por la comida que escaseaba en casa.

"Sólo es una mala racha"

Quiso pensar y dormir después, pero aunque quisiera, la cama era tan pequeña para Hanji, su hija y el al mismo tiempo.

Capítulo I:

Hanji despertó con un olor raro en su nariz, y un sabor raro a su boca.

"¿Levi?"

Pero no era el quien tenía su pañal sobre su cara.

"Hally!!!"

No estába enojada pero si sorprendida, cambió el pañal a regañadientes. Saludando a su Hija con un beso en el ombligo después de limpiarla.
Con ella en brazos, se dirigió a la cocina teniendo unas cuantas palabras en la boca.

"Oye enano...

El interrumpió quitandole a la pequeña.

"No mierda, no me tocaba cambiarla hoy..."

Una Carta Larga Para Hanji Donde viven las historias. Descúbrelo ahora