幽霊 ghostie. ♡pjm

ゼロ.

El sueño de Jimin siempre había sido presentar un cover frente a toda la escuela.

Demostrar lo talentoso que era. Confiaba en él, pasaba noche, tras noche, todo un mes ensayando.

Desvelandosé y madrugando para poder cumplir su sueño.

Había una canción en específico que en lo personal, él tenía una fascinación por ella. Llevaba por nombre "Lullaby".

Era por fin el día en que él podía presentarla, toda la escuela estaría reunida en la fogata de hoy.
Domingo por la noche.

Recuerdo el aroma de la madera quemándose, el calor que brindaba.

Muchos procedimos a sentarnos cerca para poder sentir calidez, en mi caso, había querido estar cerca para poder apreciar su voz.

La guitarra de su amigo Seokjin comenzó a sonar, aquella melodía que tocarían era la misma que Jimin pasaba tarareando en clases.

Jungkook hizo segunda, comenzó con su melodiosa voz, una voz linda, después de las primeras líneas comenzó él. La voz de Jimin era como un pastel dulce, no empalagosa, si no dulce, suave, era única.

Taehyung cantó después; la manera en que las voces de los 4 chicos encajaban era perfecta. Era un sueño.

Ver a Jimin haciendo lo que le gustaba. Cantar; todo el tiempo tuvo una sonrisa en su rostro, cuando agradecieron al público.

Se fijó en mi.

En la chica que no paraba de gritar y aplaudir.
Me miro y me agradeció con una tímida sonrisa.

Sus ojos sonrieron con él, y su hoyuelo travieso salió a la vista.

Me acerqué, sin propósito de su número, aunque aún así conseguí el de Taehyung, a pesar de que no era mi intención.

Yo solo quería decirle lo mucho que amaba su voz.

―Tu voz...tu voz es muy hermosa. ――Jimin giro a verme con cierta ternura.

―¿Enserio lo crees? Siento que no salió tan bien como esperaba.――Rascaba su nuca, apenado.

Más no había de que avergonzarse, porque eso que había presenciado fue lo mejor que mis oídos pudieron oír en todos estos años de mi vida.

―Puedo decir, con seguridad, que tú voz es la más hermosa que he escuchado.

Sin embargo antes de que él pudiese agradecer, unas risas se hicieron presentes. El grupo de amigas de su novia llegó para recordarles a todas que él tenía dueña.
O eso parecía.
Alejaban a las chicas con la punta de sus dedos y Maddie, la pareja de Jimin me dio un leve empujón, haciéndome chocar con las demás.

―Se acabo la firma de autógrafos, princesas. Vuelvan a sus lugares y calmen esas ansias.――Jimin sonrió un poco por las ocurrencias de su novia.

Me quedé por un momento admirando a Jimin, la manera en la que observaba a Maddie, tan enamorado. Casi igual, como yo lo miraba a él.

―Hey, cucú.

Chasquearon los dedos frente a mi, devolviéndome a la realidad. La amiga de Maddie, Yooseob está cruzada de brazos frente a mi. Con un semblante molesto.

―¿Por qué no te has ido aún? Retrasada.

Auch, no había necesidad de decir eso.
¿O es lo que parezco ahora mismo?

Tal vez, debo dejar de mirarlo.

―Yooseob, no seas tan grosera. ―― La pareja de Jimin me defendió. ――¿No fuiste tú la que llevo esos girasoles para Jimin cuando tuvo ese accidente de motocicleta?"

Avergonzada, asentí. Jimin rápidamente se puso frente a su novia.
Tal parece que él no sabía que había sido yo.

Ni siquiera porque puse mi nombre en la tarjeta.

―Aquel gesto, fue muy dulce, gracias.
Hizo una reverencia y sus amigos se marcharon de ahí junto a él.

Y yo pase el resto de la fogata feliz, sin pensar en otra cosa en qué está noche, Jimin olía a bombones.

Siempre me he considerado una persona que pasa desapercibida sobre toda la escuela. Nadie me llama si no es necesario, así que el hecho de que Jimin y Maddie está noche me hayan notado y charlado conmigo me ponía algo contenta.

Sentada frente a mis compañeras de clase, apreciamos a Jungkook y Jin, quienes eran los únicos que ahora cantaban.

La voz de Jungkook era igual de embriagante que la de Jimin, la manera en que armonizaba junto a Jin era celestial.
Todos ellos tenían mucho talento.

Y de cierta manera, era grato que fuese parte de esas personas que tenían el placer de escucharlos.

Dentro de la escuela, colocaron un puesto de fotografías, fueron tomadas durante todo el evento, por lo que algunos se buscaban en ellas.

Tomé una y para mí suerte Jimin salía sonriendo en ella lo que me hacía sentir afortunada.

Esta fue arrebatada de mis manos por la mencionada amiga de Maddie.
―¿Entiendes lo que significa novio? Para ser una mustia eres demasiado zorra.
Confundida la vi guardar en su bolsillo la foto que habia tomado de Jimin.

"Maddie puede ser demasiado confiada, pero yo sé tus intenciones y más te vale, alejarte de Jimin y no intervenir en su relación. ¿Oíste?"

"Yo no intento intervenir nada".
Pronuncie a la defensiva y ella me aventó a la pizarra.

Arrugo la foto aventándola lejos de mi.

Corrí antes de que el viento se la llevase, la tomé en mis manos y desarrugue con algo de tristeza.

Era la primera vez que mamá me dejaba venir a estos eventos, era mi único recuerdo.

Había escuchado que Yooseob amenazaba a las chicas que gustaban de Jimin, pero no creí que fuese cierto.

Por el pasillo solitario, solo se escuchaban mis pisadas, eran las 10 PM, ¡Tenía que llegar a casa a las 9! Envié un mensaje a mamá, y guarde mi teléfono.

Bajé las escaleras ya con mi mochila y sudadera puesta.

Observa la majestuosa foto de Jimin que tenía.

―Jimin está cantando de nuevo.――dijeron unas chicas corriendo a la fogata.

Siguiendo el paso, corrí tras ellas.

Pero mis piernas dejaron de moverse.

Y mi cuerpo dejo de responder.

De un momento a otro.

Todo se puso oscuro.

No recuerdo nada después de eso.

Más que la voz de Jimin resonando en mi mente y oídos.