¡ERES MI MEMORIA! © [✔️] ENEM#2

33. Jugando a los cazafantasmas

Para comprar tú libro, tienes que ingresar a Tintalibre y escribir "Esa niñera es ¡mía!"
Sólo están disponibles las ventas online, en Mar del Plata, la novela se encuentra en la librería "Euroka libros y juguetes" (por ahora la única librería en la que se encuentra disponible)
Sin embargo puedes obtenerlo en físico, siempre y cuando sigas los pasos de compra en via online.
Cualquier duda, por favor avisarme al privado, y si te interesa la compra, el link se encuentra en la descripción de mi perfil❣

Dylan'S

El suspiro de Eli, y su mano golpeando mi hombro, hizo que me de un paro cardíaco.

-¿Qué pasa? - dije sentándome en la cama con mis ojos cerrados - ¿estás bien? ¿te sientes mareada de nuevo? Eli - abrí mis ojos al ver que no contesta.

-Sentí pasos en el pasillo - dijo con sus ojos abiertos, y frente transpirada.

Hice una mueca y me fije en la puerta - no debe ser nada - me fije en la hora - son las 3.33am, vuelve a dormir.

-El horario anticristo - dijo tragando fuertemente.

-¿El qué? - dije alzando una ceja.

-La mitad de 666, el anticristo Dylan - dijo con su cabello todo revuelto.

Me puse serio - oye, quisiste venir a casa porque los llantos de Aaron a la noche te daban miedo - puse mis ojos en blanco - pero ahora tu me estás asustando a mí.

-Ve a ver - dijo sin despegar la mirada de la puerta.

Sonreí de costado y rodé mis ojos, que exagerada. Un ruido seco se oyó del otro lado, y sentí mi cuerpo congelarse al mismo tiempo que mi estómago caía por un vacío. Un sudor frío comenzó a abrazarme y mis manos comenzaron a temblar.

-¿Lo oíste? - dijo aterrada.

Bufé molesto intentando hacerme el indiferente (cosa que no funcionó)

-Eli, debe de ser el viento - dije para calmar, no sólo a ella, sino a mí.

-Ve a ver - dijo apretando sus dientes.

Me crucé de brazos - ve tú.

Eli me miró incrédula - estoy embarazada, y además - dijo tendiéndome la mano suavemente - ¡tu eres el dueño de ésta casa! ¡hazte cargo! - dijo gritando por lo bajo, y tirando de mi brazo.

Me levanté sin ganas y la miré con un puchero - no quiero ir sólo - Eli se cruzó de brazos - está bien, iré.

A paso lento me acerqué hasta la puerta, y con la linterna encendida de mi celular.

Antes de salir, me giré para ver a Eli - no puedo.

-Si puedes - dijo tapando su cara con una almohada - ya deja de chillar y sal.

-¿Segura que no quieres...

-No gracias. Esa propuesta no está dentro de mi diccionario - dijo sonriendo - comportate como un gorila.

-Pero soy un simio - dije en tono súplica - además no quiero morir, no quiero dejar sin padre a nuestro hijo.

Eli asintió y frotó su vientre - tienes razón, le diré que su padre fue todo un héroe.

La miré serio - se supone que me tendrías que haber dicho que no vaya.

-¿Y dejar que esa cosa que está allí me coma? - dijo alzando sus cejas - paso.

Rodé mis ojos y me volteé de nuevo a la puerta - okey - dije girando el picaporte.

-Recuerda que te amo - dijo desde mi cama.